Le Cucine de Mandarosso, Barcelona

WORST CUSTOMER EXPERIENCE EVER

Last week I went to try out this place after hearing some good reviews. Unfortunately we had a very bad xperience and left before even starting any food. We ordered a bottle of wine and asked for some normal wine glasses as they serve the wine in low wide glasses. The waiter refused to give us other glasses and left our table without further explanation or serving the wine. From behind the bar he was giving my father negative hand signals that we would not get any other glasses. When he was finally sent back to our table I tried to tell him that is ok to give customers recommendations, but that he could not create a scene when a customer asks for a standard wineglass (which they had available and were given to other customers). The waiter did not even let me talk and he walked away angry from our table and refused to talk with us. The lady of the restaurant came to apologize for his behavior, but unfortunately it had escalated to much already for us and we left.

How can someone so arrogant and full of ego be a waiter? ! Treating your guests like that when they politely ask for other glasses. Hopefully he will get another job without customers soon, so other people can enjoy this restaurant.

Pedi ñoquis porque el camarero me dijo que eran caseros. Por suerte, estaba sentado al lado de la cocina, que es abierta. Veo que la cocinera (que mientras el rato que estuve ahi se iba tomando del pico un par de cervezas, lo cual no da una imagen muy seria) saca un taper con ñoquis ya con salsa, tira el masacote en un plato y lo pone en el microondas. Pense: "No, no deben ser los mios". Mas porque el resto de la pasta se ve que es fresca y la tienen en bolsas de papel. Pero al llegar a la mesa, era esa masa de ñoquis (que ademas ya estaba frio). Le dije que estaba recalentado del microondas y me dijeron que "los ñoquis no se pueden hacer en el momento". Les dije que "amasar" no, pero si hervirlos. Me los cambiaron por otro plato fresco que estaba bueno. Pero me parece que igual la calidad-precio no es buena.

Ni soy un experto en nada pero la pasta así como la carne es algo por lo que tengo debilidad y a mi humilde entender la pasta no es casera y los postres tampoco también debo decir que a los postres se molestan en darle un toque casero para por lo menos intentar disimular que no son industriales pero el sabor es el que es, en cuanto a la pasta, por mucho que se fuercen, no pueden convencerme bajo ningún concepto que la hacen ellos porque no es así, la pasta es comprada hecha del mismo modo que la compro yo no la cocinan mal pero el precio que cobran no es el adecuado dado que si se cobra como artesanía se ha de ofrecer artesanía. No he puesto una sola estrella porque no cocinan mal, pero no son sinceros en cuanto a la elaboración de la pasta ni los postres.

Creo que les sobran clientes y no se molestan en dar buen servicio. Hoy hemos ido un grupo de nueve personas bajo mi recomendación y a parte de esperar una hora para que nos sirvieran la pasta, a dos personas les han servido la lasaña después de comer todos. Lasaña que previamente hemos visto como la calentaba en el microondas. Cuando hemos comentado que tardaba mucho, el encargado de la cocina, un chico con barba ha sido de los más desagradable contestando que no somos los únicos, al menos podía pedir disculpas. Tres de los platos la pasta estaba excesivamente dura. No nos ha dado tiempo ni a comer postre ni ganas tampoco después de ver que les sobra la gente. Eso sí, el camarero que nos atendió, muy amable. Por eso no pongo una estrella. Una decepción ya que me gustaba mucho este sitio.

No tengo palabras para describir la experiencia que supone visitar este restaurante. Ciertamente, si uno desea teletransportarse al mismísimo corazón de Italia, este es tu lugar. Si se suman su exquisito y atento servicio, la autenticidad que desprende la cálida ambientación del restaurante y por supuesto, la sublime selección de platos (junto con los especiales del día), Le Cucine de Mandarosso se lleva un rotundo 10, sin 'peros'. Llevaba tiempo queriendo encontrar un italiano con mayúsculas en Barcelona, un restaurante que superara mis expectativas, que con un mero bocado me viese obligada a dejar el tenedor y saborear toda una explosión de sabores.

La lasagna de carne es, a mi parecer, uno de los platos estrella, así como la carbonara, sencillamente sublime. Su tiramisú es sin lugar a duda de los mejores que he probado, aunque es realmente difícil decantarse por un solo postre teniendo en cuenta que su amplio y creativo repertorio va variando.

