Hotel Marítim, Roses

Una ubicación bastante tranquila justo en el paseo marítimo sin mucho tráfico. Cómoda habitación con caja fuerte. Reservamos media pensión y no nos arrepentimos. Gran y rico buffet, variado y de calidad razonable, válido tanto para la mañana como para la noche. Un pequeño inconveniente para nosotros fueron los colchones muy duros, pero eso sólo tiene que ver con nuestros hábitos. Reservamos el hotel por primera vez para hacer una escala y lo volveríamos a hacer en cualquier momento. Personal muy amable y profesional.

Bonito hotel, aunque la piscina es demasiado pequeña para el número de huéspedes del hotel. No alcanzan sillas ni sillones, seis sillas disponibles, No tenemos espacio para tumbarnos a pasar un buen rato en la piscina, nos amontonamos. El desayuno y la cena son variados y agradables. Por otro lado, sólo una persona para preparar los pedidos in situ. La habitación es demasiado pequeña para que se muevan tres personas, puntos positivos en la habitación, un hervidor de agua y una nevera disponibles. La televisión tiene todas las opciones.
El aparcamiento gratuito está a 10 m del hotel, lo que permite tener el coche cerca del hotel.
Por el precio cobrado esperaba un poco mejor…

Cama muy dura, habitación muy pequeña con baños en la habitación y, sobre todo, cena con vistas al servicio: restos de platos. Asqueroso!

ESTUVE, DE PASO POR ROSAS, Y AL PASEAR UN POCO POR EL PASEO FRENTE AL MAR, ME SENTE EN LA TERRAZA, A BEBER UN CORTADO. POR LO QUE APERCIBI, EL HOTEL, ESTA MUY BIEN SITUADO, Y MUY CONFORTABLE, BUEN SERVICIO.

Hotel con ubicación en primera linea de playa. Tomamos la media pensión y la comida tanto en el desayuno como en la cena son muy buenos lo cual vale la pena. El personal muy amable y atento. El area del lounge esta muy bien. Lo unico malo. La piscina es muy pequeña y fría y las habitaciones no tienen casi espacio para la ropa. Muy contentos con nuestra estadia

Hotel idealmente situado para una estancia junto al mar y bien reformado. Podría tener una excelente relación calidad-precio.
¡Solo que a nosotros nos despertaban todas las noches! Y no poder dormir bien en el hotel es un factor decisivo.
-> Es un escándalo que un hotel de 4 estrellas reformado no tenga precintos en los marcos de las puertas. Las puertas del dormitorio se cierran de golpe y nos despiertan toda la noche. Además, la luz del pasillo atraviesa el marco e ilumina la habitación durante toda la noche.
Es una verdadera cuestión de comodidad.
Lo informamos a recepción a quienes no les importa.
-> Además, cuando llegamos no había más loción en el dispensador del baño, lo reportamos y nunca tuvimos.
-> También pedimos en recepción una reserva para un restaurante de playa en Canyelles, teníamos la peor ubicación de mesa de todo el restaurante.
Estos son pequeños detalles que la dirección podría simplemente corregir.
Desafortunadamente, dada la reacción de la acogida, todavía tienen que intentar mejorar sus estándares de calidad.

Hermoso establecimiento. ¡Allí somos bien recibidos! Las habitaciones son modernas pero les falta un poco de espacio para mi gusto. El hotel sigue siendo confortable, está bien insonorizado y el aire acondicionado funciona perfectamente.
El buffet es muy bueno. El comedor está bien distribuido. El personal es agradable.
El establecimiento está bien situado, no lejos del centro pero frente a la playa. ARRIBA!
Punto negativo: no hay piscina cubierta, ni una piscina al aire libre muy pequeña, ni sala de fitness. ¡Lamentable! En cuanto al bar, los salones son bonitos y cómodos.
La relación calidad-precio del hotel sigue siendo un poco cara para los servicios.

Chambre Deluxe au top! Toute rénovée. Superbe vue sur mer. Personnel a l ecoute du clients. Hôtel tres propre. Le petit-déjeuner comme le restaurant tres bon et très copieux. Super séjour.

Hemos estado un fin de semana de reunion familiar y todo ha sido positivo, la habitación, la comida y un trato excelente por parte de todo el personal.
Con ganas de repetir la estancia.

Habitación wonderful preciosa. Muy moderna y mires por donde mires con vistas al mar. Para volver sin duda.

Super hôtel face à la mer. Le personnel y est très agréable.les prix y sont abordables que ce soit au bar ou au restaurant (buffet bien garni et avec beaucoup de choix). Les chambres supérieures sont magnifique et pour un prix attractif. Nous recommandons ce superbe hôtel ouvert à l'année.

Très agréable, très bon marché. Sangria au top! Nous accueille aussi bien la journée comme le soir. La terrasse est très agréable avec piscine en bord de plage. Régulièrement, une bonne animation le soir. L'hôtel est très bien situé entre le tourisme et le centre ville. Il y a un parking privé derrière. L'hôtel et le restaurant sont très moderne. Je recommande!

