Carlota Akaneya, Barcelona

Tienen una de la mejor carne y producto japonés de Barcelona. El lugar es precioso y la atención de 10

Increíble experiencia. Nos atendieron perfectamente y la comida era espectacular. De los pocos sitios donde puedes disfrutar de carne de kobe auténtica.

Local precioso y con una comida espectacular. Tienen dos menús degustación. He ido en dos ocasiones para cercenar el cumpleaños de mi pareja y las dos veces fenomenal. El licor de ciruela tremendo.

Local pequeño y decoración normal.

La comida está bien pero todo viene con salsas si no las utilizas está todo un poco soso menos los fideos y cosas que vienen con caldo que sí que están muy sabrosas
El precio es exagerado para lo que comes, nosotros pagamos 215, € 2 personas y creo que entre 120 y 150 hubiera sido lo normal. Pedimos el menú más caro que había que eran 90 € pero ahora lo han subido a 140.

La comida una pasada, la decoración super auténtica. Un lugar de tranquilidad y degustación en el centro de Barcelona. Recomiendo el menú caro porque las carnes son increíbles.

La qualitat del menjar és bo. Però l'espai és molt petit, penso que per un menú de quasi 100eu no et poden posar en una taula on tens la cuina a menys d'un metre i t'arriba tot l'aire del carrer (que en aquests dies no és precisament calent). Després, "la brasa" que hi ha al mig de la taula és molt gran (on la qual els treballadors t'indiquen que has de posar el menjar just al mig) i fa que "et cremis" cada vegada que vols posar un troç de carn, apart de que tot el menatge de la taula estava CREMANT! I per últim, si a la carta posa que hi ha un postre i no posa "a compartir" que sigui així, no que et trobis que és a compartir amb la resta de la taula. No repetirem, per menjar el que ells t'ofereixen hi ha d'altres restaurants molt millors en tots els sentits (shunka, koy shunka per exemple).

Menú diferente a lo que pensamos que es la comida japonesa. Cuidado hasta el último detalle. Es una experiencia gastronómica.

Experiencia excepcional, toda una aventura gastronómica que se debe probar mínimo una vez en la vida.

La experiencia es curiosa y se disfruta de una comida de calidad. Para mi el precio excesivo para lo que es, el espacio muy reducido y mucho calor debido a las brasas.

M'esperava un gran restaurant. Hem rebut un servei que pot millorar molt. Faltava serietat, pulcritud, en ocasions explicacions, ordre. Per altre costat l'espai és petit i podria estar molt més ben acabat i decorat. Falta controlar molts detalls per què sigui un gran restaurant, ja que no ens hem acabat de sentir còmodes amb la rebuda, explicacions, preguntes i altres. El menjar i la qualitat del producte molt correctes és el seu punt fort. Tot i que els 4 comensals hem coincidit que potser el preu no era del tot idoni pel que haviem rebut. Una experiència correcte i agradable amb amics. M'han enamorat les seves gambes!

Muy cuidadosos con el gluten. Menú poco adaptado, quitan alimentos y algunos platos quedan muy sosos. Pastel brutal.

It was definitely an experience.we took the menu with the kobe beef.great presentation, and staff tries to give the most authentic experience.food was tasty too!

Buena comida, de muy buena calidad, local muy bien ambientado y cuidado. El personal fue de lo mas amable y servicial. Nosotros probamos el menú degustación de 46,90€ y quedamos satisfechos. Muy recomendable.

La nostra segona visita i genial. Pels amants de la carn de wagyu i del menjar japonès és un lloc molt adecuat. El servei es excelent i el menjar també. Molt recomanable!

