Escola de ball Swing Manresa, Barcelona

Una experiencia inolvidable. Un espacio único e inigualable.
Volveremos.

He estado años alquilando una sala en este establecimiento, al principio el trato fue genial (por eso le doy 2 estrellas) pero con el paso del tiempo la cosa se fue torciendo.

Para empezar la limpieza de la sala era bastante nefasta (habían polillas y arañas muertas por todos los rincones de la sala), no nos dejaban apoyar la espalda en el espejo (lo normal, si pagamos, es que sea por la sala y la limpieza de esta, espejo incluido).

El primer año nos pidieron asistir en la fiesta anual de la escuela, nosotros bailábamos de forma autónoma (no eramos miembros de la escuela como tal), pero accedimos a participar en la exhibición de baile. Nuestra sorpresa fue que nos intentaron hacer pagar por actuar (a lo que obviamente nos negamos en rotundo), al final llegamos al acuerdo de no pagar nosotros pero sí los acompañantes.

Cabe añadir que nosotros teníamos un horario fijo, pero por lo visto eso no importaba ya que nos cambiaban los horarios a su gusto ("este sábado tendréis que venir por la mañana porque por la tarde vendrán a celebrar una boda en vuestra sala"), ahí vimos que el director no tenía palabra y que su interés se centraba exclusivamente en el ámbito económico. No se nos tenía nunca en cuenta, y aún así siempre aceptábamos todos los cambios que nos hicieron hacer.

Debido a la pandemia el precio del alquiler de la sala subió (a lo que no nos quejamos en ningún momento), aún así seguían cambiando nuestros horarios (tuvimos que venir por las mañanas, aunque el director sabía que no era el horario pactado) y seguían echándonos bronca por apoyar la espalda en el espejo (pagamos 120€/mes por usar el aula una vez a la semana, que menos que encargaros de la limpieza del espejo y de que la sala sea un lugar libre de insectos muertos).

Finalmente, tuvimos problemas con integrantes del grupo y acabamos siendo pocas personas (todos menores de edad, menos yo) para pagar el precio elevado de la sala. Le pedí un poco de comprensión al director, a lo qué él respondió: "Pues buscad más miembros". Yo sinceramente, como bailarina (no profesional) opino qué es mejor cualidad que cantidad, y me pareció una respuesta negligente por parte de alguien que se gana la vida a través del baile.

Por cierto, he hablado con otras personas que han tenido experiencias con esta escuela de baile y todas acabaron dejándolo porque el director se empeñaba en sacar dinero de la gente, una ética moral que echa para atrás a cualquier persona en mi opinión.

No recomiendo asistir a esta escuela de baile.

- L'atenció telefònica un 10 i ben explicat.
- La classe de prova es un repte per si vols decidir o no i la veritat que us ho recomano assistir i apuntar.

- La sala es gran.
- Els monitors amb molt humor (això es al principal que hi ha d'haver) I sobretot simpàtics

Muy bien, grande y agradable, se puede aprender a bailar muchos estilos

Bon lloc per practicar Tai-txi, salsa cubana, balls de saló, dansa del ventre, tot amb mesures Covid

M'ha agradat la sala de ball, però és una llàstima que no tingueu limitador de decibels. La música té un volum excessiu i molesta.