L'Obrador dels 15, Maragall, Barcelona

Pastas y bocatas muy buenos. No pongo 5 estrellas porque la atención aunque amable es algo lenta.desde hace unos meses que cambiaron la distribución y parece que ha ganado algo de espacio pero se queda pequeño porque va
mucha gente. Fuimos con el carro del bebé y es justillo. Sólo tienen un único lavabo y es estrecho, no cabe el carro de bebé. Tiene una terraza que siempre esta concurrida.

Es una lástima que con la buena calidad del pan y las pastas, lo estropeen con el servicio. Y la culpa no es de las empleadas, que hacen lo que pueden, sino de la desorganización y de la increíble rotación de personal. Cada vez que vas, siempre hay una chica que ya no está y hay otra nueva, y así es imposible.

Sobre el pan y el producto no puedo decir nada más que magnífico pero lo empaña la actitud de la dependienta de la tarde que me dejó anonadado.un desentendimiento, falta de atención, y una desfachatez increíbles. Y veo que no soy el primero en opinar de semejante guisa. La siguiente impertinencia pongo una hoja de reclamación. Por cierto, es cuanto menos curioso, que a raíz de un comentario negativo sobre la dependienta de la tarde aparezcan reseñas buenas sobre esta persona "Merche". A ver si les estará regalando pan o serán sus amigos y amigas.

Un lugar acogedor y buen servicio toda las pastas están muy buenas y de precio está muy bien el pan también está genial

Cafetería-horno tradicional con una amplia gama de pan y pastas de elaboración propia.
Puedes diseñar tu bocadillo escogiendo el tipo de pan.
También hacen platos para comer al mediodía.
Disponen de unas pocas mesas para tomar allí lo que se quiera. Ambiente acogedor y cálido

Para la próxima ves, recomendaría a las dependientas que antes de servir el producto que ofrecen vean que este en condiciones, se les podría decir que la educación nunca está de más, y la relación precio producto no lo veo proporcional.