Fuimos mi pareja y yo dadas las reseñas que tenía y por ser un sitio diferente pero la verdad que nos decepcionó un poco.
Pedimos el menú de 50€. La sopa de miso estaba bien pero le faltaba algo, aunque las setas deshidratadas le daban un toque; las gyozas estaban ricas pero muy parecidas a otras que he probado en otros sitios; los fideos yakisoba estaban buenos pero los sabores eran iguales a los fideos yatekomo y en un sitio así te esperas algo más de originalidad o sabores más potentes que los diferencien con uno de supermercado; el hotpot nos sabía demasiado a salsa de soja, estaba salado y enmascaraba el sabor de las verduras; el Wagyu ichibo tenía una salsa muy rara que no nos acabó de convencer a ninguno de los dos, ni en sabor ni textura y además estaba salada; el marisco del día en este caso eran gambas cocinadas a la sal y estaban buenas pero no tenían nada de especial; los cortes de carne estaban bien y algunos eran sabores diferentes a lo habitual pero tampoco nos impresionó tanto como esperábamos y la salsa que pusieron para acompañar estaba rica y era diferente. Junto con la carne nos sirvieron arroz y se podía repetir las veces que quisieras, eso fue un detalle. Respecto a los postres, nos trajeron un mochi y una especie de brownie de chocolate con helado, el mochi estaba bueno pero era poca cantidad y considero que es un postre muy flojo en sí y más para el precio que pagas y el brownie estaba bien pero el helado fue lo que más me gustó, estaba riquísimo.
También cabe mencionar que el local me pareció un poco deprimente en cuanto a decoración, no tiene ventanas y es un poco agobiante, además tardamos 2/2h y media en cenar, se nos hizo un poco largo. La atención por parte de los camareros fue buena, sobre todo del chico de las brasas que era muy agradable y gracioso y nos hizo la cena más amena, y además nos explicaron cada plato. También tuvieron el detalle de traernos unas toallas para limpiarnos las manos.
En definitiva, valorando el servicio y la comida no estuvo tan mal pero no para el precio que pagas, nos pareció excesivo y esperábamos mucho más en sabores, calidad y cantidad. Mirándolo por el lado positivo, nos quedamos con la experiencia y el haber probado algo diferente pero no volveremos y sintiendolo mucho si lo llegamos a saber tampoco hubieramos ido.

Experiència Kyoto total! Desde l’entrada ja respires una experiència global diferent, la singularitat del local, l’atenció del servei, l’enfocament del tipus de cuina i sobretot la qualitat del menjar fan que dificilment puguis trobar un restaurant a Barcelona que transporti millor a Kyoto.

Experiència molt diferent i interessant. Menjar de qualitat, especialment la carn kobe beef. Tornarem a repetir.

Nuestra puntuación es baja porque a nuestro entender el menú degustación está mal explicado. Escogimos el menú akaneya y este es por persona y pone que son dos postres por persona, pues bien nos pusieron dos postres a compartir ósea no lo que especifica en el menú. Deben rectificar el menú y poner que es un postre a escoger, eso o con nosotros se equivocaron y cometieron un error.
Por otro lado, nos pusieron 4 gyozas entonces entiendo que si fuera solo me pondrían 2 gyozas, la verdad que bastante pobre porque aunque la calidad sea alta las gyozas es un producto muy barato y nada costaría poner 6 u 8.
En cuanto a este tema debería ser un plato para cada uno, no a compartir, de esta manera resultan sospechosas las cantidades.
Por último, l@s camarer@s muy bien lo único que sus conocimientos en hostelería, por lo menos de algun@s, son nulos. A la hora de servir el vino no saben hacer el corte con la botella y lo llenan todo de gotas de vino. Creo que eso es inapropiado para un restaurante de este tipo.

Restaurante Japonés diferente a lo normal. No hay carta. Hay dos menús uno de 47 euros y otro de 85. Bebidas aparte. Son platos típicos japoneses y una variada gama de carnes que te lo haces tu en la mesa puesto que tienes una especie de barbacoa en el centro. Por mi parte se hecha de menos una carta. El servicio es perfecto.

Podría estar horas. Pero lo mejor que tienen es su personal. Y su último plato. Como todo buen amante de la cocina caeran en sus redes. Por como venden el producto. El problema no fue el costo de su producto. Sino ser tan ingenuo en creer que me sorprendrian. Personal 10.comida 5 y último plato un 10. Cuando voy gastarme 300 euros espero almenos comer todo el rato de nivel. Cosa que aquí no lo fue. Saludos.