Raffaelli Ristorante Italiano, Barcelona

Ambiente, con ambiente hogareño, muy limpio, personal amable y profesional, el dueño es amable y muy profesional.si buscas un ambiente amigable estás en el lugar correcto!

Me bastó con poner un pie en el hermoso lugar para sentirme como en casa, el ambiente era sumamente acogedor.
Reina la amabilidad, la profesionalidad y la atención al cliente.
Comida de excelente calidad, combinaciones perfectas, mezcla de sabores inolvidables.gracias familia Raffaelli por este almuerzo verdaderamente de primer nivel.
¡¡Definitivamente vamos a estar de vuelta!
Súper recomendado para quienes quieran comer bien y sentirse mimados.

Gracias por esta bienvenida, gran restaurante italiano (Toscana) que trabaja con productos frescos.

Vine aquí en el último momento buscando algo informal después de casi 3 semanas en España. Absolutamente me encantó todo al respecto. Comida excelente y fresca sin ser demasiado sofisticada. No podría recomendar este lugar lo suficiente. Si estás buscando ese pequeño bistró italiano perfecto sin todas las tonterías. Este es el lugar. Escribí esto cuando acabamos de salir como pensé que se merecía.

Restaurante ideal para una cita! El local nos encantó y los platos que probamos estaban buenísimos. Volveremos seguro!

La comida es buena pero las porciones son demasiado pequeñas para precios tan altos.
Servicio desastroso.

El menjar molt correcte però el preu excessiu. Un àpat complet, compartint un primer entre dues persones, un segon per cap (dels econòmics de la carta), postres, vi i un xarrup, 50€ per cap. El lloc està bé però no s'ho val.

Muy mala relación calidad-precio: raciones pequeñas a precios elevados. El servicio era bastante bueno y la comida estaba bien, pero no volveríamos.

Top restaurantes italianos de Barcelona, sin duda. Mucho mejor para cenar que para comer, la noche le da un toque mágico al local que durante el día no tiene (para mi gusto).

La parmigiana es sublime, y los otros entrantes son muy correctos. A nivel de pasta, si comes carne, la carbonara dicen que es de las mejores de Barcelona (el primer día fuimos 10 y todos coincidieron en eso), la pasta con almejas es increíble, un sabor a almejas frescas que te transportan a un restaurante de costa al instante.

¡Súper recomendable!

Espectacular ristorante. Una cocina muy cuidadosa en los sabores. Me llevó a Italia sin moverme de Barcelona.

Excelente ambiente familiar, la comida deliciosa el servicio bueno, lo único es que tendrían que tener los vinos en la nevera el vino blanco se toma bien frío!

¡Nos encantó este restaurante! Si fue increíble. El servicio fue excelente. Estamos tan impresionados y tan mal que vinimos aquí y luego nos sentaron sin reserva a las 10 p.m. Mi esposo suele reunirse conmigo allí, pero eligió la lasaña de verduras y yo elegí los raviolis de espinacas. ¡Ambos increíbles! Compartimos una ensalada con un par de copas de aceitunas como aperitivo y un par de copas de vino tinto además del violonchelo de limón, el broche de oro de la cena. ¡Definitivamente lo recomiendo!

Deliciosa pasta.
Los platos que he probado estaban todos buenos y el sabor de cada plato muy logrado.
Son muy agradables.

Bastante decepcionada. 30 minutos para recibir un plato de pasta pasada.
Calidad precio no vale lo pagado.
No lo recomendaría.
Si pides un plato solo te quedas con hambre.

Hemos ido a comer al mediodía y podemos decir que el trato por parte del servicio ha sido bueno, nada que objetar al respecto. Para compartir hemos pedido la tapa/entrante de patata y bacalao, que inicialmente debía ser boniato y salmón pero no tenían. La pasta que hemos comido, una vongole le faltaba tener un poco más de sabor y especialmente más almejas, que escaseaban en la ración. El otro plato era unos espaguetis cacio e pepe que estaban más gustosos y contundentes. Ambas raciones son muy justas para el precio que tienen, unos gramos de pasta más, estaría más acorde, por favor! La pasta la cuecen “al dente”, cómo seria en Italia, por lo que si así no te gusta, mejor decirles que la quieres más cocida. Han tenido un detalle inesperado antes de servir los platos demandados, un snack/tapa muy rica, gracias.

La comida y el ambiente espectaculares. Un rinconcito de Italia en pleno centro de Barcelona.

Después de que el algoritmo de Google decrete que el contenido infringe sus normas vuelvo a escribirlo:

"Lamentable atención y servicio y decepcionante relación calidad-precio: una experiencia para no repetir.

Con más de un mes y medio de antelación reservé mesa mediante una aplicación en la que el restaurante aparecía. A la semana me la cancelaron. Tuve que llamar y volver a reservar. En ningún momento me advirtieron que había unos horarios estrictos en función de turnos. Pedí a las 14: 30. La semana de la comida me llamaron una vez para adelantar la hora, lo cual admití (la pasamos a las 14: 00) y otra para retrasarla (a las 15: 00) a lo que me negué. Cuando llegué al restaurante a las 14: 00 la hora que constaba eran las 14: 30. Bueno. Podía ser un error. Nunca me había pasado pero en fin.
El lugar es gracioso pero las mesas son pequeñas y estrechas y no hay demasiado espacio para los comensales.
La comida bien, pero la relación calidad-precio deja bastante que desear: unos 80-100 gramos de linguini con 6 almejas pequeñas por casi 20 euros es un poco excesivo; las orecchiete, que no estaban al dente sino pasadas, también eran justitas y los embutidos y quesos más de lo mismo: raciones escasas para el precio. Asimismo, en los vinos el incremento era notable. Un sangiovese que en una vinoteca te cuesta 18 costaba más del doble (lo cual no es un buen síntoma) pero qué le vamos a hacer.
Lo peor vino con el postre. Pedimos un par de coulants i la camarera nos avisó que tardarían de 10 a 12 minutos porque había que hacerlos (lo cual encuentro lógico). Pasaron los 10, los 20, los 30, los 40 minutos, sin que nadie se dignara decirnos nada. Sin ser desagradables preguntamos a la camarera recordándole que nos había dicho que tardarían de 10-12 minutos y ya habían pasado 42 y nos respondió, de forma poco agradable, que primero habían de servir los segundos de las mesas que habían llegado después de nosotros!
A los 48 minutos llegaron los postres sin ninguna disculpa salvo un "¿Queréis un limoncello por la espera? " (menos es nada, pero hubiera sido preferible un "lo sentimos").
Decepcionante. Pagar 60 euros por persona para unas raciones poco abundantes, en un espacio reducido y con una atención deficiente no es de recibo por mucha inflación que haya.

Disfruté de la comida, el ambiente es acogedor y el servicio es increíble. Vine por la recomendación de comida italiana de un amigo y el restaurante no me decepcionó.

Nuestras comidas eran deliciosas! ¡El servicio fue increíble y el ambiente era acogedor para nuestro grupo de 9!

Fuimos a comer el domingo con unos amigos, repetiremos seguro! El servicio muy amable y atentos! La comida espectacular. Todo de 10!