Bar Cervecería Tormes, Barcelona
| Direccion | Carrer Maresme, 3, Sant Andreu de la Barca, Barcelona | ||||||||||||
| Telefono | +34 936 82 12 50 | ||||||||||||
| Horas |
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| Categories | Restaurante | ||||||||||||
| Clasificacion | 3.3 8 opiniones | ||||||||||||
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Bar Cervecería Tormes opiniones
8 Ideal para tapear, productos de gran cálidad, embutidos de Salamanca y marisco.
Relación calidad precio muy buena.
Dispone de un espacio de mesas en el exterior bajo una carpa y mesas tambien en el interior.
Durante la semana también hay menú.
Es un sitio ideal para una cena en pareja o con amigos.
Seguro que repetiremos.
No pudimos comer, el camarero le dijo a la mesa de al lado a las 9.30 que no les esperaba 2 minutos para comer, los echo prácticamente. Con nosotros fue muy desagradable. Nos fuimos sin cenar también.
El mejor bar de sant andres sin duda, comida riquísima todo casero 100% y de calidad, y muy buen servicio.
Trato muy bueno. Fuimos a cenar y estaba lleno, pero nos montaron una mesa igualmente. Mención especial al lacón, una tapa grande y muy bueno, de los mejores que he probado por la zona. La terraza es muy acogedora decorada con lucecitas.
DUEÑO PÉSIMO, arrogante, prepotente, borde, mala persona y ladrón (siempre en mi humilde opinion). Nos sentamos a comer y cuando estábamos pidiendo, entre nosotros una niña de 6 años y 3 adultos, pedimos 3 menús para que la niña compartiese menú con su madre, ya que cualquier persona de este mundo entiende lo que come una niña de 6 años, menos él. Nos informo el camarero de forma excelente de que no se podía compartir menú, que cuando viniese la cuenta nos cobrarían 4, aún sin pedirlo, entonces le dijimos que nos beberiamos la cerveza y nos íbamos, puesto que le preguntamos por pedir los 3 menú y un bocadillo, a lo cual nos respondió que tampoco era posible. A los 2 minutos sale el dueño y nos dice que no podemos ocupar la mesa si no queremos comer. Le contesto que si quiero, pero no me lo permite pq me obliga a que una niña de 6 años coma un menú, a lo cual el tio chulo responde que los cubiertos se manchan. En fin, gracias que personas como estas hay pocas por el mundo.
Calidad, simpatía y a destacar los calamares a la plancha y los montaditos. Llegamos y estaban todas las mesas ocupadas y aún así nos invitaron con amabilidad a esperar unos minutos, valió la pena.
El trato fue pésimo. Fui a desayunar y no tenían nada dulce para acompañar a un café con leche, sólo bocadillos. Cuando entre a pagar ni me miró a la cara ni tique me dio. Un borde el camarero.