Restaurante el Astillero, Tarragona

Una experiència molt xula al Port Pesquer de la Urbanització Sant Jordi (L'Ametlla de Mar).
Lloc tranquil i únic
Cuina calera amb tot el producte fresc i molt ben cuinat
Preu una mica car
Servei.a millorar!

Hi tornarem de ben segur. Sobretot, voldria felicitar al cuiner: passió i dedicació amb tots els plats que vam demanar. Tots els plats puntuació EXCEL. LENT!

La comida es escasa y el precio elevado. 500€ para 13 personas y todos nos quedamos con hambre. El trato bastante agradable por parte de la mayoría de los camareros salvo uno que era bastante borde.
Lo único bueno que resaltar es que utilizan l'oli del mar, un aove de muy buena calidad.

Muy bueno.fuimos en familia.y todo era excellente al inicio de agusto 2021 y tambien un postre typo profiterolles! Lmuy rico

3 horas para comer y nos fuimos sin postres ni café. Mal servicio? No lo había, me explico, la camarera que tomaba la nota de las bebidas no era la misma que la que tomaba nota de los platos, si se les olvidaba una bebida o un aperitivo o un plato, te las tenías que ingeniar a base de insistir y estar en guardia para pillar al camarero correspondiente. Éramos 3,2 con bebidas y el otro muerto de sed, llegan los primeros platos antes que algún aperitivo, mientras esperamos se enfrían los primeros y se llenan de moscas y avispas también, por cierto, la camarera casi nos tira la langosta del arroz caldoso por culpa de los insectos, movimientos reflejos y falta de profesionalidad. La comida muy simple, sin sabor ni estilo, la langosta cruda. Para pagar tuve que avisar 3 veces, se nos hacía tarde, pero las cuentas las hacía otra persona y tardó sólo media hora y porque me levanté ya desesperada y me quejé! Una odisea gastronómica que lejos de deleitarnos nos dejó con dolor de estómago, con 165€ menos y sin tiempo para visitar los lugares mágicos de esa zona de L'ametlla de Mar.ni que decir tiene que no volveremos nunca y por supuesto, no le deseamos a nadie ese calvario!

Sitio espectacular para disfrutar de sus productos que son de gran calidad, muy buena carta de vinos, atención personalizada y muy agradable de los camareros y puedes disfrutar de unas vistas maravillosas desde su terraza, y el chef una gran persona

El servicio pésimo. Teníamos reserva a las 15.00 horas y empezamos a comer a Ls 16.00.
Las raciones muy escasas y caras, y la piscina cerrada.

Genial. Fuimos un grupo de amigos y salimos encantados. El entorno muy agradable, el servicio también, y la caldereta buenísima. Luego bajamos abajo a tomar alguna copa y los niños estuvieron en la piscina. Muy recomendable.

Simplemente desastroso.
Teníamos mesa a las 15.00 y empezamos a comer a las 16.15.
Jamón de bellota con pan de cristal. Ese cerdo no había visto la bellota en su vida y el pan de cristal era una baguette.
Sepionets con almejas. 4 sepionets y 10 o 12 almejas bañadas en ajo y perejil.
Calamares a la andaluza.lo único comestible
Arroz del señoret.pasado en insípido.
Los precios totalmente desfasados para lo que es la comida en sí.
Por descontado que no volveremos

Magnífico Lugar para ir en familia!
El personal nos recibió de lo más agradable, son alegres, amables, y demostraron profesionalidad y empatía en todo momento.
Nos aconsejaron fenomenal a elegir unos platos deliciosos.
Estuvimos muy bien ubicados comiendo cerca de la piscina para tener a nuestros pequeños a la vista y al rápido acceso 'por si pasaba algo'.
Los platos muy bien presentados.
La calidad del producto impecable.
Calidad-Precio-Lugar totalmente Equilibrada!
Dar las Gracias a todo el equipo! En especial a nuestros camareros y personal que nos atendió:
Sandra, Diego y Mariona!
Excelentes!
Muchas Gracias de parte de las dos Familias que disfrutamos este Magnífico día, Magnífica Comida y Estancia!
Hasta la Pronto!
Saludos!

Platos sin savor et mas cuit. Une grande attente! Plats trop cuit, et sec sin sauce. Une grande déception qui coûte cher!

El lugar es tranquilo y la atención buena. Estuvimos en la terraza cubierta junto a la piscina y los niños pudieron bañarse antes y después de comer. Es ideal para ellos y para tenerlos controlados desde la mesa.
La comida muy correcta, con variedad y platos cumplidos. Salimos a 25€/pax pidiendo bebidas, 2 entrantes, arroz caldoso de langosta, postre y café.
Recomendable.

Como su nombre indica una astilla por la calidad de comida que sirven,
todo congelado y de baja calidad.
Un lugar entrañable, pero una comida para no repetir.

Trop chèr!
Le poulpe a 21 € un sketch
A part les bravas c'est bien trop cher pour la qualité!
Extrêmement décevant.
Ce fut meilleur l'année dernière!
Il faut se ressaisir!

Relación Calidad-precio pésima.
La terraza es agradable pero hemos quedado muy decepcionados con la calidad de la comida y el servicio. Hemos esperado más de media hora entre el entrante, un tartar con supuesto tomate de cor de Bou de supermercado sin sabor, y el plato principal. Los calamares con almejas en su tinta, que constaban entre las recomendaciones del xef en la carta, estaban duros, completamente resumidos y fríos. La salsa sin alma. No se corresponde en absoluto la calidad de la materia prima, el servicio, ni la elaboración, con los elevados precios. No hemos tenido ganas ni de probar el postre. Este lugar es un quiero y no puedo. Nada recomendable.

Comida rica en especial la.fideua. El servicio atento pero un poco lento. El resto limpio y piscina limpia

Calidad-precio poco aceptable ya que los platos son muy reducidos para la cantidad que se paga. En el timbal de pulpo, apenas había pulpo al igual que en los calamares con alcachofas, donde solo encontramos 4 trozos de calamar.así que si tenéis ganas de pagar mucho y quedaros con hambre este es el lugar ideal. No volveremos

Precios abusivos para una calidad que no da la talla. Para mi el peor arroz negro que he probado nunca; seco, con excesivo sabor a pimiento y todo el "tropezon" que había eran dos gambas de una dudosa calidad.

Lugar agradable y poco más. El precio ya se asume que va a ser caro. Pero se espera una calidad acorde a ese precio, tanto en el trato como en el producto.

El trato: poca atención y nulos detalles. Media hora hasta que sacan el entrante y otra media hora hasta el plato principal.
Por no preguntar, no preguntan ni qué tal todo.

El producto: en un entrante en el que había tomate cor de bou, te plantan un tomate sin sabor. El entrecot, lleno de nervios y chicloso, ni las patatas que acompañaban tenían ninguna gracia. Las almejas con calamares en su tinta, aún estamos buscando su tinta y los propios calamares, que estaban muy reducidos y duros. Postre y café ni se nos ha ocurrido pedir.

Nada recomendable.

El sitio muy bueno. Al lado del puerto, muy tranquilo, con piscina. La comida un desastre, la carne muy hecha. Lo echarán a perder.

Espera de 1 hora para pedir los platos. Comida bien. Lo peor, que el camarero iba con la mascarilla bajada y le tuve que pedir que se la subiera. Lo mejor la ubicacion.