Restaurant ZAS NÚRIA, Girona

Hemos estado ahí el día 13 de octubre 2023
Creí que por estar en un pueblo muy catalán comería como se suele comer en Cataluña. Pero no fue así. No tienen ni idea de cómo se prepara una escudella, ni la escalopa, y las papayas dan pena. Total… no lo recomiendo a nadie

Fuimos ayer a comer a las 15: 00, tardaron en el servicio, suponemos por el cambio de turno. (ayer había muchísima gente por la zona).
Después fue todo rodado.
La comida estaba muy buena, erá menú de 25€.
Quedamos bien llenos.

No se os ocurra pedir canelones, los que pedimos estaban bañados en bechamel liquido y queso, bantante incomibles. Se lo comentamos a la camarera y su respuesta fue, que éramos los únicos que nos quejabamos al respecto.por lo demás todo normal.

Hola hoy fuy a comer a este restaurante, me lo an recomendado y me llevé una gran decepción puesto que pedí una ensalada la cual llevaba incluido un, y lo que no me gustó nada es que ningún responsable dio la cara, solo el pobre camarero que no sabía donde meterse, aparte de eso estuvimos mucho rato para ser atendidos, la verdad no sé si esto puede pasar y dar la simple respuesta de esque la ensalada viene embolsada, siento mucho tener que dar esta reseña, y lo único después de no dar la cara no an cobrado la ensalada del menú, creo que no an estado a la altura

Molt bona atenció, cambrer molt amable. Bon menjar en una plaça tranquil•la del poble. Moltes gràcies pel servei.

Molt bon servei i menjar!
Son molt educats i molt atents, hem vingut amb el gos i li han portat un bol d'aigua freda.

Hemos ido hoy 12 personas a comer y el trato ha sido genial. El menú 23€ (domingo) muy completo.
Hemos reservado para la terraza, pero el interior es inmejorable, con vistas al río.
Repetiremos seguro
Gracias

Mediocre, esa sería la definición.
Lo que ofrecen por cantidad y calidad no justifican los 24€ del menú ni por asomo. Por otro lado, en una reseña anterior de otro cliente, le preguntaban que donde habían visto que se ofreciera algo que no fuera el menú cerrado, pues ni más ni menos en su página web, a la vista de cualquiera está. En mi caso fue lo que me motivó (siendo de fuera) a reservar una mesa.
Además no es apto para personas con movilidad reducida si en algún momento necesitan ir al servicio, el cual además está pegado a la cocina. Hay que bajar unas escaleras donde se juntan las personas que esperan ir al baño con los camareros estresados haciendo equilibrismo con los platos.
En fin, no le pongo 1 estrella por la voluntad que le ponen los (muy jóvenes y con poca experiencia) camareros.

Para no repetir, la ensalada pasada de hacia días, las patatas rellenas son 3 trozos de fritanga congelada empapada en aceite

Menú completo y con mucha variedad, calidad en los platos y muy buena atención por parte del personal. Recomendable 100%.

Per mi ja comença a ser un clàssic en les meves estades a Camprodon! Molt bona cuina i servei! Les vistes des de les finestres de la part del riu molt agraïdes! Cuina tradicional amb petits tocs de creativitat!

Hace 30 años que frecuento este restaurante, desde que no lo regentan Carme y Pepito (creo que así se llamaban los entrañables anteriores regentes) no había podido ir. Hay cambios, pero hay que decir que sigue siendo recomendable, la amabilidad del camarero digna de resaltar.