Reservar previamente y a poder ser, si uno no quiere llevarse sorpresas, con un poco de antelación. Importante llegar a la hora y no retrasarse, generalmente hay siempre una lista de espera considerable.

¡Gracias por tan excelentes veladas!

Peor Italiano que me ha tocado en Barcelona, reservamos mesa para 9 y sin gente al inicio y fuimos los peor atendidos, por encima un ayudante de camarero se pone a discutir con nosotros por preguntarle que después de 1 hora no estaba lista una lasagna la cual tenían en la nevera y la calentaron el el microondas, por encima muy mala y sin sabor. La pasta de los demás de lo mas normal. La verdad no dejo comentarios pero cuando a lugares que les va bien porque siempre están llenos, dejan de dar buen servicio y descuidan todo.

Vaig anar a sopar amb la meva parella i vaig quedar molt decepcionat. La carta eren 5 plats de pasta i a sobre el plat de la meva parella, la pasta duríssima. Cal dir que malgratb tot els sabors eren excelents i el tiramisú una delicia. Vam pagar 13 euros per acda plat de pasta, 6 per el tiramisú (un robatori) i can cobrar el mateix per l'aigua que per una birra. El primer cambrer que ens va atendre semlaba de la mafia italiana, el cambrer de la barra en canvi molt amable. Sento dir que no hi tornaré.

Tenía ganas de probarlo porque me encanta la comida italiana y este sitio tenia pinta de servir italiana autentica. Teniendo reserva un domingo tuvimos que esperar una media hora, bueno, suerte que la zona es bonita y se puede hacer tiempo dando una vuelta por el barrio de La Ribera. Pedimos de primero unos antipasti y luego dos lasañas y un plato de pasta. Los antipasti, que son frios, no han de cocinarse, tardaron como 25 minutos en llegar. Antes de marchar fui al lavabo y pasé por delante de una mesa dónde vi que en bandejas tenian los antipasti, o sea, era solo cogerlos de las bandejas y ponerlos en un plato. 25 minutos para eso, me parece exagerado. La lasaña, lamentablemtne no puedo decir que estuviera buena, llevaba tiempo hecha y estaba recalentada, tambien es cierto que con la media hora de paseo y la espera para los antipasti ya se nos habian hecho casi las 4 de la tarde, así que supongo que haría horas que la habían cocinado. Igual recién hecha cambiaba la cosa. El plato de pasta, normal, bueno, pero nada extraordinario. No pedimos postres visto lo que tardaron en llegar los otros platos. Si me llamó la atención una pareja que llegó al restaurante bastante mas tarde que nosotros, se abrazaron al personal del restaurante (supongo que serian familia o amigos). Se sentaron a nuestro lado, así que me fijé, y cuando ellos ya habían comido primero, segundo, postre y pagado, nsotros aun esperabamos el segundo. Ójala pudiera decir otra cosa, pero no volveremos.

Pocas veces escribo reseñas negativas pero es que realmente me a dado mucha rabia la prepotencia del servicio y la poca educación.
Fuimos 3 personas, entramos los primeros y tardaron casi 1 hora en traer los platos principales y encima, el camarero, ni idea de lo que es salsa puttanesca.
Por si fuera poco cuando todavía falta un plato nos preguntan por el postre y cuando le comentamos que falta un plato, el tío empieza a resoplar, como si fuese nuestra culpa que no sepan lo que les falta por servir.

Sin duda una lastima porque el sitio es bonito.
No volveré.

We got to this place recommended by a local friend and though we were not disappointed it was not all we expected. First I'll tell you the good parts. Wine selection is small but different in the best possible ways. They have details on all the options and they offer recommendations based on your taste. The place looks cozy yet modern. It is a good option in an area crowded with tourist traps. Now the bad, food of course is pasta centric but this is not even close to great pasta. It is quite hard and the mixture of the pasta and the sauce is almost not existent. The taste was ok but it seemed reheated. Service is awful, we had to call for the waiter at least 3 times to get his attention. Price is off the charts.its pasta for god's sake. I would still recommended if you are strained in the area with no other options of your trust.

