RESTAURANTE EL PAPÀ Y HOTEL RURAL EL MOLÍ DE PONTONS, Barcelona

Muy bueno todo, el personal super amable, la dueña encantadora. Fuimos estando de ruta en moto y volveremos.

Increíble. El mejor arroz de montaña que he comido. Todo buenísimo y un trato exquisito. Súper recomendable

Tuvimos la gran suerte de estar en esta habitación con jacuzzi, es espectacular. LA RECOMIENDO. Las imagines hablan por si solas. Gracias a todo el personal.

Hicimos cena y alojamiento en su hotel rural. Todo de 10. Restaurante muy bueno, comida casera y de proximidad, el hotel increíble, con habitaciones preciosas con jacuzzi en cada habitación. Para repetir!

Un espai molt acollidor i molt agradable. El menjar estava de lo més bo i el servei immillorable, tornarem segur!

Nos alojamos en una suite, y contaba con todos los detalles.
Los dueños son muy amables y acogededores

Molt bon tracte de la cambrera, molt educada i servicial.
Servei ràpid i de bona qualitat.
Hem demanat 4 entrepans i tots ells boníssims.

Muy bueno el menú de mediodía del fin de semana y el trato, muy cercano y atento. En mi opinión, los postres quizás son lo más flojo.

Servicio rápido y personal amable. Lugar limpio y cuidado, decoración rústica. Fuimos en grupo y el segundo estaba frío. Buena terraza para tomar un aperitivo al sol.

Bon lloc per anar a dinar. Plats generosos amb productes de qualitat. Encara que quedeu plens, deixeu un lloc pels postres, que valen molt la pena!

Muy buen restaurante de comida tradicional. Trato excelente y la calidad de sus productos también. Un clásico de la zona que hay que visitar

No ha sido una buena experiencia ya que de primero pedimos una tabla de embutidos, los embutidos eran de muy buena calidad como es lógico iba acompañado con pan tostado y nos cobra el pan aparte en ningún momento se nos explicó de segundo pedimos cordero lechal al horno precio del plato de 19 € por persona y por este precio el lechal estaba súper seco

Un verdadero placer haber recalado en este rincón del alt Penedés rodeado de montañas.
Segura de repetir la visita.

He ido un par de veces a desayunar y lo he disfrutado mucho, la verdad. Los bocadillos son espectaculares, pan y producto de primera, y te atienden muy bien. Gente muy maja. Tendré que volver a comer un día, a ver qué tal

Después de pasar 3 dias en El Molí sólo hay una descripción: fantasbuloso. El servicio de la Sra. Carmen y família ha sido estudendo, nos han acosejado sobre cualquier cosa, comidas, paseos, sitios para visitar y siempre acertando.
La comida del restaurante sin igual, los embutidos, el pan, el pescado, al carne, no puedes poner nada por encima de nada.
La habitación cuidada al detalle, ni le sobrani le falta nada, y del jacuzzi yano comento, que es de 2 rombos.
Felicidades y muchas gracias por todo.

Gran experiencia en la habitación Garnatxa, del 23 al 24 y para nosotros fue un fin de semana inolvidable.
Respecto al restaurante, la comida espectacular y servicio inmejorable. Sí que es verdad que según algunas reseñas que hablaban del precio no sabíamos que pensar, pero una vez disfrutado nosotros, el precio esta justificado en la calidad del producto. Somos una pareja que volveremos en algún momento (no sabemos cuando pues el precio de este finde no es económicamente fácil para "Nosotros") pero a veces queremos oro a precio de plata.

Se tiene que saber dónde se está y la calidad del servicio/producto.

100% recomendable y aunque sólo se pueda una vez cada mucho (como es nuestro caso) merece la pena.

Un saludo Lorena & Jonathan

Doncs la veritat crec que el preu no es correspon amb la qualitat del producte. és un lloc correcte, però res més.
El menjar és molt millorable, per mi evidentment.
Esparaba uns canelons casolans, una galta i la ploma de més qualitat i eren molt normalets.de fer la ploma es notaba de seguida que era porc vell.

Tot perfecte, l'habitació molt acollidora i el menjar boníssim. El porc senglar 100% recomanable!
Un gran descobriment, tornarem.

El trato es muy cercano y buenísimo, son muy amables Carmen y su hija Montse.
El hotel rural es precioso, no le falta detalle. Y la comida en el restaurante es casolana de verdad y el desayuno abundante y bueno. Sin duda repetiremos. Gracias Carmen por organizarnos la visita y cata a una bodega.

No podéis iros de esta vida sin pasar una noche en alguna de sus increíbles habitaciones, y sin comer o cenar en su restaurante. Carme, es una anfitriona excepcional y una increíble cocinera, y su hija y el personal, una delicia atendiendo.