Hotel Ametlla Mar, Tarragona

Mi hermana se caso en este hotel este fin de semana, la verdad que estamos todos decepcionados, la organización del hotel fatal, los camareros y camareras mal educados, nós trataron fatal a los convidados a la hora de la comida, si le pedíamos una bebida se giraban sin que termináramos de hablar.
Los organizadores no dejaron que la organizadora contrata por la novia se hiciera cargo de la cerimônia, entró el novio antes que el cerimonialista, los niños todo mal organizado, no esperaron a que los padres estuviesen listos, todo eso y aparte que tardaron una hora para dejar a que entrassem los decoradores de la boda, dejaron la novia lo mas estressada posible, y las habitaciones todas oliendo fatal mal olor en las tuberías

La cafeteria no obre fins a les 9h i això obliga a fer-lo al menjador del hotel en règim de A. D La noia de la recepció molt antipatica

Muy buena atención por parte de los camareros Javier y Adriana, son unos máquinas y muy simpáticos, te hacen la comida más amena y que te sientas muy agusto. La comida de 10. Hotel de 10. Todo de 10. Lo único a mejorar un poco más el servicio por parte recibido de un camarero mayor, un poco rellenito y con gafas, muy antipático al cliente, le hablas y ni te contesta. Parece q le molestara todo. No es una actitud para ese oficio. Por lo demás un 10.

Très bien, très bel hôtel, très beaux buffets, belles piscines, propre, mais attention aux variations des prix importantes suivant les périodes. Voir internet avant pour réserver a un bon prix.

Estuvimos de vacaciones y éramos 14 adultos, en general bien pero un sobresaliente para Albert del comedor por su eficacia y profesionalidad, cosa que no puedo decir de la animación de la noche, las 2 señoritas parecían que estaban tratando con niños cuando en la sala no había ninguno o en un geriátrico realmente te hacen sentir mal, resto instalaciones y limpieza muy bien, pero sobraban los mosquitos

Me esperaba otro tipo de hotel. Me ha decepcionado. Muy feo que te cobren para poder acceder a su spa y gimnasio.
La comida en buffet libre. Nada bueno. Me he limitado a comer ensalada. Había unas habas con tocino que estaban en mal estado.
No volveré.

Buen complejo para pasar unas vacaciones tranquilas en familia, en un pueblo sin aglomeraciones. Buena animación para pequeños. Instalaciones ideales, piscina con acceso directo a una pequeña cala, con amacas disponibles para los usuarios del hotel.

El diseño del hotel, con las habitaciones mirando al mar y la zona de piscina y césped son maravillosos.
La comida del buffet estaba buena y el personal de todo el hotel era muy amable.
Hacen un gran número de actividades. Si no te gustan no hay problema pues las hacen en el hall, donde el sonido no sube hacia las habitaciones.

Yo añadiría a las habitaciones una kettle para calentar agua y mejor juego de jaboncitos.

En el buffet se cobran las bebidas a parte. No es caro y si se pide una botella de vino (por ejemplo) te la pueden ir guardando a lo largo de la estancia.

Tot i tenir una bona ubicació (té accés directe a una cala bonica i està a uns 20 - 30 min del centre de l'Ametlla anant pel camí de ronda), l'hotel ens ha decebut una mica. L'estat de les habitacions, el menjar i, en general, l'estat de conservació no justifiquen el preu.
Així, com a exemple, les tovalloles de dutxa eren mida tovallola de mans.
Apunt a tenir present perquè no informen d'això, és que la beguda no entra en el preu de la mitja pensió.
A la zona de piscina i animació li donem les 4 estrelles, però a les habitacions i serveis, tres estrelles.

Medidas covid inexistentes. Sobre todo en el comedor, que cada uno hacia lo que quería, la gente no se ponia los guantes y allí nadie decía nada. No cuidan los alimentos. Habia por ejemplo servicio de cortarse cada uno el queso, tomate o pan. Que con el covid me parece todo una locura.