No són ni l'ombra del que eren. Anava sovint a aquest restaurant fa anys i malgrat mai ha estat econòmic, l'experiència ho compensava. Hi he tornat després d'un temps fora i la decepció ha estat immensa. Hi ha un cambrer que té moltes ínfules però no està capacitat per atendre el públic. Després de trigar una eternitat en prendre nota, van fer el mateix per servir el plat principal. En queixar-nos per tercer cop, perquè altres taules que havien arribat més tard ja acabaven el postre, l'home es va abraonar parlant-me a 10 cm de la cara i de forma molt maleducada. L'excusa fou que la pasta té un temps de cocció llarg. Suposo que el mateix de fa anys quan malgrat tot, el restaurant funcionava. Curiosament, taules que tenien reservades pel segon torn i els convenia que anessin ràpid, no van tenir problemes amb els temps de cocció.
Menció a banda mereix el fet que el mateix individu va determinar que jo no tenia capacitat per decidir què volia beure i que el meu acompanyant decidiria per mi. Sempre fa il·lusió veure com indueixen als teus amics a intoxicar-te etílicament.
No val la pena, per sort, hi ha molts restaurants italians millors que aquests avui en dia a Barcelona. I fins i tot tenen temps de treure la pols, no com a La Cucine on s'hi acumula.

The food is really good — amazing actually— although there may not be too many meat options. It’s a small resto —very nice — but there may be a bit of a wait for dinner. Menu seems to always be changing which is nice. Make a reservation or get there exactly by 9pm when the doors open!:)

Nos dijeron a las 15: 00 para comer y estuvimos esperando 1 hora hasta que nos atendieron. Se ve que les sobran los clientes y tratan al resto mal. Decepción.

El sitio no esta mal. Italiano auténtico. Los productos como la pasta y los postres los hacen ellos.local no muy grande como los que hay por la zona de la ribera de barcelona. Poca variedad donde elegir. Poca carta. Y para mi gusto caro aunque el producto lo valga.

Fluix, molt fluix. Entrants correctes, la pasta no era fresca i estava crua (no aldente). Les salses de tomàquet, àcida, directament de la llauna. Lloc ben ambientat, fashion i per a guiris.

Charming setting with lots of hype. Big line outside waiting for the restaurant to open at 9pm. We had high expectations. Unfortunately, something has changed between gaining fame and current food and service. Our server was forgetful without apologies. The “estofada” (stewed beef) was dry and overcooked. The monkfish pasta was mostly tuna. The dessert (lemon cheesecake) was fantastic. The wine was great. Prices were fair.

Cuina tradicional italiana, casolana, sense pretensions i molt bona. Preu més que correcte i bon tracte. Val tant la pena com per no poder anar-hi mai sense reservar amb dies d'antelació; per haver de fer cua al carrer per poder fer un menú de migdia o anar a les 2 i que et donguin taula a les 3: 30? La resposta es NO. Típic cas de restaurant sobrevalorat per la fama. No dic que estigui malament, però tampoc és per tirar coets.

Visité este sitio en varias ocasiones hace años y la verdad es que hasta hoy siempre había salido muy satisfecho. Hoy teníamos la reserva a las 21: 00. Abrieron las puertas a las 9 muy pasadas y había bastante gente esperando fuera. Nos acompañaron a nuestra mesa y se olvidaron de nosotros durante 25 minutos. La gente que entró más tarde que nosotros ya estaba comiendo mientras nosotros seguíamos sin poder ver el menú siquiera. Después de llamarles la atención varias veces por fin nos tomaron nota. El entrante tardó media hora más. Los segundos tardaron otra media hora - o sea, para cuando llegaron, llevábamos 1 hora y media en el restaurante. Todo esto con mucha calma por parte de los camareros que parecían más preocupados por sentarle a la gente que seguía llegando que por servirles a los clientes que ya estábamos sentados. Y encima la comida tampoco ha estado para tirar cohetes. Una decepción muy grande. Dudo que vuelva a no ser que me digan que haya mejorado algo.

Menú migdia a 12€. 1 plat a triar entre pasta del dia, amanides, 3 lasanyes, 3 gnoquis, pa, vi, postres i cafè. Plat extra 7€. Postres generoses i molt bones.
Lasanyes i nyoquis molt bons.
Amb el menú senzill quedes bé. Qualitat preu imbatible. Servei ràpid i eficient.
Decoració retro. Il.luminació justa.
Local petit però encantador.
Cal reservar ja que està concorregut.

Waited outside for opening and was first through the door, immediately told to go for not having a reservation. We did not see any indication that was necessary on the website. They didn’t even bother seating us for a short time. Snobby and overrated.