Santuari de Lourdes Restaurant

Restaurante ochentero con un menú de fin de semana muy pobre en elaboración. Menú por 22€ sin incluir bebida. Me parece carísimo teniendo en cuenta la calidad de la comida. Patatas congeladas y el delito más grande: carne rebozada congelada (miren foto). Una pena

Conozco el lugar desde hace 40 años. Y me encanta la paella de marisco, muy buena. Buena atención y precio razonable.

Sitio maravilloso en plena naturaleza, se puede hacer picnic, o comer restaurante, comida buenísima, paella estupenda, para picar también, el sitio a mi me ha parecido encantador (hasta la música) atención estupenda.lo recomiendo.

Estube en la parte del merendero y barbacoas.nos cobraron 30 euros por una mesa pequeña, sitio bastante dejado para lo que cobran.

El restaurant del santuari de lourdes és un lloc enblemàtic d'Arenys de Munt, a mi em porta molts records, apats en família, celebracions. La qualitat preu prou bona, les quantitats de menjar correctes i el personal atent i molt amable. L'espai és molt gran i això fa que l'àpat sigui poc íntim, darrerament i han agut alguns canvis, i els canvis no sempre són per anar millor, en aquest cas han deteriorat una mica el servei, el temps d'espera per a començar a dinar es va fer etern, ja no recordava el que havia demanat, alhora això va propiciar la conversa i les conplicitats entre els companys de taula, l'asortit de colors i sabors dels plats que van anar aparaguen a escena tot i que tard, va fer que aquells moments formesin ara també part dels meus millors records, i només per això, ja valdrà la pena tornar-hi.

Para mí es un imprescindible pq hemos ido toda la vida
En plena naturaleza y muy buena comida.

Calidad precio muy correcto, todo rico y super tranquilo, la atención recibida ha sido muy buena, eramos 14 con niños y nos prepararon un espacio en el porche que tienen super bien, teníamos a los niños controlados y jugando.

Lugar emblematico, con santuario imitacion de Lourdes. Comida excelente, voy desde hace muchos años.

Es la segunda vez que voy a este lugar, es un sitio que lo han dejado igual como estaba en la época sobre los 80’s, está lleno alrededor de miniaturas de diferentes ayuntamientos y monumentos de Catalunya.

Servicio: Los camareros son de cierta edad atentos, cordiales y te preguntan en todo momento que tal todo, si entiendo te cómodo en todo momento.

Comida: No hay menú es servicio a al carta los precios no están mal por cabeza la paella sale a unos 14€, en esta ocasión hemos pedido fideuá para 3 y nos han traído una paella enorme de hecho yo soy de comer mucho y no hemos podido acabar con ella, el camarero amablemente nos ha puesto lo restante en un recipiente para llevárnosla.
Éramos 4 personas de entrantes hemos pedido croquetas, guisantes, bebida vino con gaseosa en esta ocasión dos gaseosas, postre uno por cabeza.
Conclusión:
Lo recomiendo por cantidad calidad, soy de los que prefiero pagar y comer bien que no quedarme con hambre, sumando todo conjuntamente algún café ha salido por unos 120€ 4 personas con todo lo mencionado, incluyo fotos para que las veáis.

Volvería.

Falta de mantenimiento de las mesas de fuera. Por este motivo la policía ha clausurado una parte.
La parte que no está clausurada, no nos han dejado quedar alegando que era 'por la pandemia'.
Hemos confirmado con los Mossos que podríamos pero que es propiedad privada y dependía del propietario.

Hoy hemos estado en este restaurante, todo correcto, mantiene la esencia de la época no es una estructura moderna pero la comida es deliciosa típica cocina catalana.
Tienen como miniaturas de varios lugares de Catalunya y esto lo hace que sea original y diferente.
El entorno hay mesas y barbacoas y un pequeño santuario que no hemos podido visitar por tema de la pandemia está todo cerrado.
La fideuá muy buena, las cantidades son generosas y todo muy bien cocinado.
Totalmente recomendable calidad precio.