El pasado martes, día 7 de deciembre, fui a comer ahí con mi hijo de 8 años y tuvimos una horrible experiencia.
Para empezar, en ningún momento se me informó que en el restaurante sólo se preparaba un menú único y que no disponían de servicio de carta. No tenían menú infantil y tampoco me dejaron compartir el menú con el niño. El menú en un martes LABORABLE era de 24€ y aunque me pareció increíblemente caro, accedí a comer ahí, entre otras cosas, porque ya me habían servido el agua y unas aceitunas de aperitivo.
De primero pedimos unas croquetas de cocido caseras que resultaron ser de todo menos caseras. De acompañamiento llevaba unas patatas fritas, medio tomate y un espárrago verde en conserva pasado por la plancha (reblandecido y sin sabor alguno).
De segundo, el niño pidió costillas de cordero a la brasa (3€ de supl), las cuales no sabían absolutamente a nada, estaban duras y parecían corcho, acompañadas del mismo acompañamiento que el primer plato. Tuve que decirle al niño que dejara de comer eso.
Yo pedí fideua de marisco y mi sorpresa fue que era más bien arena con fideos. Como marisco llevaba una navaja llena de arena (véase la foto). Esa navaja no fue ni pasada por debajo del grifo. Tuve que devolverla entera porque era incomible. Pedí otro plato, el único que recordaba ya que no me trajeron la carta de nuevo para pedir. Fue escalopa de pollo, con el mismo acompañamiento que los otros dos platos. Nada malo que decir del pollo, pero tampoco nada bueno destacable.
Ante tan mala experiència, rechacé los postres y el café y pedí la cuenta.
51€ por unas croquetas, un cordero insulso y un pollo rebozado simple.
Me quejé porque me pareció de mal gusto pagar tal cantidad sin haber recibido ni una disculpa y con bastante mala leche, me descontaron los 3€ del suplemento.
Pagué 48€ con targeta en un detafono que dejaron a mala gana encima de la mesa y que no vinieron a recoger en almenos 10min (momento en el que me fui). Salí de ahí sin que hubieran comprobado que había pagado y sin que devolviera el adiós de mi despedida.
Sin duda, no volveré jamás ahí.

Hemos ido a comer con la familia y hemos quedado encantados con el servicio y la calidad de sus platos y productos.

La relación calidad-precio es excelente y realmente hemos podido degustar diferentes platos de cocina de mercado.

Un menú bien diseñado a un precio muy competitivo.

Lo recomiendo al 100% en su visita a Camprodon.

Un domingo menu 23€,
Pido carta porque soy incapaz de comerme todo un menu y no tienen carta.
Tal cual somos 4 y me han dejado sin comer.
Nunca mas.
Vision comercial cero!

Menu (23€) muy, muy amplio venimos un domingo. En el puente tuvimos suerte ya que quedaba una mesa.imprescindible reservar. Primero escudería (muy buena) segundo entrecot, sin decirles nada no podrían haber acertado más con el punto, postres pastel de queso con chocolate caliente. La porción es pequeña pero está legendario de bueno. Destacó y perdón pero el vino blanco de la "casa" está DPM un roca brava BUENÍSIMOS. Enserio. LLAMAR, RESERVAR Y COMER AQUÍ

Un bon restaurant, amb una carta equilibrada i variada, calitat amb el producte de Km 0, amb chef amb talent, un servei exquisit, preu perfecte amb la relació preu - calitat.
Fa anys que els conec i mai he vist cap baixada amb la calitat ni amb la professionalitat
Totalment recomanable

Menjar: Cuina catalana. L’entrecot al punt semblava un bistec, i estava massa fet.
Preu: Menú cap de setmana, 23€. Està per damunt de la qualitat del menjar.
Servei: Justet. Per començar hem demanat unes clares (cervesa amb llimonada), però ens han dit que això no ho feien. Als 5 minuts han servit a la taula del costat una jerra gelada de clara. Cap de les dues cambreres que ens ha atés parlava català.
Postres: Hem demanat uns flams cassolans, i no sabria dir si era bó. La textura era molt extranya.

Suposo que aquest era el motiu pel qual hi havia cua a tots els restaurants, menys en aquest.

Como se nota que son los mismos dueños, hace cuatro años que lo tienen otra gente.

Explico mi experiencia.

De primero me pedir un timbal de escalivada, pues mi sorpresa fue que me traen un puré que no se que era.

De segundo pedir filetes de pollo con salsa de roquefort, pues estaba todo crudo. (No comí)

Cuando esperas a que te sirvan te traen unas aceitunas para esperar, pues cuando ya se acabavan debajo del cuenco había un mosca muerta.

Olé ellos.

Por supuesto no voy a volver a este restaurante, antes se comía mucho mejor.

Está bien para comer algo cuando visitas el pueblo, sin más. Los camareros son muy amables pero se nota que no son profesionales, desaparecían todos de la sala y si necesitas algo puedes estar varios minutos esperando que aparezcan. Sirven a la mitad de la mesa y los otros tienen que esperar tanto que cuando les traen el plato los amigos ya han acabado. (La cocina esta en otra planta y se pierde mucho tiempo en ír y venir) Les pedí que me pasaran un poco más mis calamares y cuando me lo trajeron la guarnición estaba helada. Eso sí se nota que lo hacen lo mejor que pueden y el hartón de subir y bajar escaleras merece un reconocimiento.