Además, nos tocó el 3er turno y el Buffet ya daba vergüenza en que condiciones habia quedado. Además de que ya no reponian algunos alimentos.

En las zonas de las piscinas, la gente aglomerado sin mascarilla andando por ahí. En ese sentido fatal.
Y el jacuzzi nadie lo controla y los niños juegan y saltan ahí.

La animación de los monitores es buena. Se preocupan por los niños y hay muchas actividades, pero considero un fallo importante que cuando haces el chek in, los recepcionistas no te informen sobre nada. De los dos días que estuvimos, mi hija el primero no pudo apuntarse a nada porque no sabíamos que tenian ese servicio. Creo que no cuesta nada decir que ofrecen actividades y que hay un panel con una libreta para apuntarse.

Quiero añadir la calidad del servicio del buffet de Pizzeria y la amabilidad de los camareros y cocineros de allí. Que aunque nadie te informe, puedes elegir en qué restaurante cenar, y este es el mejor, (aunque hay que apuntarse). Como digo, nadie te informa, pero tuvimos suerte de escuchar a un cliente comentarlo.

Por lo demás, una vez conoces el hotel, no descartas en volver una vez no haya covid y ya sabiendo como funciona todo, ya que las habitaciones estaban bien y el precio también.

No entiendo como es que son 4 estrellas. Se nota que la están pasando mal económicamente, telas de arañas y mosquitos muertos en todas las paredes del lugar incluido el restaurant, fuente apagada llena de moho, nevera en la habitación sucia y ni siquiera te dan la bienvenida con un agua. Al personal en la recepción se les nota bastante amargados, los únicos que transmiten buena energía son los animadores para niños. Por el dinero que sale este hotel es fácil encontrar mejores servicios en los al rededores.

Hotel grande. Con muchos servici9s como animacion, piscina, pero venido a menos.el bar pobre.desayuno/com8das abundante y variado pero sin gran calidad. Lo.peor el comedor en epoca covid. Ni distancias ni separavion y te pasa la gente rozando la mesa para acveder al buffet

Maravilloso, precioso, espacios amplios para disfrutar de todo tipo de actividades para niños y adultos, un servicio de personal fantastico, tanto en el comedor, limpieza, servicios de entretinimientos y servicio de bar

Está en muy buena ubicación, con una cala en la que puedes hacer recorrido por la costa y disfrutar del paisaje.
Lo mejor del hotel la animación, un equipo muy agradable y simpáticos, hacen muchas actividades para adultos y niños.
La comida un poco justa en cuanto a variación y calidad, para mí gusto demasiadas salsas, fritos.si quieres comer sano estás limitado totalmente a ensalada y poco más.

El mobiliario de la habitación estaba roto, las puertas del armario y de la mesilla. Seria conveniente poner plato de ducha en vez de bañera y colocar el soporte en otro sitio para para no mojar todo el suelo.
El hotel está diseñado para familias con hijos.

Enhorabuena por la mejora en la cocina, pero habéis perdido el trato personal y educado que teníais en el restaurante.
Nunca un trabajador puede ir con soberbia y mala educación a una conversación con un cliente, y mucho menos reírse (sea por lo que sea) justo después de acabar la conversación con el cliente.
Carlos en la puerta es el peor fichaje que habéis podido hacer (no es capaz de solucionar ni gestionar cualquier situación que no tenga controlada)
Es capaz de cumplir las medidas COVID con unos sí pero con otros no. Me obliga a entrar a las 21: 00 a cenar aunque a las 20: 50 le diga que las niñas están cansadas y tienen hambre. Le digo que me parace correcto, pero que a las 21: 00 el comedor debería estar vacío por que si no no entendería que me haga esperar para después cenar con los mismos que están a las 20: 50 (empatía con dos niñas de 3 y 6 años cero)