Cafè L'estudi, Tarragona

Lugar de paso en el que tomar un café o algo rápido. En nuestro caso, paramos allí porque era festivo y costaba encontrar otro bar abierto.

El café estaba bueno y, por lo que vimos, los precios estaban bastante bien. Muy populares.

Nos sentamos en la terraza a esperar que alguien se acercara y nos pidieran que queríamos y desde donde estábamos sentados podíamos ver al trabajador en una entretenida conversación que le evitaba darse cuenta que llevábamos unos minutos esperándole. Al percatarse, se acercó hasta la puerta y solo sacando la cabeza nos preguntó que si queríamos algo con un tono en que notamos que le habíamos interrumpido en su conversación.

Todo muy rico, y buén precio. Además el señor que me atendió es muy agradable, y más de un día me ha dejado ir al servicio sin consumir que eso en todos los sitios no lo hacen. Lo recomiendo sin duda

Buenas tardes
Vinimos a este establecimiento por la mañana para tomar un café y tomar un refrigerio. Éramos tres, sentados en una mesa para 4 personas al sol.
El camarero, con cara de descontento, dijo que necesitábamos pasar a una mesa para dos, que, además, ¡estaba a la sombra!
O cambiamos de asiento o no nos atenderá.
¡No recomiendo este establecimiento!

Sólo fui a tomar un café, por cierto, muy bueno, buena atención y servicio.

Lo único que tengo para reseñar es ver como el dueño limpia los platos de los bocadillos que trae de la terraza la señora con una balleta que tiene por ahí y los vuelve a usar. Asqueroso. Hoy en día en un bar, el lavavajillas es primordial por el lavado a alta temperatura. Aquí a mano y con agua fría.