Mil Estrelles, Girona

La habitación de la masía está bien y es bonita. La booble es fría por la noche, no muy cómoda para cenar o desayunar. Si te falta algo en la cena o desayuno no hay manera de pedirlo. La cama de la booble es incómoda. Las habitaciones no tienen ningún detalle, ni siquiera un vaso donde dejar los cepillos. Eso sí, poder ver el cielo nocturno o el amanecer es bonito.
Claramente lo peor es la comida. El menú degustación deja mucho mucho que desear. Puré de bote, postres de Mercadona, y dos platos diferentes de salmón seco que no nos acabamos de comer. A parte, informamos de la imposibilidad de comer ciertos alimentos y nos trajeron alimentos que no podíamos consumir. El desayuno bastante justo.
El flotarium cuesta 72€ por pareja y te dicen que es una hora, pero no es verdad. Estuvimos apenas 30 minutos y dicen que es para que te duches, aunque digo yo que en la habitación ya me podía duchar. Además huele muy mal.
El personal es muy amable aunque poco resolutivo, al explicar está situación tampoco hay compensación alguna.
En resumen, está curioso, la masía es bonita, pero ni de lejos vale casi 300€ la noche. Es una barbaridad.

Mi experiencia en MIL ESTRELLES fue muy decepcionante. La habitación correcta, salvo que no había mantas y pasamos frío.
La ducha difícil de calibrar el agua caliente, y el desagüe no funcionaba, el agua se quedaba estancada y salía fuera de la ducha, por todo el baño.
Lo realmente decepcionante fue la cena, mal llamada, "Menú degustación" ha sido la peor que hemos tomado nunca, las cantidades mínimas, aunque lo agradecimos porque eran incomibles. No volveremos más, y no se lo recomendaría a nadie.
El gerente fue muy grosero con nosotros, cuando le dimos nuestras quejas. IMPRESENTABLE.

La experiencia es para vivirla una vez en la vida, estas increíbles burbujas crean un ambiente único y ver las estrellas durante la noche mientras estás dentro es una pasada.
El servicio fue súper amable, el desayuno y la cena excelente (si eres de comer mucho la cena es un poco escueta), los detalles inmejorables, cafetera en la burbuja, nevera con bebidas, una cajita de esencias para el baño y muchos extras para enriquecer tu estancia, en resumen no hay pega de la experiencia en si.
No le doy un 5 porque a la mañana siguiente hacía una calor horrible en la burbuja, el aire acondicionado era tan antiguo que no enfriaba nada y eso que lo pusimos a tope, a las 10h nos fuimos porque era imposible quedarte ahí hasta las 12: 00h que en teoría es el Chek-Out.

Hemos de pasado una noche en una Bubble jardí y la verdad ha sido una gran experiencia. Conexión en pareja en plena naturaleza y en silencio máximo. Con un masaje extraordinario a manos de jana. Un menú degustación de cena exquisito. El desayuno muy completo. Por poner una pega, que ya que no es barato ir, podrían almenos no ser todos los extra de pago. Algo debería ser gratis ni que fuera la bici, o el telescopio. Dado que es mil estrelles el nombre. Pero sin duda tanto la experiencia, el servicio tan amable y la Bubble hacen que pongamos un 10 a este fin de semana. Gracias

Amabilidad y atención, servicio 10.
Lugar tranquilo, el inconveniente es que dando un paseo no encuentras nada que ver, no hay ruta, ni parajes.
La masia es preciosa, zona chil-out acogedor, con todos los detalles.
La burbuja necesitaría un mantenimiento, los años pasan, la nuestra tenía un gran árbol platanero que tapaba la mitad del cielo estrellado, que en principio es lo que te venden, y no pudimos disfrutar, faltaría un telescopio, otras cadenas de hoteles burbuja disponen de uno por habitación burbuja. Cama ruidosa y se impregna cierto olor en las sábanas y toallas, está todo muy limpio, pero suponemos que por la calor y el plástico el olor algo desagradable queda impregnado en todo.
He podido comprobar que algún punto negativo que había leído en alguna reseña antes de ir, los propietarios han buscado soluciones.
Jardín privado muy amplio.
Cena y desayuno excepcional.
No está mal como una experiencia diferente, para disfrutar con tu pareja una vez. Precio un poco elevado.

Como nota graciosa, hagan caso, al tema de cerrar cremalleras antes de abrir la siguiente, la burbuja se desinfla en un abrir y cerrar de ojos jajaja

El sitio y la zona, inmejorable! La burbuja deja bastante que desear, muy desgastada, parquet en malas condiciones y para rematar, por la noche en la cama no se veian las estrellas por la suciedad de la burbuja

El lloc és especial, per la solera i anys de l'edifici.
A nivell d'habitació, al menys la nostra, hem trobat els matalassos poc còmodes. S'enfonsen i no permeten un bon descans.
En aquest entorn, on no hi ha res que fer ni on anar a l'abast, tenir una TV a l'habitació sería un punt a favor.
A partir de les 21.30 hs quan s'acaben els sopars ja no es pot fer res dins de la masia. Estaria bé poder fer una copa o llegir a la sala del pou per exemple, però ja queda tancada fins l'endemà.
Proposaria disponibilitat d'algun servei més pels hostes, i en horaris més amplis.
Recomanable per a una nit, amb el sopar, que a nosaltres ens va agradar.

