Restaurant Can Barata, Barcelona

Increible! El mejor sitio que conocemos para comer un buen arroz!
Siempre que vamos, tanto la calidad de la comida como el trato es espectacular, el lugar, dispone de una terraza climatizada ideal:)
Esta vez, hemos hecho el menu arroz de 33€, incluye un extenso pica pica + arroz o fideuá + postre, bebida y café, asi que hemos salido super contentos como siempre!
Recomendable 100%
La próxima vez, provaremos a la carta, ya que hemos visto varias opciones de sugerencias que nos hemos quedado con las ganas de probar:)

Es un restaurante, elegante, cómodo,
con mucha luz y el servicio es muy competente y estricto.
Los ingredientes, primeros, segundos y postres de los menús son de gran calidad.
La carta muy variada.
Te hacen sentir, como un buen cliente.
Muchas gracias.

Sitio muy bonito y con clase pero algo caro para lo que es. La comida aceptable pero tampoco para echar cohetes. Personal muy amable.

Fuimos a por el menú de paella de mediodía y la verdad es que esta muy bien calidad-precio. De hecho, con los entrantes ya habría tenido suficiente. La paella buena (para mi gusto un poco salada) y el servicio como siempre muy amable. Eso sí. Para este menú, hay q ir con hambre porque las raciones son generosas.

Ha cambiado a peor. Carta menos extensa, raciones más cortas y más caro. Ensalada verde, escasa, 12 €, no está mal. Supongo que es la manera de adaptarse a los tiempos de covid. Paella buena, cantidad justita.

Local elegante, trato exquisito, salteado de setas con foie y alcachofas genial pero la bomba es la carne de buey a la piedra que comimos única y exclusiva en todo el valles, volvernos.

Vam dinar a Can Barata el diumenge 21 de juny, menú de migdia.

El problema va venir amb els postres. En el menú ofereixen tres plats de postres, tots amb lactosa. Nosaltres vam dir-li a la cambrera que hi havia una persona al·lèrgica a la lactosa i que quines opcions ens podia oferir, que una peça de fruita ja anava bé. Ens va dir que no tenia fruita. Li vam demanar que ho preguntés, ja que un dels postres sí que en portava com a part del plat. Ens va contestar que no la podíem fer baixar dos pisos a la cuina per preguntar si ja sabia que li dirien que no. Vam insistir amb els al·lèrgens i va replicar dient que ella també era intolerant i moltes altres coses i que s’aguantava. En aquest punt, li vam dir que la seva vida no ens interessava i que baixés a preguntar-ho o demanàvem el full de reclamacions.

Al cap d’una estona, un company va portar un plat amb pinya.

A part d’això, el preu una mica inflat en relació qualitat preu.

No hi tornarem. Hi ha molta oferta de restaurants i aquest no destaca especialment.

Servei perfecte, entorn correcte, espai molt bé, i els mes important, menjar impecable!
Ens han tractat molt bé, i el recomano sens dubte!
No parlo del preu, perquè quan menjes molt i molt bé, val la pena pagar una mica més, però que quedi clar, no es car!

Felicitats

Molt bon menjar i servei. Nosaltres vam fer el menú "arroser" i el "chuletón" (erem 8 i ens va sortir a 75€ la parella) i tot perfecte. Un lloc per repetir segur.

Relación calidad precio muy correcta, personal muy amables, espacio agradable, el unico inconveniente, el ruido y como nos han distribuido la mesa.

Buen restaurante. Para quedar bien con alguien. Las paellas han cambiado, cosa que baja su puntuación, pero sigue un buen nivel en el resto del menú

Fuimos a celebrar Sant Esteve y para ser un día complicado, la atención y el servicio d comidas fue muy bueno. La ensalada de contraste es buenísima, los caracoles espectacular, los entrecôtes al punto y buena calidad. Lo único que no nos gustó, es que reservamos en la terraza para poder fumar y al llegar nos contaron que no se podía porque habían niños cosa que nos parece correctísimo. Lo que ya no vemos tan correcto, es que cojan la reserva, te aseguren que es para fumadores y luego cambien la historia. Poco profesional.
. Tres años después elimino 2 estrellas.
Añado a mi reseña que el servicio ha desmejorado muchísimo. Hay un camarero bastante desagradable. Las chicas muy bien. Los platos salen sin tener en cuenta que aún se está con los primeros y a la hora de comerlos, se han enfriado. Ni que estuviésemos en un restaurante de comida rápida.
Hay una mesa en la terraza de castigo, es redonda y está en la esquina izquierda al entrar. Pobre al que le toque sentarse mirando a la cristalera donde da el sol!
Es una pena porque ya es la tercera vez que nos la dan. Ven la incomodidad del cliente y no son capaces de solucionar lo.
Muy decepcionados creo que dejaremos pasar un tiempo antes de volver. Quizá para entonces mejoren estos inconvenientes.