Cal Miquel de Ventolà, Girona

Es un lugar especial tanto por su paisaje encantador, su deliciosa cocina vegana pero sobretodo por sus regentores Judit e Ivan que son muy próximos y con los que puedes conversar sobre temas que te haran reflexionar profundamente.
He estado en pocas casas rurales con vibraciones tan positivas como la de Can Miquel de Ventolà

Repetiremos sin duda
Amable trato
Y comida vegana exquisita!

El colchón un poco Incomodo.

Per la amabilitat de la recepcionista, el lloc encantador i l'habitació espectacular, com a primer lloc de desconfinament, hem acertat al 100%, repetiré.

Judit e Iván fueron unos anfitriones extraordinarios, siempre atentos, y discretos. Los desayunos y las cenas, insuperables.

Las vistas no tienen precio, la casa es acogedora y la pareja que lo lleva es un encanto, lo hacen todo con mucho cariño y te preguntan para asegurarse de que estás a gusto. La comida vegana muy rica, casera, variada, saludable y con una cuidada presentación

Hotel rural amb bones vistes des del menjador. L'esmorzar i el sopar són amb productes frescos i de la terra, molt bons.
La part negativa, és que no hi ha servei d'habitacions i no ho posa enlloc, només fan el llit però no freguen el terra ni es canvien les tovalloles, si no fos per això la puntuació seria un 5.

Las vistas son increíbles. La habitación espaciosa. El desayuno vegano muy completo. Los anfitriones muy atentos. Recomiendo realizar las cenas allí, se nota cuanto cariño hacen los platos. Volveremos

Fuimos 3 noches, realmente los dueños son muy amables y atentos, pero falta algo de limpieza y no tienen servicio de habitaciones (solo te hacen la cama, ni barren ni limpian el baño, si vas 1 noche bien, si vas mas de una. Sucio). La comida por 15 € es muy recomendable. Si mejoraran la limpieza, e hicieran una pequeña reforma en la habitación que nos tocó, la puntuación sería mejor.

Lloc encantador perdut al mig de la muntanya amb vistes impressionants. Bon menjar i tracte immillorable. Gracies Judit i Ivan

Se trata de un hotelito rural muy bien cuidado. Cabe destacar el merito de la señora que lo lleva todo ella. El lugar es muy muy tranquilo y las vistas excelentes. La habitación que nos tocó enorme! Pero no tenía nevera ni aire acondicionado (tampoco hacía mucha falta). Lo malo es que para llegar hasta allí hay que pasar por una carretera de curvas de 1 solo carril que tiene unos 4 Kilómetros y que, la verdad, da reparo la primera vez que la ves. Debido a esta carretera la mayoría de clientes se quedan a cenar en el hotel. La cena cuesta 15 euros, (me parece muy cara) y consta de pan y agua o vino, postre y 2 platos que no se pueden escoger (son los que son). El desayuno es abundante y bastante bueno. En definitiva un sitio recomendable, pero algo caro.

Después de haber reservado con un mes de antelación y habernos cobrado los tres dias, (diciendonos que nos descontarian 30 auros de la estancia de tres dias) cosa que no ha sido asi.llegamos y nos comenta la dueña que en lugar de estar tres noches vamos a tener que estar dos noches porque han tenido un problema con el ordenador y diciéndome que como lo usaban tres personas habían tenido un problema y un usuario de booking lo había reservado la última noche que teniamos nosotros reservada, en fin muy poca seriedad suerte que ahora cambian de dueños aunque a mi y a los míos ya no nos quedan más ganas de volver la verdad.

El hostal está en un enclave precioso, muy tranquilo. La comida es casera pero con cariño en su elaboración. Lo mejor, su anfitriona Olga, que ameniza con su simpatía, desayunos y cenas. Muy recomendable para quien busca el descanso y la desconexión.

Acollidor i bon tracte dels propietaris. Molt bon menjar tant esmorzar com el sopar. Ideal per anar amb gossos. Instal.lacions netes i amplies, amb encant rural. Un 10

Lugar perfecto para desconectar de la vida loca de ciudad. Preciosas vistas y un lugar con habitaciones con mucho gusto y muy cómodas. Aceptan mascotas y su propietaria Olga, te hace la estancia además de profesional, acogedora con el cariño de un hogar. Es un lugar donde sin duda volveré por su encanto y trato. Para amantes de la naturaleza y montaña es perfecto y estas cerca de muchos pueblos de la Vall de Ribes y la Vall de Núria. El tiempo que he pasado allí a sido perfecto y reparador.

Lloc amb encant, la nostra habitació, puigmal, molt ben decorada, amplia i superacollidora. La noia que atén molt amable

El pueblo nos encanto, la casa no tanto, la cena y el desayuno escaso, las instalaciones mal cuidadas

Casa rural con habitaciones en alquiler tipo hotel. La casa tiene una parte del siglo XVIII.habitaciones grandes para 4 y 6 personas, el aparcamiento en las inmediaciones es gratuito. Justo al lado esta el restaurante Ana.

Un lloc de pau i tranquilitat amb detalls d'un gust excel.lent, integrat en un paisatge espectacular

Estancia durante este mes de setiembre para hacer senderismo por la Vall de Ribes. El lugar donde está situada la casa rural es excelente, dispone de unas vistas privilegiadas, encarada al macizo de la Taga. El servicio del establecimiento es excelente en todos los sentidos: gran conocimiento de la zona para hacer rutas de senderismo (difíciles de olvidar), amabilidad en el servicio, disponibilidad,
En esta casa ofrecen MP y tanto el desayuno como la cena son perfectos. Las habitaciones son muy espaciosas y limpias, ideales para familias y mascotas (previo aviso).
En definitiva, unos días de montaña inolvidables y para repetir.

Si quieres desconectar y buscas tranquilidad lo recomiendo 100%, nos han atendido muy bien y hemos estado muy agusto, es un sitio ideal para escapar con tu familia, ya que en las habitaciones hay varias camas, y los dueños son muy simpáticos, repetiremos!