Bar Restaurant Santa Margarida, Girona

Correcte. Bon menjar (fessols de Santa Pau, brasa), bé de preu. Servei "amateur", però atent i servicial.

Un local acogedor, un trato familiar y agradable.
Con la tradicional comida catalana de calidad.

Entrepans caríssims i sense quasi matèria prima.
Vaig demanar un entrepà de bull, em va costar 5€ i quan me’l vaig menjar hi havia 4 lonxes fines fines de bull, vaja, que no s’ho val en absolut! No hi tornaria!

Han tardado más de una hora y como no han traído más que pan tostado y bebida. Decidimos pagar y marchar. El dueño muy maleducado nos empuja y dice que no podemos marchar. De verguenza. Todo el comedor con retrasos de más de una hora. Nada recomendable. Para denunciarlos.

Hace más de ocho años que venimos a este restaurante cuando visitamos la zona. Incluso nos hemos llegado a desviar solo para comer los fessols con botifarra esparragada. Es un restaurante honesto y familiar de cocina tradicional. Buen producto. Son muy amables y no ponen impedimentos por venir con dos perros. Quizás un poco lentos, pero cuando venimos aquí es para disfrutar relajadamente del día, así que tampoco pasa nada. Una lástima enterarnos hoy que está en traspaso.

Me parece un poco raro la disparidad de opiniones para este sitio.
Nos la jugamos un poco y decidimos probar aunque no tuviese buena nota, tampoco hay mucho donde elegir por la zona…
Un sábado y reservamos esa misma mañana para 6.
Es cierto que el dueño tiene un humor que puede ser un tanto particular pero para nada es mal educado! Con nosotros se portó genial, muy simpático y recomendándonos platos con toda la tranquilidad del mundo.
La comida está bien, en especial la carne!
Puntazo positivo al alioli casero
En fin, calidad-precio muy recomendable!

Buena cocina y precios contenidos. Gente amable pero se les ha fallado la previsión de la clientela y no les a pillado preparados, todo a sido satisfactorio pero muy lento

No nos querían servir, hemos llegado a las 12: 10 y no nos han querido servir nada de comer, ni una tostada, ni bocadillos fríos.
La excusa era que tenían que comer ellos antes del servicio de cocina. Un lugar que sus días de máxima afluencia es en fin de semana, con un tránsito de cientos de personas delante del local, y no son capaces de comer por turnos para seguir atendiendo a la clientela, pero el local abierto?

Paramos a hacer el Vermout mientras íbamos de ruta en moto, y no nos dieron nada para picar, decían que tenían que comer ellos y que no nos podían hacer ni siquiera una tapilla, no volveré.

Una localización preciosa, bar limpio, con buenas instalaciones (no son nuevas, pero no es necesario). Los alrededores son preciosos.

Servei pèsim, qualitat molt justa en relació al preu, bastant brut fins i tot el jove que feia de cambrer (. Que no ho era) va trepitjar una cuca.
Tenen sort de la ubicació, del contrari segur que no aniria ningú.
Impossible repetir!

Vam compartir una selecció de primers plats entre tots i cadascú va demanar un segon plat tenint en compte les especialitats de la casa: Pollastre amb escamarlans, amanida tèbia, caragols, calamars farcits, fesols de Santa Pau. (i de postres: flam de ratafia i crema catalana)
Molt recomanable!

-Hola!
-I vosaltres?
-Hola buenas, queríamos pedir un café solo y un americano
-Ara no podem

Mira, me da igual que te hable en castellano y me contestes en catalán. Pero:
-ni hola, ni adiós, ni perdona ni nada
-te iba a pagar, no te he pedido que me los regalaras

En fin, entiendo que teníais mucho trabajo pero eso no es una excusa para faltar de educación. Cuidado con cómo tratáis a la gente.

Llegamos a este sítio para almorzar, había muchas mesas vacías y nos sentamos. Pedimos cuatro veces que nos atendieran y la quinta vez le pedí al dueño que nos informara que si no nos iba a atender nos avisaría para que pudiéramos buscar otro sítio. Su respuesta fue: ¡entonces marchate!
¿Qué más se puede decir de un sítio como este?
No pierdas tu tiempo y dinero en un sítio como este.

Cocina casera. Muy buena calidad precio. Plato típico de la zona els Fesols de Santa Pau. (moncheta pequeña).

Llegamos nos sientan en una mesa y pregunto si me podrían calentar la comida de nuestra hija, aceptan, mientras le doi de comer se sienta otra familia a nuestro lado, mi hija termina de comer y siguen sin traernos ni la carta, atienden a la otra familia y marchan les llamo para ver si pueden traer la carta pasan cóm 10 min y las traen vuelven a pasar otros 20 minutos y les digo que cuando puedan ya pueden tomar nota se marchan pasan otros 20 minutos y cuando decidimos a irnos les digo nos marchamos ya lo siento y el dueño empieza a increparnos, diciéndonos que la próxima vez nos pasáramos de largo, que le teníamos que pagar ya que nos hemos sentado y que ahora tiene que desinfectar la mesa (cosa que ni habíamos apenas usado)

Lloc on fer un dinar amb tranquil·litat i bons aliments de la comarca amb un paisatge de muntanya envoltat de volcans, on hi ha un camí per passejar d'allò més relaxat després del dinar. Els dilluns escudella i carn d'olla.canelons, amanida etc.gràcies

Sólo digo una cosa, si pasa Chicote por este restaurante sale un capítulo de lo más entretenido.

Lo positivo la comida no es mala, un poco de batalla, pero no lo que esperas de un restaurante de la Garrotxa. Vamos un poco mejor que un bar de polígono, però tampoco te hagas ilusiones. Hemos pedido oca con bolets "su plato estrella" muy bueno pero frío. La ración de pan escasa, y los postres buenos.

Mucha paciencia, servicio simpatico però muy lento y poco efectivo.

Total 4 cervezas, 1 ensalada, 2 platos estrellas, 2 cafés, 2 flan 62€. Para eso me hago un bocadillo y el resto en cubatas

Le pongo una estrella por qué el all i oli estaba bueno. La comida es muy justa, el servicio desastroso, esperamos casi 2 horas para que llegarán los segundos y encima se equivocaron.

Trato esquisito, se come bien però algo caro, parece todo barato y te van sumando 1,50 por cada tostada etc.al final 1 plato para cada uno 3 personas +cafes 41 eu. Los canalones estan buenísimos eso sí.