St Marc Restaurant, Girona

Todo super bien tanto la comida como el sitio como el personal que fueron muy amables sin duda repetiremos, recomiendo 100%

Sempre està tot molt bó! I el servei és proper i excelent. Gràcies Carla i companyia. Ens veiem aviat!

Nuestra experiencia en el restaurante de Mas Marc fue francamente desastrosa y, básicamente, fue por la bajísima calidad del servicio. Fue surrealista y una vergüenza en relación a la metre. Teníamos una reserva, al llegar antes de la hora preguntamos si podíamos tomar algo (había otra mesa tomando algo) de muy malas maneras nos dijo que no y que que fueramos al Golf, sin ninguna razón, (suponemos que no tendría muchas ganas de trabajar, ya que como hemos descrito había otra mesa tomando algo) Dejar claro que sólo estaban tomando algo dos parejas con tres niños y una mesa dentro. Volvimos al cabo de 30 min aprox, los señores del sofa habían acabado de tomar algo y estaban sentados en su mesa. Preguntamos tomar algo nstrs allí, la respuesta -cito textualmente- fue "Hombre es que si te lo pongo en los sofas luego lo tengo que mover a la mesa", hacer hincapié en que mesa estaba literalmente a dos metros y medio de los sofás. Así, indicar que a nuestra mesa le daba el sol, era la única que le daba el sol, y solo habia ocupada otra, por esa razón preguntamos, muy educadamente como siempre (pero es que, además, ya nos había contestado de malas maneras y no teníamos ganas de otro chasco), si era posible movernos a otra mesa por lo obvio (menos una, todas estaban vacías). Nos dijo primero que no, pues debería mover dos servicios, repito dos servicios (plato, cuchillo, tenedor, copa y vaso), por nuestra parte preguntamos si estaban reservadas obviamente, y la metre nos dijo, tan tranquilamente, que no, que la razón era la dicha, tener que mover dos servicios. La comida es buena y el sitio espectacular, el precio ligeramente elevado. Hace tres años fuimos y fue una experiencia maravillosa, por eso repetimos. Pero está claro que no pensamos repetir. Insisto, es una pena, porque el sitio es de ensueño.

Restaurant Masia amb plats tradicionals i especialitats en carns, molt ben ambientat, espais amplis. Tracte familiar i entorn amb activitats pels petits com anar amb ponis, o visitar el corral.

Servei pèssim. Lents i poc professionals. L’entorn es maco i, abans, havíem menjat molt bé, pero ara ha canviat. No crec que hi torni.

Un mas espectacular. Molt ben cuidat, disseny preciós. Hem menjat molt be i el tracte súper correcte. A mes, hem pogut anar amb la nostra gosseta.

Llamamos para reservar, 7 personas, nos dan mesa 14,15h, pedimos si podía ser más tarde y nos dicen que no por la cocina. Es importante aclarar, sábado 10 de diciembre (de puente) en la Cerdanya.
Llegamos 14,10h, nos sirven primer plato a las 15,25h.
¡¡¡No tenían cerveza! No tenían magret de pato.
Pedimos bravas, carne y hamburguesas, todos los platos con patatas, le quedaban pocas y deciden en vez de avisar y pedir si queríamos un cambio, poner un plato ridículo de bravas y el acompañamiento de las carnes y hamburguesas 4 patatas contadas y te dicen además que es que no tienen más.
El camarero además nos echa en cara que la cocina lo tiene con “látigos” cuando hemos estado más de una hora esperando. Cuatro mesas, la mayoría ya comidas.
Comida normal, cantidades ridículas, 15€ de canelón ridículo y pequeño.
Salmón prácticamente sin guarnición cuando en la carta pone que en teoria era con verduras, y allí también nos dicen que es porque no tienen más.

Pedimos el postre y encima el camarero se hace el gracioso diciendo que no quedan, intentando hacer una broma que nos ha hecho muy poca gracia.

Este verano reservamos en grupo para ir a coment a este restaurante, nos llamaron para avisarnos de que el Cheff está enfermo, pero que de igual manera nos podran ofrecer unos entrantes variados y un plato a escoger entre 3 o 4, lo que nos pareció correcto y decidimos ir de igual forma.

