Playa de Santa Justa, Cantabria

Una playa pequeña pero perciosa. La pena es que hayan quitado el pequeño chiringuito, que estaba genial. Comer o tomarse un vino ahí era una autentica pasada.

El fácil acceso a la playa y a la ermita en el acantilado también es un paseo fácil. Nos sorprendió positivamente que las olas fueran lo suficientemente buenas para hacer bodyboard, pero también vimos muchas medusas. Hay un camión de comida junto al aparcamiento si necesitas suministros.

Bonito sitio, tranquilo, tiene año especial.
La llegada es algo brusca pero merece la pena.

Playa bonita con una pequeña iglesia a tocar del agua casi, poco parking. Pequeño puesto para comer algo y mesas y bancos.

Muy bonita, lo único que la accesibilidad es terrible, si no eres de la zona tienes q aparcar a más de un kilómetro

Un pequeño paraíso es esta playa con un acceso estrecho pero con todas las facilidades desde duchas, chiringuito aunque no hay baños. Añadir a la playa el valor de su ermita empotrada en la roca y los restos de una fortaleza en la cima del acantilado.

Una ruta bonita y fácil cerca de Santillana del Mar. Totalmente recomendable. Interesante llegar hasta la ermita.

Una vergüenza que hayan derribado uno de los chinguiritos mejores del cantabrico. Estaba integrado en el entorno. Era respetuoso. Pero algún listo de los de ley de costas se le ha ocurrido llevarse por delante esa joya en vez de cargarse esas torres salvajes de Laredo o Benidorm. Una pérdida irreparable de maravillosos momentos allí pasados por muchos cántabros y gentes de fuera. Mi total reprobación personal ante la dudosa inteligencia del que dictó ese derribo. Se podía dedicar a otra profesión donde su aptitud fuera mucho más acertada.

Preciosa y pequeña plata la de Santa Justa. Merece la pena visitar la Ermita del mismo nombre dando un paseo y la torre de San Telmo que está al lado. El camino a la ermita y la torre no es fácil con cochecitos de bebé ni personas con movilidad reducida.

Playa pequeña y mística, hay una pequeña Ermita, esta situada en un entorno natural inmejorable. Dispone de un aparcamiento cercano donde dejar el coche y bajar caminando unos metros hasta la playa.

Es una playa muy bonita aunque no demasiado grande. Tiene duchas y columpios para los niños. También zona de césped

Una playa preciosa donde pasamos un día maravilloso. Destacar la tranquilidad, la limpieza y sin problemas para aparcar. Mención especial para el Food truck, una familia super amable con la que conversamos mientras nos comimos una hamburguesa buenisimaaa, de las mejores que hemos comido

Qué lugar tan hermoso. Llovía, hacía viento y las olas rompían con fuerza contra las rocas. La playa es recogida, está bordeada de senderos que suben a los acantilados y a un lado, cobijada bajo un farallón, se levanta una pequeña ermita, cuyo interior se ve desde una ventana una vez que los ojos se habitúan a la oscuridad. Es un precioso paseo tanto en días soleados como nublados.

Lugar con mucho encanto. Playa pequeña que puede casi desaparecer con marea alta. Impresionante vista a la ermita de Santa Justa y a la torre de San Telmo. Merece la pena pasear hasta estos lugares con el calzado adecuado.

Lugar espectacular con un encanto único, una playa muy natural y limpia, lugar ideal para pasar el día con niños.

Playa con mucho encanto, con una ermita encajada, pasarelas y un pequeño parque. Recomendable visitarla.

El parking está muy cerca de la playa, pequeña, acogedora, tranquila y con grifo de ducha al salir.

Un lugar muy bonito, vale la pena acercarse. Allí se encuentra la ermita de Santa Justa, entre las rocas

Muy bonito el entorno de la iglesia de Santa justa, un paseo de 1km que junto con el día que hacía lo disfrutamos mucho.

Una playa pequeñita, escondida e ideal, con mucho oleaje, todo genial excepto porque estaba bastante revuelta y un poco sucia