Gelpifish, Girona

Gracias por su amabilidad anoche.
A nuestra nieta le encantaron tus patatas fritas y a nosotros nos encantó todo lo demás.
Mención especial para la sangría.

Hermoso lugar, muy agradable.
Lástima que no tengan carta de bebidas. ¡Nos llevamos una sorpresa cuando añadimos la cuenta!

Excelente! Cálida bienvenida y la comida es maravillosa. La vista al mar: ¡pura felicidad!
te lo recomiendo mucho

Excelente servicio, fuimos un equipo de rodaje y acabamos encantados! Ambiente muy muy familiar, cercano, te hacen sentir como en casa. Sin duda Miguel Ángel y Inma sienten devoción por su trabajo y por hacer feliz a los clientes. Volveré sin dudarlo?: Besitos de Alba

El servicio es deleznable. Estuvimos sentadas 25 minutos para pedir un café. Nos levantamos a pedirlo al camarero, un chico joven que nos veía pero nos ignoraba y de muy malas formas que nos esperáramos. Lo mismo a los otros comensales que estaban alrededor. Para pagar, exactamente lo mismo. No volveremos, terrible

Demasiado malo! Una fideuá sin sabor y congelada. El camarero se olvido dos veces de traernos las bebidas. Nunca vi un baño tan sucio! No vayan! Trampa turística

Grandes vibraciones. Comida bastante buena. Pagas un poco más por la vista, pero vale la pena.

Experiencia genial con vosotros! Turbot a la Bilbaina inmejorable.
Servicio simpático y agradable

La comida estaba muy buena. En concreto los mejillones. El servicio fue muy agradable. La cocina abre hasta tarde lo cual es una ventaja porque el resto de restaurantes cierra antes. Pedimos también huevos fritos con patatas y langosta hubiera puesto un tercer huevo para compensar la cantidad de patatas pero por poner alguna pega. Comes con vistas al mar y todo muy agradable. Recomendado

Gran restaurante e idealmente ubicado. Todo era perfecto! Los platos estaban muy bien cocinados y el servicio también fue muy bueno. Se recomienda reservar! Volveremos seguro

Sitio increíble, tanto por vistas, comida y servicio. No hay ningún pero que poner. Sin duda un restaurante para repetir, además de Maika y su amiga que nos recomendaron comercios locales

El servicio muy rápido y agradable, nos atendió Miguel Ángel y todo muy bueno. Sitio muy recomendable, con vistas a la playa inmejorables.

Servicio un poco más bajo en septiembre, linda vista de la playa y el mar, precio justo, buena comida, buen momento

Desde el primer momento, recibimos una atención increíble. Se ocuparon de nuestra celiaquia e hicieron los calamares con harina de garbanzo y en una cocina totalmente aislada del gluten. El camarero se involucró en que estuviéramos tranquilos en ese aspecto, y ademas es muy simpático. La comida estaba riquísima, y las raciones y la calidad de los platos está por encima del precio que tienen. Nos vamos con la tripa llena, pero no de gases, de comida buena.

Vistas privilegiadas. Cominos paella, ensalada y ostras, la verdad que muy bien. Sobre unos 40e por persona.

El lugar está muy bien ubicado, el servicio normal, aunque nos han tardado 40min en traernos el arroz, cuando nos dijeron 20, y la verdad que la comida muy justita, me esperaba mucho más.

Este restaurante me rechazó por segunda vez.
Dije que quería comer y beber.
Un señor canoso me echó de la terraza y me dijo que no, que no.
Eran entre las seis y las siete de la tarde.
Ni siquiera me invitó a sentarme.
¡¡Y tal vez explícame que no era hora de comer pero que podía tomar un aperitivo! Quería tomar una copa, unos calamares fritos.y tal vez comer algo.
Pero no expulsado.
Fui limpio y educado.
Esta es la segunda vez en un año que este restaurante me rechaza.
Dirigí un restaurante y nunca hubiera dejado que un cliente se fuera así, lástima. Quizás no cumplo con los criterios!? Un momento muy humillante.
Lo informé a la Oficina de Turismo.
También informé al hotel donde estuve varios días.
Por supuesto a todos los que conozco.

Comidas muy decepcionantes aquí y demasiado caras para lo que nos sirvieron. La ensalada que acompañaba a la ternera era lechuga iceberg con mayonesa. Las patatas fritas no estaban recién cocidas. Tan aburrido y falto de gusto.
La pappadelle con champiñones y gambas carecía de complejidad y también fue bastante decepcionante.
Las bebidas fueron generosas.
El personal carecía de interés o atención a nuestras necesidades y no ofreció postre ni más bebidas. No estábamos dispuestos a pedir postre y arriesgarnos a otro plato pobre.

¡¡¡Fuimos muy mal recibidos! A las 18.30 empiezan a preparar las mesas y se niegan a servir bebidas. Nos cobraron la cuenta para irnos. ¡¡¡Qué vergüenza! Sólo una fábrica de dinero.realmente un desastre bienvenido. ¡¡¡A huir!