La Calma de Bellver, Lleida

Hem vingut a sopar a aquest racó del petit poble. 2 adults i 2 nens i laveritat ha estat fantàstic.menjar perfecte tot molt casolà ens ha sorprès molt! Original del tot i molt acollidor! El tracte fantàstic! Hi tornarem segur!

Hem estat fent un aperitiu i no podem estar mes satisfets! He fet uns vermoutets amb unes patatas Braves, formatge i pernil iberic amb un pa amb tomaquet, tot bonissim. Qualitat preu mes que razonable. Detalls molt cuidats. Tenen terrassa exterior a la placa de l'ajuntament i una Terrassa interior molt acollidora. Tornarem de bon segur!

Un lugar con muchísimo encanto. Es una casa milenaria muy acogedora, la ubicación predilecta (está en una plaza muy bonita al lado de la muralla y en mitad del pueblo por lo que tienes todo a mano, las vistas de las montañas brutales también). Respecto al servicio del restaurante un 10. Estuve varios días en el pueblo y repetí varias veces. Las croquetas son de las mejores que he comido, la brasa buenísima también y tienen una carta de vinos muy completa. En este lugar te hacen sentir como en casa. Lo recomiendo al 100%

Nos gustó mucho encontrar el restaurante en medio de la plaza, platos muy exquisitos, personal muy atento, lo recomiendo

Ens ha encantat dormir a La Calma! Molt bonic, acollidor i tranquil amb vistes a la muntanya. Un lloc ideal per descansar i relaxar-te. Recomanable al 100%

Estuvimos un fin de semana con nuestra perrita.

La ubicación del hostal es muy buena. Está en la parte más alta de Bellver, con lo que la tranquilidad está asegurada, aún así, el centro del pueblo está a menos de 5 minutos caminando.

El personal del hostal es muy amable y cercano. Resaltar el trato agradable de las chicas y el chico que llevan el bar restaurante, por cierto, se come de lujo, platos ricos, muy bien presentados y precio asequible.

En cuanto a la habitación, la vimos un poco pequeña, sobretodo el baño, sin ningún espacio para los enseres de higiene y con una puerta para el WC muy difícil de abrir y ruidosa (tampoco hemos dado parte de ello, seguramente nos hubieran solucionado el problema).
La habitación y la cama son muy confortables y la temperatura és ideal.

En general la experiencia ha sido muy buena.

Es muy probable que volvamos.

Cuina de primera. Els millors peus de porc que hem provat! Espectaculars. Xai boníssim. Molt bon servei i tracte. Seguirem anant-hi ja que no es la primera vegada.ni serà la última segur! Jejejeeje

Hermoso rincón de Bellver donde han sabido mantener la esencia rústica del espacio y ofrecer un servicio cercano, amigable aparte de una oferta culinària curiosa y diferente.
Buena experiencia, buena gente.

Es un pequeño hostal familiar situado en el casco antiguo de Bellver. Los propietarios son muy atentos y ofrecen desayunos muy completos. Si tenéis la oportunidad de comer o cenar allí, aunque no estéis alojados en el hostal, lo recomiendo 100%. Muy bien de precio y Roger, el cocinero, prepara unos platos sencillos pero buenísimos (muy fans de sus patatas!).

Muy buen trato. La comida buena. La terraza interior genial. Nuestra experiencia fue muy buena.
Repetiremos seguro.

Un lloc molt curiós, amb 4 segles d'antiguitat, tracte familiar, aforament molt reduït (perfecte) i cuina amb productes de molta qualitat. No espereu luxes ni modernitats.

Un pequeño y acogedor hostal en medio del pueblo de Bellver de Cerdanya. Las habitsciones con cómoda. Quizás los baños algo pequeños pero el hotel tiene ese aire de montaña y de casa rural muy original. Las vistas desde las ventanas son muy bonitas.
El sitio esta a 30 minutos de varias pistas de Sky en el lado Catalan o Francés.
Se puede dejar el coche en un parquing publico a 150 metros o en las pequeñas calles siempre se encuentra sitio
Sus propietarios son muy amables y sirven un desayuno (no incluido normalmente) muy completo y rico conermelada casera

Calidad-Precio excelente (si compartes gastos) para un lugar en el que esperas pasar una noche para solo dormir, y después estar fuera del alojamiento disfrutando del paisaje y los pueblecitos de la Cerdanya.