Todo execelente.la burbuja, las intalaciones, el trato, el entorno, la comida, abundante y de calidad.en mi caso q soy vegana, tuvieron una atención muy cuidada para estar a mi gusto.
Hicimos pak con zona relax y tb genial.
Todo miy cuidado para tener la máxima privacidad. Voveremos!
Os lo recomendamos total. Es un regalo fantástico
Mil gracias!

Es original, pero si hay luna llena, no se ve una estrella por lo tanto alguien deberían decir algo al respecto si es que les interesara salgas satisfecho, pero “la pela es la pela”
Como suelen ser regalos, al menos en nuestro caso, uno no cae en elegir bien el día dependiendo de la luna y nadie te avisara de ello, una lastima ya que puede que sea muy bonito si coincide la luna adecuada.
Eso si, amables si que lo son y la masia está muy bien.

Nous avons passé un très bon séjour dans la bulle Sirius aménagée avec goût. Le calme du lieu est agréable. Nuria, la responsable, nous a réservé un superbe accueil. Le dîner et petit déjeuner étaient très appréciables. Nous avons fait une séance de flotarium et ce fût une belle découverte. Le personnel est très sympathique. Merci à vous et à bientôt.
Mélanie et Pascal.

El lugar es encantador, además que tiene su historia! La masia data del Siglo XIII.
El personal atiende con exquisita delicadeza y atención. El paseo en bici muy divertido. Hay una zona del bosque con un olor divino y muy particular.
Son los pioneros en las habitaciones burbuja! Volvería a ir seguro.

Me encantó la experiencia! Lo recomiendo sin duda alguna. Una sensación de dormir a la intemperie pero con muchas comodidades. Desayuno muy completo y la cena muy rica! Nos encantó que la llevaran a la habitación.

Una experiencia increíble que sin duda hay que vivir 1 o más veces en esta vida! El trato del personal es inmejorable, sin duda es muy acogedor, muy completo, la comida está deliciosa las instalaciones son increíbles sin duda repetiría. Nuria es una mujer encantadora conoce al pie de la letra la historia de la Masía y te hace sentir como en casa. Nada más llegar te ofrecen una copa de vino (blanco, negro o rosado) lo único que tienes que hacer es disfrutar. Las vistas dentro de la burbuja son increíbles en ese cielo plagado de estrellas, equipadas con todo lo necesario! Sin duda lo recomiendo

Pues no he llegado a ir porque la atención deja bastante que desear, de malas maneras. Luego he leído bastantes comentarios por aquí de gente que decía que les han atendido con sobervia y ya me ha cuadrado todo. Una lástima, porque parecía una buena experiencia, pero entre la atención he recibido para consultar y los comentarios de gente que se ha hospedado se me han quitado las ganas.

Una mica decepcionada. El sopar no cobreix espectatives, l'esmorzar es correcte. El soroll de l'aire per mantenir la bombolla no es molt fort pero es constant, el problema es que en alguna poblacio propera hi havia musica fins les 3h del mati, entenc que no hi poden fer res, pero haurien d'avisar. L'estat del parquet i de la dutxa lamentables. Nosaltres vam poder veure les estrelles, pero no pas millor que si vas a algun lloc lluny dels llums de la ciutat. El que els salva es l'amabilitat del personal, un 10! Ah! Si necessiteu canviar la reserva o sortir més tard de la bombolla no cal ni que pregunteu, la resposta es un no rotund. Jo no hi tornaré ni ho recomanaré

La habitación burbuja es muy bonita. Está muy bien preparada y dispone de todo lo que se puede necesitar. Por la noche se ve el cielo perfectamente. La cama es cómoda y la mesa es perfecta para la cena y el desayuno. La bañera dispone de agua fría y caliente. El único fallo es que hace bastante frío, y el aire condicionado no sale demasiado caliente.
La cena y el desayuno muy completos y ricos. Te llevan la comida directamente a la habitación.
La zona del jacuzzi es increíble y la recomiendo mucho.

És una experiència diferent, agradable. Diria que és per fer-la i disfrutar-la encara que repetir-la ja no ho tinc clar. El personal de recepció molt correcte i atent en el que necessites, molt bé per ells, no diria el mateix de la gerència. L'entrada si que és tard però la veritat és que es pot arribar més tard sense cap problema ja que no tens altres opcions que estar al teu espai si no tens contractat el jacuzzi o alguna cosa similar. Jo vaig trobar a faltar alguna sala més àmplia i còmoda per fer alguna activitat o senzillament pendre alguna cosa amb tranquil·litat. Si que et donen una copa de benvinguda però després ja no pots pendre res, la sala és maca, amb música correcta però no els pocs seients que hi ha, semble que siguin per passar el menys temps possible a la sala. En resum lloc correcte, experiència agradable per passar en parella

La señora o señorita Nuria, nos tiro del hotel por decir que había ruido del tractor y las obras del vecino, también por que no nos gustó la cena, un desastre de persona, muy disgustados

Muy buena experiencia sensorial aunque tuvimos mala suerte con la lluvia, pudimos ver el cielo estrellado durante algunos momentos de la noche y el personal excelente y cariñoso

Fue un regalo de mi familia. La estancia espectacular, el personal super atento y agradable. Estuvimos en una burbuja donde nos sirvieron cena y desayuno. La comida de gourmet, deliciosa y variada. La cama super relajante, y por la noche pudimos contemplar todas las estrellas desde el interior de la burbuja y tumbados sobre la cama. Para finalizar, hicimos una sesión de florarium, recomendable 100% para poder relajarte u desestresarse del ritmo de la semana. Un encanto en todos los sentidos.