Plaça de Masadas, Barcelona

Una placeta molt bonica on al vespre s'omplen ràpidament les terrasses. Hi han bar restaurants on hi pots menjar tapes boníssimes.

Una plaza muy alegre por la cantidad de ninos que alli Juegan en las tardes, pero a la plaza le hace falta una limpieza.esta algo descuidada.

Plaza con 8 bares, con variedad de todo, en comidas y precios, españoles y chinos, rincon sin trafico, me gusta, voy con frecuencia.

Hermosa, muy acogedora, ofrece una variedad de pequeños restaurantes lindos y de comida divina, o solo para tomar un trago o cafe.

Plaza con mucho encanto, estupendo para hacer vermouth en algunos de sus Bares y que los mas pequeños jueguen alrededor sin peligro. Lugar tipico del Sant Andreu antiguo

Plaza muy tranquila, a menudo con niños jugando y gran variedad de bares y restaurantes.
Tiene varios bancos y una fuente.

Plaça sense cotxes, ideal per prendre alguna cosa en una terrasseta i perquè la canalla jugui a la plaça.

Sitio entrañable, típico, conservado y con encanto.

Lastima que algunos bares aprovechen para sacar tajada a precios con los que en la calle de al lado cerrarían en 2 días.

Lugar precioso, con mucho ambiente, bares de tapas, hamburguesería, pizzería, ideal para que jueguen los peques sin peligro de vehículos.

Plaza con una fuente-surtidor ornamental en el centro y debajo de las arcadas que la rodean está llena de mesas-terraza de la gran cantidad de bares y restaurantes que la rodean

Hermosa plaza muy tranquila, ideal para familias y/o para ir a disfrutar tomando un vermut o comer/cenar en una de sus terrazas. Si váis con niños, cuidado con la fuente central.tiene un magnetismo especial y más de uno ha acabado dentro!

HISTORIA:
Edificada a finales del siglo XIX, la plaza de Masadas, en el corazón de la Sagrera, es una de las pocas plazas soportales que quedan en la ciudad.
Plaza porticada de estilo neoclásico, siguiendo el esquema utilizado en la plaza del Mercadal. Urbanizada alrededor de 1876, recibe el nombre de quien fue propietario de los terrenos de los alrededores, el abogado, diputado provincial y senador en las Cortes Pacià Masadas i Teixidó. Cedió los terrenos al Ayuntamiento y fue su sobrino, Josep Enric Coll i Masadas, quien coordinó, con el Ayuntamiento, la urbanización del espacio. Se instaló un mercado cubierto. Fuera, los campesinos de la zona vendían sus productos en puestos.
A principios de los años noventa del siglo XX, el mercado cubierto estaba muy deteriorado y se derribó. La plaza restaurada quedó como un espacio diáfano rodeado de los porches sobre los que descansan antiguos edificios de viviendas, que otorgan a la plaza el aire de pueblo que siempre había tenido.

M' encanta aquest raconet. Sembla una plaça de poble, amb encant. Amb gent. Per un moment, t' oblides que estàs a la ciutat entre tan d soroll.