Hostal Cal Batista, Barcelona

El lugar era muy bonito, las habitaciones con buen tamaño y el baño genial. El problema eran las camas de 80' donde no podías girarte sin caerte y la calefacción dejaba de funcionar a ratos. La verdad es que no dormí en toda la noche pero me quedo con el trato súper amable de todos los que trabajaban allí y la comida tan rica que hacen.

Nos han tratado de maravilla, sitio súper agradable, muy familiar, tienen un espacio ideal para que los niños jueguen que te permite disfrutar de la comida. Super cerca de las pistas nuevas del Berguedà y a una media horita corta de la masella Molina. El trato excelente, muy buen sitio tanto para estar unos días y disfrutar de la montaña como para parar a comer comida tradicional de la zona.

Teníem un paquet dels de regalar una experiència d'una nit amb esmorzar i la realitat no s'hi ajusta. T'expliquen una història sobre un error i obliguen a quedar-t'hi dues nits o bé a agafar sopar, pagant a part, és clar.

Se te que millorar molt, tarda molt cuan demana alguna refresc o dinar. És una llàstima perquè és preciós per lloc.

La nostra experiència a Cal Batista fou espectacular. El tracte de Agusti i la Nuri juntament amb els professionals quels envolten es fantàstic. Sumat al servei de menjador segur que tornem i recomanarem.

La limpieza no es muy buena, fui descalza por la habitación y cuando me miré los pies tenía hasta “hierba”, se podría invertir para pegar los pomos a los cajones y que las alcachofas de la ducha no se tengan que aguantar con la mano, las mujeres muy simpáticas, el secretario un poco “catalán”, y el desayuno fue un poco triste ya que llegamos tipo 11: 00 y no quedaba casi nada, cereales de colorines y poco más y 15 min para un colacao verdad que es caro para lo que nos ha tocado