Restaurant Amics, Gratallops

Restaurant amb vistes, acollidor i bona atenció. Hem fet un menú degustació que ens ha encantat. Recomanable 100%

Demasiado caro para lo que te dan en el menú degustación!
Pero el ambiente y el restaurante encantador

Sin menú, un solo menú con opciones de carne o pescado o carne y pescado. Platos creativos de estilo gastronómico a un precio asequible. Amplia selección de vinos. Agradable entorno en una finca vinícola con impresionantes vistas del Priorat y música lounge de jazz. Platos y menús más sencillos para niños o papilas gustativas exigentes. Chic sin ser caro.

Lugar con vistas, pero de calidad regular y decoracion poco acogedora. Solo ofrecen dos menu desgustacion de 47€ o 60€, con bebidas no incluidas (la copa de vino de la casa cuesta 8€).

Servicio amable, pero con muy poco personal en sala (2pax) y en cocina (1pax). Tiempos de espera entre platos totalmente inaceptable de mas de 30 minutos entre plato y plato.

Hay muchos mejores restaurantes en la zona, con mejor servicio y sin tener que esperar tanto entre platos

Buena comida y buen servicio, se echa de menos que se pueda escoger un poco más la comida, en nuestro caso solo podíamos escoger el segundo (1 carne o 1 pescado). A tener en cuenta que si se aparca en el parking, la subida es totalmente a oscuras y con una pronunciada pendiente.

La qualitat del mejar i del servei son absolutament excel·lents, digne de estrelles Michelin. El lloc també és meravellós, tot i que s'ha de fer un camí en cotxe. És una experiència gastronòmica que val molt la pena.

Hicimos la reserva con anticipación, esperamos por media hora y nunca abrieron. No lo recomiendo.

Lugar con vistas envidiables. Mobiliario algo antiguo. Cocina de altura aunque cara. Muy elaborada pero algo escasa. El servicio no acompaña a la categoría de comida que quieren dar. Un restaurante así debería enseñar a sus camareros a no llevar los platos apoyados en la barriga, a abrir la bebida delante del cliente o retirar las copas sin poner los dedos dentro. Se echa de menos la profesionalidad. Da la impresión de estar en un restaurante de lujo por el precio con camareros de una tasca.

Magnífica experiencia, en el corazón del Priorato, restaurante con unas vistas espectaculares, un menú de estrella Michelin, con un ajustado precio (48 el menú corto creo recordar) y producto de proximidad entrantes, un pan crujiente de avena, pipas y comino esta especie que en justa medida a los amantes especieros nos encanta, unas aceitunas maceradas de arbequina como no podría ser de otra manera.

Dos aperitivos en cucharitas uno con helado y un crujiente de buen queso de cabra con berenjena.

Una ensalada que bien podria ser un segundo plato de mucha categoría, tomate de la zona estos por la temporada, los nax de bruixa, nariz de bruja por los raros que son, pero el sabor es a tomate de los de antes, de lo que no se encuentra ya, esta ensalada templada con langostinos, recién cocidos, en su punto, langostino fresco, además con unos trozos de aguacate, unos trozos de higos de la zona, un helado de tomate raff, y un picadito de verdura al dente, zanahoria, judia y raiz de nabo, un crujiente verde y rico, mezclum de buenas lechugas y aceite rico de arbequina, una ensalada que como dice un cocineto famoso. Brutal.

De plato principal pedimos carne, uf que carnes, ternera de la buena, entrecot de esos melosos y mantequillosos, que se come hasta la grasa, sobre un puré de patatas pero de verdad como hacen los franceses, encima de la carne, trufa también de la buena, en el fondo del plato una salsa de carne con sabor a buena tecnica de cocina, fuego lento, tostados, vinos bien evaporados y una flor de calabacín de algún productor cercano en témpura muy crujiente.

Postre magnífico de helados de coco con mango, gelé de maracuyá y buen chocolate, muy acertada la combinación.