Das beste Hotel in Roses, super Zimmer Klima, Direkte Strandlage, supernettes Personal, sehr sauberes Hotel, besser geht es nicht. Wir kommen wieder

It was a very pleasant stay the rooms were super clean and quiet The hotel is right at the beach-just perfect The pool is a little tiny and there is nothing to lay down but they have a few comfy seats The bar is big with a great selection.the mango was the room where you eat. Loud and lots of people in the pandemic time, you can't sit outside.but great selection with all different kinds of food The food was always very fresh and extremely good.

Habitació wonderful en el quinto piso, ESPECTACULAR!
Muy limpio, jacuzzi exterior muy limpio, vistas al mar, personal atento, buffet desayuno correcto, en la cena justito, pero teniendo en cuenta que esta muy bien de precio.bien de precio, no nos podemos quejar

L'hotel està bé la zona de baix, recepció, restaurant, cafeteria, zona piscina. (petita i mes si vas amb nens) no hi ha zona per jugar ni correr. En canvi, a l'habitació que hem estat nosaltres (estandar) es més ben petita i la neteja podria millorar.
El bufet molt bo i molt bon sortit de menjars.

Um óptimo hotel de 4*, com um serviço muito simpático, uma piscina muito agradável, e principalmente mesmo junto à uma praia muito agradável, água quente moderada e transparentes.
Não tenho nenhuma reclamação, pelo contrário.

Bien situado pegado a la playa
Piscina un poco pequeña y el televisor d la habitación tambien
Podían haber puesto en las habitaciones el doble d grande sin problemas d 40 a 50 pulgadas
Habitación elegante bien decorada
Mobiliario sencillo

Era nuestra primera estancia en este hotel, y sinceramente, NO creo que repitamos.

En primer lugar nuestra sorpresa llegó al bajar a nuestro primer desayuno, sobre las 10: 15 y ver los TODOS los grandes ventanales del comedor CERRADOS. O sea, en plena pandemia, por ese espacio habían pasado como ¿200 personas? Previamente comiendo y bebiendo sin mascarilla obviamente. ¿y no se ventila? Por nuestros trabajos tanto mi pareja como yo nos hemos movido por muchos puntos de España en esta pandemia y de verdad que en ninguno habíamos visto algo igual.

Cierto es que comentamos esto en recepción y se comenzó a ventilar al día siguiente. No digo que el hotel incumpla la normativa, pues no conozco con exactitud los mínimos marcados por la Consellería de Salut (u órgano encargado) de la Generalitat, pero me preocupa que de motu propio, la Dirección del hotel no adopte una de las principales recomendaciones sugeridas por todos los organismos nacionales e internacionales, como es la de ventilar siempre que sea posible, protegiendo así la salud de sus propios trabajadores y clientes.

De manera añadida, sufrimos un momento muy desagradable en nuestra estancia. Al llegar al hotel se nos invitó a dejar pagada la estancia al completo. Algo más de 1.300 € por 6 noches. Amablemente comentamos con el personal de recepción que preferíamos pagar al final de la estancia, entregando sin problema la tarjeta de crédito como garantía. El personal del hotel nos dijo que OK, sin problema.

Pasados dos días se nos comentó al entrar al desayuno que nos pasáramos luego por recepción, que el Director quería recibirnos. Fuimos allí después del desayuno y vimos que no era cierto eso de que el Director quisiera vernos. Sencillamente, la persona que estaba en ese momento en recepción nos invitó/obligó a dejar pagada la estancia al completo en ese mismo momento, todo ello dicho de una manera un tanto abrupta, por utilizar un término suave. Tanto mi pareja como yo nos sentimos muy violentados, la verdad. Fue muy desagradable. Falta de empatía y confianza absoluta.

Soy consciente de que de un tiempo a esta parte se ha extendido la costumbre en los hoteles de "invitar" al cliente a pagar la estancia al completo en cuento llega. Yo sinceramente no comparto ese método, máxime cuando el hotel tiene: mi DNI, nombre completo y apellidos, domicilio y tarjeta bancaria. En el resto de hoteles en los que hemos estado y nos sugieren el pago al principio, siempre comentamos que preferimos hacerlo al final, como se ha hecho siempre, y que no tenemos problema en dejar la tarjeta como garantía. Es más, al Hotel Marítim (y esto no tendría por qué comentarlo, pero para que vean la diferencia) llegábamos después de estar 7 días en otro hotel de 4 estrellas también de una localidad costera de Girona. Pues miren, no nos pusieron ningún problema para pagar el 100% del importe al final de la estancia. También un hotel de 4 estrellas tiene que aportar eso: confianza, buenas maneras y clase.

En resumen: perdieron una oportunidad de oro para quedar elegantes.

Por comentar otros aspectos rápidamente: buen estado y limpieza de la habitación, la menos de la nuestra. Se nota que hay plantas sin reformar. El servicio de restauración algo escaso pero rico. El personal que atiende en la terraza y en la planta superior es muy profesional y agradable, aunque a veces por la afluencia de público pueden verse algo desbordados. Son pocos para atender a mucha gente.

Lo dicho, no creo que lo recomendemos ni que repitamos en este hotel.

Lo mejor es la camarera de la cafetería Noa, sinceramente es una profesión para valorar, no se encuentra uno personas y profesionales como ella cada día en los hoteles que va. Volveré y lo recomendaré especialmente por ella. Gracias Noa.