Lo que pasó fue que esos entrantes, que nos esperabamos que fueran pues un surtido de precio cerrado, nos lo cobraron como de carta, además que nos trajeron una cantidad de entrantes desmedida (que nosotros no escogimos, los sacaron ellos directamente), más de 2 entrades por persona, habian bravas, surtidos de quesos con embutidos entre otros. Finalmente el precio por persona se fue a los 60€.

A todo esto comentar que la verdad que los platos estaban bastante bien de calidad y los encontramos ricos pero esto no quita que nos sintamos estafados.

Erem una taula de 8 adults i 8 nens. Menjar molt bo la veritat.
La terrassa és agradable, però poc preparada per rebre families. La gespa no la pots tocar perquè és privada pels jugadors de golf.
Cal dir que hem estat molt a gust i l'atenció rebuda de les dues dones adultes ha estat molt bona.
En canvi la cambrera jove, tenia molt poques ganes de treballar i molt antipàtica. No pots arribar a un restaurant i sentir que et renyen amb una frase com: "Siéntense Por favor". Impresentable. Una pena.

No soc del mateix Grup dels comentaris anteriors però hi estic totalment d’acord. Ens van fer creure que era un menu tancat, van portar el que els hi va donar la gana de primer (quantitat inclosa) i només 4 plats de segon a escollir. Eram un grup de 12 i van portar 18 primers. Resultat, més de 50€ per cap. A això cal afegir una quantitat descomunal de mosques i abelles. No repetirem ni ho recomanem.

Me ha encantado! El personal es super atento, y el lugar, precioso y perfecto para disfrutar en familia.las patatas bravas son un escándalo, muy recomendables!
Igual que el resto del hotel, se nota que todo esta muy cuidado y hecho con mucho gusto.

Horrible. Hem estat esperant mes de 30 mins per poder prendre quelcom. Les taules del costat servides, hem estat esperant que el cambrer atengues mooooolt amablament a uns clients de tota la vida (20 mins de conversa) Quan ens ha tocat a nosaltres ens ha dit que feia 10 mins que havien tancat.

Anavem amb dos nens petits i no erem clients de tota la vida, pero això es motiu per no atendre?

He intentat posar una reclamacio, no ha estat possible perque a recepció no me l’han volgut facilitar.

Si ets client de tota la vida, disfruta-ho. Si no.millor busca un lloc que et vulguin atendre.

Restaurante ubicado en una antigua masia, ahora transformada en hotel rural. Tienen espacio para comer al aire libre y también sala interior.
La calidad de la comida es muy buena, y el precio acorde a la calidad y al sitio, ubicado en medio del campo a las afueras de Puigcerdá.
Es ideal para ir con niños, ya que el entorno es precioso y además los niños tienen la posibilidad de montar en pony, correr y jugar al aire libre.
Casi obligatorio reservar porque el número de mesas es limitado.

Restaurante muy caro por la cantidad que ofrecen y servicio muy lento. Camareros con la mascarilla por debajo, inaceptable en estos tiempos.

Bon restaurant et bon service, les prix pratiqués sont dans la proportion haute de la zone et les plats sont bon.

Els canvis de gestió i direcció de cuina sempre obliguen a opinar amb bons peus. Manuela i la seva mare fan una bona cuina i ofereixen una atractiva carta. El lloc mereix una visita. L' atenció, un agraïment. Els caps de setmana, barbacoa. En plena Natura. Segur que prompte pujaré la puntuació.

Local amb encant, especialment a la terrassa. Carta amb bons plats i excel·lent presentació. A destacar el bacallà i la tarta tatin. Cambrers atents. Ambient molt tranquil i agradable. Guanyaria punts si disposés d'estovalles de roba i d'una carta amb més varietat de peix.

Tot el sopar ha estat espectacular, el servei molt atent i cordial i els plats unes delícies. L'espai es molt bonic i apte per a famílies amb nens petits.

El sitio es agradable y el servicio tambien, pero el precio del menu no se corresponde a lo que te dan!
excesivo

Maravilloso descubrimiento.escondite que se ha de buscar en Puigcerda.comida, atención y ambiente.repetiré sin duda