Hotel Restaurante Terralta, Girona

En general todo perfecto. Habitaciones limpias y confortables. La atención del personal excelente. Muy recomendable. La ubicación esta bien para moverte por la zona.

No tienen ascensor y me dieron la tercera planta, no tenían encendida la calefacción y por la noche estábamos a 5 grados. El aspecto de las habitaciones sucias y dejadas. Fatal no volvería ni gratis.

Estada perfecta.
Bon servei tot i q en dinar es van oblidar de mi. Però és disculparen
Servei molt amable.em van ajudar amb la maleta per pujar les escales.molta pau i bona vista al Taga.hi tornaré.

Es un alojamiento sencillo. Al hotel le hace falta un poco de mantenimiento. Las vistas y tranquilidad que se tienen en el hotel son únicas, pero pienso que se podría mejorar el tema de accesibilidad a las habitaciones ya que no cuenta con ascensor. La iluminación es escasa en las habitaciones y en cuanto al restaurante, hace falta una opción de menú infantil, ya que es un hotel familiar pero no hay opciones de platos para los pekes, ya que es menú cerrado. Tiene una piscina amplia, tiene otra muy pequeña pero no estaba llena, así que supongo que ya no se usa. La carretera para acceder es bastante estrecha y no es camino fácil, sobretodo para las personas que no les gustan este tipo de carreteras, ya que no hay división de carriles. Adestacar la atención de todo el personal, que siempre fue muy amable y atento con nosotros.

Hotel Terralta situado a pocos quilómetros de Ribes de Freser, bien ubicado aunque la carretera (cuando haces el desvío en la carretera nacional)
hay muchos tramos estrechos, curvas cerradas no recomiendo ir a más de 40km/h sino se conoce dicha carretera.
El alojamiento dispone de parking de techo cubierto aunque no hay demasiadas plazas, aún así hay zonas cercanas para aparcar sin problema, también dispone de piscina, no está habilitado para personas con silla de ruedas, ya que para acceder solo hay escaleras tanto en la entrada como para el acceso a habitaciones, aún así están estudiando poder resolver este punto. Las habitaciones sencillas, pero acogedoras y limpias con ese rústico que le dan ese encanto sin olvidar las magníficas vistas que ofrecen,
La decoración del alojamiento en general es muy acogedor y como en las habitaciones muy rústico, madera, pizarra, y un mobiliario de madera, (no es mobiliario de Ikea precisamente)
El personal amable y disponible para resolver cualquier duda
Tema de comidas, en mi caso cené y desayuné, y ninguna queja
el desayuno es buffet libre el cual te lo sirve el personal del alojamiento por motivos de higiene (COVID-19) hay bastante variedad tanto en dulce como en salado, la cena muy buena, pedí canelones de bolets y albóndigas de cordero con salsa curry y no me decepcionó, muy sabrosa y gustosa
En general lo recomiendo ya que es un lugar tranquilo y de descanso, con unas vistas a los Pirineus Gironins espectaculares

Un hotel correcto para disfrutar de la paz, buen paisaje aunke nuestra habitación daba a una arbolada, pero bien los trabajadores correctísimos,

El lugar es realmente encantador y se respira paz. Está en medio de un paraje absolutamente maravilloso, rodeado de montañas. Aunque no me molesta en absoluto, debo decir que está bastante obsoleto y las habitaciones deberían estar en mejor estado al igual que los baños. No obstante me rendí a su encanto desde el principio y creo que ha sido una magnífica elección hospedarnos aquí en nuestras vacaciones.

Lugar bonito, instalaciones bien y un personal servicial y muy agradable.
La habitación que nos tocó, ruidosa por ser la primera que te encuentras al subir la escalera viniendo desde la piscina. Unos portazos de lujo, porque además, la gente que estaba hospedada ningún cuidado.
La comida de impacto. Una cocina variada, menús exquisitos y platos grandes. Volveré a comer, porque es de lujo cada preparación y da lo mismo si es cena o comida.

Menú de cap de setmana a 18€.
Canelons i xai a la brasa molt bons.
El pastís de pastanaga exquisit.
Al lloc li falta una mica de xapa i pintura, per la resta genial.
Ens han tractat molt bé!

Bon lloc. Menjar casolà bo. Habitació reformada i àmplia per dos adults i 3 nens. Els empleats molt bon tracte.

Feia temps que volíem fer-hi una estada a l hotel i la veritat que l experiència ha estat super positiva.
Ens feia "por" que l hotel estigues situat a peu de carretera però res ultra tranquil.
De les millors vistes que hem tingut mai, el tracte del servei excel·lent i el menjar extraordinari, vam quedar al·lucinants amb l esmorzar (vam tenir benzina per tota la cursa)

Segur que repetirem

La ubicación y vistas del hotel espectaculares. La pena es que necesita un mantenimiento integral, pintura paredes, grietas, alumbrado.limpieza también deficiente. En cambio espacios comunes muy acogedores. Si invertieran en todo esto conseguirían elevar su puntuación. Ya que la cena y desayuno muy abundante y variado y el personal muy atento y amable.poco el

Casa rural muy acogedora, personal de recepción y comedor excelentes, educados y serviciales. Comida casera muy rica. Cierto que necesita una reforma el hotel pero aún así la estancia se hace muy agradable.

Este hotelito de montaña, situado a pocos kms.de Ribes de freser, es un lugar para reposar y pasarlo bien, incluso en verano, ya que tiene piscina. El dueño y los trabajadores son muy amables y las comidas están verdaderamente muy ricas. Si puedes, no dejes de visitarlo.

Sitio bonito, tranquilo y unas vistas impresionantes desde la terraza y el comedor. Variedad en platos muy bien elaborados y un trato muy profesional

Es muy rústico. No tienen encendida la calefacción y estamos a 5 grados en el exteror. La comida normal. Yo no volveré

El Viernes cuando llegamos a la habitación estaba muy fría y pasamos frio toda la noche, la habitación tiene moho, No lo aconsejo

Tuve la  suerte de ir a este sitio y me encantó, aunque quería una habitación con balcón y no pude tenerla pero las vistas desde la ventana eran muy bellas daba hacia la montaña, el personal es maravilloso, lo lleva una familia, cada día hablaba con la dueña es una mujer mayor muy sabia la Sra Loreto, fuí sola y me sentí cómo en casa, las instalaciones rústicas y te hacen la habitación cada día, la comida, contundente de campo, muy buena.
Por otro lado, la hubicacion es ideal, en medio de montañas.
Yo no tenía coche pero caminando desde ribes de freser es una hora, casi nada y vale la pena.
La zona en la  que está el hotel, está llena   de muchas rutas de montaña y son preciosas, he visto caballos, vacas,   saltamontes, alguna ardilla, perros, gatos, ranas, muchos insectos y estaba recordando mi infancia.
En definitiva, le doy un 10 a este hotel, y claro volveré  aunque la próxima vez.acompañada.

Sencillo! Nos dieron habitacion en el tercer piso, SIN ASCENSOR. Comida de baja calidad. No hacen mantenimiento, esta todo muy dejado.

Sitio increíble, un paisaje de película, hotel un poco desfasado, poca limpieza comida aceptable, buen trato.aceptan perros.