El Maravillas, Barcelona

Està bé però no hi recomano sopar. Els dos cops m'he quedat amb gana pagant 30€ per persona (amb botella de vi). Erem 3.

La ubicación es ideal y el servicio amable aunque andan un poco desorientados para organizar la terraza.

Las tapas están bien pero son muy caras, incluso para Barcelona.

Fuimos un día entre semana a cenar y estuvimos en la terraza con mucho ambiente.
Las tapas que probamos estaban bien, pero sin destacar.
El servicio fue amable pero nos pusieron en una mesa muy pequeña para 5 personas.

Sitio un poco escondido y pequeño pero la comida está buenísima. Hay que reservar porque tiene muy pocas mesas. Los platos son un poco pequeños asique si vas a cenar tendrás que pedir al menos 2 o 3 platos por persona. Cenar 2 personas nos costó unos 70€, pero todo lo que pedimos estaba delicioso

Buena terraza y bar para quedar con amigos, tomar algo o comer. Tienen ostras, vermut y algunos cocktails.

Located in the Plaza la Concordia, I recommend this bar for a beer, especially in summer. After 18: 00 it is difficult to find a table.

Customer service no that good.

Proprietario arrogante. Ti caccia dal tavolo e ti "insulta" se prendi "solo" bibite e un paio di tapas per cenare. Posso decidere io cosa e quanto voglio mangiare? !
Nella piazza ci sono molti altri bar che meritano.
Qui non ci tornerò mai più. Arroganti

Una terraza muy chula en una plaza encantadora que recuerda a las de Venecia. La camarera, italiana, super agradable y profesional, me decía que si, que le recordaba a Italia. Cenamos bien y tomanos un vermú espectacular, de barrica, y eso se nota! Precio de tres platos, pan tostado con tomate, tres vermus y una copa de vino, 51 euros.

El lloc és fantàstic. Perfecte per una birra o vermouth. El menjar està bé, però no és res de l'altre món. El servei molt agradable

Muchas expectativas. Las comida buena. Los protocolos covid no se utilizan. Y en nuestro caso solo nos han servido la mitad de los platos solicitados. Pero en la factura estaban todos. Las disculpas las estamos esperando igual que el resto de los platos.

Riquísimo los platos que hemos consumido (papás de Olot, ensalada de ventresca y galta confitada un 10)

Muy mala atención. En ningún momento han sido simpáticos con nosotros. A la hora de pedir el camarero nos ha metido prisa porque estábamos indecisos y en vez de aconsejarnos se ha ido diciéndonos que cuando lo tuviésemos claro le llamáramos. No nos han dejado tomar nada después de haber acabado de comer diciendo “que si habíamos acabado ya estábamos fuera de turno”! De verás, que ha sido nefasto! No lo aconsejo para NADA.

Ir a un restaurante a cenar/tomar algo no es solo la comida, a veces hace más el como te tratan que la comida que te sirven!

Es de esos lugares en los que no puedes tomar algo si es la hora de la comida o la cena. Que no te dejan sentarte a la mesa sino está todo el grupo. Todo complicaciones y algún que otro comentario borde del camarero. Se me quitaron las ganas de volver. Además es carísimo.

Buenos platos para compartir (cocina tradicional revisada), aunque no tremendamente abundantes. Buena calidad de producto y fantástica plaza de Les Corts. Evitar en horario de niños (parece un patio de colegio).

Comimos muy bien, rapido y muy bien atendidos. El lugar y el entorno es bonito y tranquilo. Lo unico que encontramos a faltar es algun plato de primero mas "verde" ya que el resto de la carta es calorica y proteica en demasia.

Vergonzosa atención. Nunca había vivido algo así. Un consejo: vigilad con atención la calidad de la comida. Recomiendo ir a cualquier otro de la plaza.

En el corazón de Les Corts, por debajo de la Ila Diagonal.
Por sus arroces, por sus viandas sin tonterías. En un oasis de Barcelona en el que aún se oyen las horas pasadas de la campana de su iglesia.

Bistro tapas con muy buena calidad en las raciones. Precio alto por poner alguna pega, servicio correcto y rápido.

Servicio pésimo, habiendo mesas no te dejan sentar a tomar un café a las 15.30h porque según ellos les rompes el servicio de comidas. Es la cuarta vez que voy y la última, parece que te perdonen la vida por sentarte en su terraza, la tienen siempre bastante llena por su ubicación porque si fuera por el trato y la comida (cara y escasa) estaría vacío. Bye bye Maravillas

Trato pésimo,
Hemos ido varias veces y siempre siempre nos ponen alguna pega, ya sea porque nos limitan el tiempo porque se acerca hora de comidas o porque no nos sirven el café a las 15h por horario de comidas a pesar de estar la terraza ya medio vacía.
Incluso propusimos poner una silla al lado de la ventana fuera y tampoco. Siempre de muy malas formas
Las pocas veces que te hacen el "favor" de poder sentarte en su terraza, pueden tardar tranquilamente 20 minutos sin servirte.

Una lástima teniendo en cuenta la buena ubicación del local.
Sin duda no pienso volver.