Arsenal, Barcelona

Buen gimnasio. Limpio y pulido. Personal amable. Buenas instalaciones. Mucha socia con muy poco pudor: NO HACE FALTA PASEARSE DESNUDA POR LOS VESTIDORES.

Centro de acondicionamiento integral para la mujer tiene gym, peluqueria y estetica entre otros.

Me encanta este club. Tiene todo y las instalaciones de máxima calidad. El personal muy amable y simpática. Barra libre de toallas y una zona de agua con piscina grande y sauna seca y húmeda. Hay un montón de clases dirigidas para elegir y a todas horas. Tambiem tiene piscina al aire libre y hamacas para tomar el sol. Vale mucho la pena y precio/calidad es muy bueno.

Me encanta! Hay todo lo que necesitas para la salud y belleza. El spa es increíble. Sólo para mujeres ;)

Perfecto! Las instalaciones siempre limpias y tiene todo tipo de clases. Hasta te entregan las toallas. Y por sobre todo eso, la piscina en el techo está ideal para descansar después de terminar la rutina de ejercicios.

Balance negativo después de varios meses y de apuntarme con mucha ilusión.
Mala atención por parte de algunas trabajadoras, no todas, pero sí las suficientes como para sentirse incómoda. Un poco de mal ambiente, especialmente en la cafetería, donde no es nada raro escuchar al personal criticar a las clientas, discutir entre ellas o ver cómo te ponen mala cara si les pides algo.
Taquillas anticuadas que se cierran con la tarjeta que hay que llevar a todas partes y que las socias pierden a menudo (señal de que muy buen método no es). Sistema de entrada obsoleto: hay que dejar la tarjeta en recepción para que comprueben que estás al corriente del pago y luego volver pasarla por un torno para acceder a las instalaciones, a diferencia del Metropolitan Iradier donde entras con huella dactilar y no tienes que perder el tiempo esperando en recepción a que pasen las tarjetas de todo el mundo y el hola que tal.
Algo parecido pasa con las toallas, que tienes que coger bajo la atenta mirada de la gobernanta, en lugar de dejarlas preparadas y sin que nadie mire si nos llevamos dos o cinco, como se hace, repito, en el Metroplitan Iradier, donde se está mejor y tienes una sensación de mayor privacidad, de ir más a tu aire.
A destacar la gobernanta filipina con sus resoplidos y malas caras y llamando a las socias "niña" (no de buenas maneras).
En los meses de verano las socias que se vayan de vacaciones tienen que pagar 60 euros para mantener la taquilla y la matrícula a cambio de no poder pisar el gimnasio ni un solo día hasta septiembre. Luego te encuentras con ofertas de Groupalia y demás donde ofrecen la mensualidad de junio, julio y agosto por 60 euros para "nuevas socias" (que luego no se apuntan) Es decir, nosotras pagamos 60 para no ir mientras otras pagan 60 euros por ir.
En cuanto a las actividades, no se cumplen los objetivos físicos porque la mayoría de las clases van destinadas a un público de mediana edad y apenas hay clases de alta intensidad.
Lo mejor son las instalaciones, la calidad y atención del profesorado y la zona de aguas, pero no compensa.