Restaurant Hostel Benet, Lleida

El precio de la habitación un poco elevado para lo que es. Las habitaciones sin calefacción, con una simple estufa eléctrica, y el detalle de que en una habitación doble pongan simplemente un juego de toallas para las dos personas. También es curioso que no te entregan la llave de la puerta de la calle, y tienes que molestar a los dueños para que te abran, sea la hora que sea. La situación es buena, una plaza céntrica. El trato de los dueños fue muy bueno.

Vaig anar a gaudir per segon any del menu de l’oli, un menú basat en l’oli, tastos d’oli d’alta qualitat, plats amb l’oli com un component principal del plat. Molt bo, sofisticat, curiós i molt treballat. Intentant fer anar les neurones per provar coses noves cada any. Tot un festival i molt complet en varietat i quantitat!

En nuestro viaje en ruta encontramos el Hostal Benet para comer.
Fantástico todo.
Amabilidad, Nelly mi mascota encantada no hizo falta meterla en el bolso.
La comida muy divertida platos diferentes y cada uno con su especificación de elaboración y materia prima. Mezcla de sabores.
La camarera muy agradable y encantada de darnos las explicaciones.
Sin duda recomiendo que lo probéis.

Trato muy amable y familiar, pero el Colchón de muelles es durísimo, hay que invertir en renovar los colchones ya que es imposible dormir bien. La ubicación es buena y el pueblo muy bonito, pero suenan las campanas De la Iglesia toda la noche, Justo al lado, y a nosotros nos despertaron varias veces. LAS CRÍTICAS SON CONSTRUCTIVAS, son para mejorar…! ;-)

Hemos comido fenomenal en su restaurante. Ingredientes tradicionales combinados de manera sorprendente. Recomendable si eres celiaco porque controlan del tema, la mayoría de los platos son sin gluten y los que no, hacen lo posible por adaptarlo. Destaco por la originalidad y sabor su foie con pistacho casero, su canelon de vaca (versión sin gluten espectacular) y el postre de chocolate x 4. Ojalá volver pronto.

Solo puedo valorar el restaurante: Muy buena calidad en los productos y todos de proximidad.

Varem dinar espectacular, el servei de rest genial, el servei del hostal molt de poble pero guay i l'habitació molt justeta, pero guay

Son unos ladrones estafadores, solo teneis que preguntar en el pueblo por Elisa la dueña y os sorprendereis de lo que dicen de esa señora. A nosotros con engaños y estafa nos robaron 100 euros! Son unos ridiculos y absurdos! Ademas de q ese hostal esta a 45 grados es una sauna del infierno

Solo conocimos el restaurante. Nos sorprendió positivamente la comida. Paramos de camino a Madrid y la verdad que al entrar nos asustamos un poco por que no había nadie. Pero nos atendieron estupendamente y la comida desde el aperitivo hasta el postre muy rico todo. La cesta de pan con el aceite, un acierto.

Falta de plazas de aparcamiento.
Incomodidades en cuanto a entradas y salidas: Para poder entrar era necesario avisar de vez en cuando a la zona de recepción de enfrente, para que ellos mismos pudieran abrir la puerta. Un inconveniente también es la falta de ascensor en el apartamento de 3 plantas.
Recepción, de Bale.

Nos trataron con amabilidad, pero eso no quita que no fue un buen servicio (diría que falta personal). La Habitacion correcta, algo falta de limpieza (las paredes de madera estaban llenas de polvo que se veía perfectamente) y el punto por el cual no volvería es un Colchon de muelles que debe tener muchísimos años y que queda totalmente desfasado y resulta inadecuado para un buen descanso. La ubicación es buena y el pueblo muy bonito, pero si eres delicado con el ruido las campanas suenan toda la noche Justo al lado y a nosotros nos despertaron varias veces.

Menú de gustación exquisito. Aceites para mojar pan y no parar, y variedades de pan riquísimas

Vam anar a dinar durant la mostra d'oli. Vam gaudir molt de l'experiència. Ho recomano

Celebraciò familiar espectacular, menu degustaciò bonissim, servei i atenció magnifica. Molt nivell.

Tant sols puc opinar del restaurant i no puc dir una altra cosa que excel·lent. Molt bona atenció
Tant sols posar un petit però a la decoració del menjador. Pel nostre gust li faltaria una petita remodelació.