Las habitaciones son sencillas, rústicas, originales/con encanto moderno y muy acogedoras. En ningún momento sientes la frialdad de un hotel en la que todo es perfecto. La habitación que me tocó tenía una pequeña ventana-balcón con vistas a las montañas nevadas, y despertarse así no tiene precio. Las dos únicas pegas que le pondría: las luces de la cama parecía que no funcionaban, pero tampoco las necesitamos; el aislamiento sonoro no era el mejor, por lo que es importante ser consciente de ello y modular la voz a partir de ciertas horas, pero esto también suele ser normal y lo que esperarías en este tipo de casas antiguas reformadas de montaña. El baño era un poco pequeño y quizá en algunos momentos podía resultar incómodo, pero suficiente para la finalidad de una estancia corta. La ducha si se veía más cómoda.

La ubicación del hostal se encuentra en una plaza pequeñita con un encanto especial y un campanario muy bonito, pero que apenas se escucha en el interior a no ser que estés pendiente de ello. Para nada impide dormir. Fácilmente puedes ir a recorrer a pie el pueblo y pasar una tarde muy agradable. Bellver es precioso y tiene todas las tiendecitas de proximidad necesarias, parques y vistas para perderse y desconectar.

Respecto a la comida, decidimos no comer en el hostal, pero leímos la carta y parecía muy completa. Al llegar de cenar vimos a los comensales que cenarón allí y los platos que vimos no tenían para nada mala pinta. De hecho me quedé con las ganas de probar un postre de chocolate. Sí desayunamos por 8 euros, y calidad/cantidad precio buena. Embutidos, pan, mermelada y algo de bollería. La mermelada pondría la mano en el fuego que era casera, sin duda un gran valor añadido. Estaba buenísima. Otro valor añadido fue el pan de nueces: espectacular.

A nivel de trato, este fue super cercano y familiar, con mucha naturalidad. Sin duda uno de los tratos que me gustan más cuando viajo. Respecto ir con niños, lo ví perfectamente preparado y el personal muy atento para ello.

Si me preguntáis si repetiría, lo haría y no dudaría, porque estuve cómoda y lo mejor de todo, bien calentita en pleno enero.

Positivo: El servicio y la comida del restaurante excelentes. Y la terraza, ideal para un dia de sol y vermouth.

Negativo: Las habitaciones no estan insonorizadas y se oye todo el ruido del restaurante. Dificil descansar. Insoportable.
La habitación diminuta, fria y sucia.
A la mañana de partir, a las 12.07h, la señora de la limpieza de un modo muy muy desagradable nos exigió salir. Ya teníamos las bolsas hechas. Pero no fueron los modos.
En el baño no te dejan shampoo, solo gel y de muy mala calidad. Tampoco secador de pelo.

Conclusión: genial el restaurante para cualquier momento del día. Alojamiento para pernoctar no recomendado.

Poco tiempo, pero lo suficiente como para repetir por mas.buen sitio, agradable, buena comida.además de un precioso pueblo.

Comida de reyes 2022, fantástico, comida excelente, ambiente acogedor, muchos detalles para una mejor celebración y servicio inigualable!
Roger el dueño genial muy atento con la música y Nathan único con sus gin tónics!

La decoració és molt acollidora. Vam fer un sopar de 10 i l'atenció rebuda va ser immillorable.
Per picar, si us agrada el picant, molt recomanat el chili amb carn i els natxos. La carn de la carta molt ben cuinada i boníssima i acompanyada d'un bon vi de la casa.
Llàstima que tenien tot l'hotel ocupat i no vam poder passar nit. Ens en vam quedar amb les ganes. Per la propera hi tornarem!

Una maravilla, el nombre le viene al pelo. El pueblo una preciosidad. Maribel la dueña, un amor.

El restaurante es muy acogedor, la comida buena relación precio/calidad y el staff muy amigable

Muy buena comida, raciones grandes a buen precio y gente muy amable, terraza en la plaza mayor y otra trasera muy tranquila.