Aromes, Barcelona

Caminando por la calle y sin conocer el sitio, verlo y llamarte la atención y entrar.
Pues eso, llamativo, bonito y se nota que cuidan hasta el último detalle.
Buen desayuno, ambiente agradable y servicio-atención correcta.

Menú de mediodia justito de calidad. Macarrones con tomate (literal) cocidos de más. Chuletas duras, mal cocinadas. Y postres se les acaban y solo te dan de los que les queda. Mientras ves en la barra (es una panaderia) otros postres de la misma calidad que no te los ofrecen. No me ha gustado ni repetiré. No me ha gustado ese detalle. Si se te acaban los postres más demandados, no me ofrezcas solo los restos cuando tienes otros fuera de menú de igual calidad. Eso no se hace.

Muy buen servicio, muy amables. Nos ha gustado mucho el chocolate caliente con churros, el que lleva 70% de cacau está especialmente bueno para los amantes del chocolate negro.

Las camareras son súper atentas. Y la comida está genial, sobretodo los gofres. Súper recomendado.

Por los comentarios pensé que estaría mejor de lo que realmente es. La carta es cara para lo que es y encima hay cosas que están en la carta pero en verdad no tienen. Pedí un zumo natural y ya no les quedaba. No lo recomiendo

He ido hoy a merendar, he tomado la recomendación de las chicas; un zumo y un bocata Olesa. Me ha encantado:) volveré sin duda, una atención personalizada y a mi gusto. Lo recomiendo!

Bastante decepcionado. Había mucho ruido y el precio es caro por lo que venden.

Tenía la idea de que si los trabajadores son agradables y el baño está limpio es un buen sitio para ir, pero en esta cafetería he comprobado que no siempre se cumple esa norma.

Establecimiento que cierra a las 19: 30 y a las 18: 40 me comunican que ya no hacían más creps porque ya habían limpiado la máquina.pocas ganas de trabajar.

Siempre amables, cafés y comida deliciosos. 100% recomendable, uno de nuestros sitios favoritos. Lugar bonito y tranquilo para estudiar, trabajar o simplemente charlar un rato.

Una cafeteria de barri amb cor. Diría que es una cafeteria retro i al mateix cop modern. La atenció es molt bona, la decoració evoca a la llar de la avia, i sobre tot, la estrella es el producte. Tot casolà. Bueno, pot ser no tot…. Les magdalenes semblaven industrials i els croissants pot ser tambè. El café es de bona qualitat (si el comparem amb la mitja de cafes dels bars de BCN). Jo he tastat una galeta amb trossets de xocolata. Amb el tradicional gust de la mantega, la textura de les galetes casolanes, una mica seques però en el bon sentit, sense la margarina o greixos industrials que pot ser fan els productes mes tous però al cop que menys sans. Hi ha moltes opcions. He vist uns brownies amb molt bona pinta, pastís de pastanaga, de formatge, de llimona. Está clar que no es un menú tradicional Català. Es sembla mes al de una cafeteria Nord-americana, però això no li lleva el mèrit. Preus estàndard. Recomenable.

Un local si miras al techo bastante cutre sin terminar le pregunto ala camarera de que esta echo el trozo de pastel que venden i no sabe decir de que esta echo, gofres grandes pero nada del otro mundo, con prisas mal atendido yo no entrare mas sinceramente.

Excelente! No sólo todo lo que ofrecen es buenísimo, Además el lugar es precioso y la atención muy buena.