Muy buen servicio por parte de los dueños, en cocina y en sala, profesional, educado y cercano a la vez.
Merece la pena ir al hotel que está encima, o visitar alguna bodega y comer aquí, nosotros fuimos a Mas Doix, nos encantó la bodega y nos reconendaron este restaurante.

Bonita mesa con magníficas vistas y un servicio impecable. Menú degustación con muy buena relación precio/cantidad. Buena selección de vinos.

La bienvenida es cálida y amable, el personal atento. La ubicación en medio del Priorat es simplemente única. Rodeado por estas cadenas montañosas, la experiencia culinaria tiene un efecto increíblemente desacelerante. El equipo de cocina evoca un menú sofisticado y cuidadosamente coordinado. Los platos se preparan regionalmente, los componentes fríos y calientes se combinan hábilmente. Incluso los variados aperitivos aperó nos inspiran espontáneamente. La ensalada se complementa imaginativamente con pequeños higos, pequeños trozos de aguacate y gambas. Aquí, también, el chef (Marc) juega con diferentes elementos de sabor y temperatura.
El filete se sirve con su corteza de tocino realzada en sabor (puro disfrute) sobre cuscús. El topping se complementa con flores de calabacín fritas rebozadas a la cerveza y tiras de aguacate. Fantástico. La verdad es que ya estamos llenos, pero no queremos para perderse los diferentes snacks helados. Disfrutamos a un gran nivel. ¡Gracias, Marc y equipo!

Vam anar a fer el menú degustació: els entrants i el primer plat són sorprenents, la resta del menú, així com el maridatge, ens van decebre. El millor vi del maridatge és el blanc amb diferència.
Les vistes i el lloc són espectaculars.

No puedo decir lo suficiente sobre esta excelente experiencia culinaria. Dirigido por el chef y su esposa, recibe a los clientes en lo alto de un mirador del Priorat y las montañas cerca de Grattallops. Las vistas más hermosas, especialmente las puestas de sol.

Cómo esta ubicación no es una estrella Michelin es una locura para mí, pero también es un secreto bien guardado en esta región. Si viaja por las regiones vinícolas y cerca de aquí, verifique la disponibilidad de reservas. ¡No te decepcionará!

El lugar tiene potencial: ubicación y vistas increíbles. Sin embargo, todo lo demás decepciona.

La comida, en teoría, es creativa y más lujosa; en realidad, esas extrañas combinaciones simplemente no funcionan. ¿Pescado con puré de champiñones? No para mí.
El local debería ser reformado, está un poco anticuado.
El servicio también está por debajo del promedio. La lista de vinos es larga, pero obtuvimos una botella que se abrió el día anterior (? !).

Honestamente, por el precio que pagamos, sentimos que fue una mala experiencia. No lo repetiría y estoy realmente sorprendido de por qué la calificación y las críticas de este lugar son tan altas. Hay mejores lugares en la zona.

Fantástica experiencia en un lugar maravilloso. Excelente servicio y menú degustación con platos originales y sabrosos a muy buen precio. ¡Muy recomendable!

Un lugar encantador con una hermosa vista. Servicio muy cortés. Los platos son hermosos y muy sabrosos.excelente

La mejor comida que comí en mucho tiempo. Increíble ubicación y personal con los pies en la tierra.

Bonito lugar con vistas a la montaña, la comida muy rica con una cuidada presentación, la chica que nos atendió muy simpática y atenta, el precio muy caro para estar tan escondido entre pequeños pueblos en medio de la montaña

Buena comida, buena selección de vinos (Priorat, Montsant), hermosas vistas de las montañas circundantes.

Entorno envidiable. Hemos degustado y disfrutado el nuevo menú de primavera en la terraza que dispone el restaurante con un servicio muy atento por parte de los camareros y una cocina de altura, elaborada en el momento. Precio algo elevado pero lo pagaría nuevamente por la calidad del conjunto.