Vivari, Barcelona

Otra explotación de personal, un domingo por la tarde atendiendo sola una persona a 50 personas, la camarera estaba haciendo todo lo que podía de manera muy amable pero era muy obvio que estaba muy estresada por estar sola.
Se nota que la empresa no le interesa ofrecer buen servicio.

La encargada de la mañana es fantástica. Solo verme entrar ya me prepara mi café americano que tomo siempre.

El personal no habla inglés, algunos ni siquiera saben lo básico y es difícil comunicarse. El café se ve peor que en las fotos.

Hemos ido hoy por la mañana a coger unos bocadillos para llevar y nos lo han servido a desgana en el plato cayéndose todo el contenido del bocata fuera de este por la bandeja. Luego recalcando que era para llevar y nos lo han envuelto a desgana también y para sacarnos del paso, tirando el cambio a la barra. Cuando hemos abierto el bocata luego no tenía nada de pollo ni de tortilla respectivamente casi, precio excesivo. Pésima atención.

Desayuno. Bocadillo vegetal de atún y café con leche:
El bocadillo más seco que el desierto consiste en un matojo de verde, sobretodo rucula, sin nada más. Incomible.
Café con leche: agua caliente como en todos los Vivari.
Atención mala. Pregunto si puede ser más pequeño el bocadillo. La chica dice que no (mentira, hay más pequeños).
Resumen: cafetería vetada.

Poco amables, parece que te estan haciendo un favor. Por suerte no siempre es así, sinó les daría menos estrellas

¡Dependienta muy desagradable!
¡Cobran suplemento por pedir leche de avena! NO ME HABÍA PASADO JAMÁS y cuando le he hecho el comentario, de forma educada, por supuesto, la respuesta ha sido muy desagradable y desafortunada. No volveré. En el mismo barrio hay cafeterías con dependientas muy agradables y sin suplementos! Primera y última vez.

El ambiente super agradable, he bebido un chocolate caliente y en verdad está riquisimo, el servicio excelente. Ampliamente recomendado.

Ayer por la tarde fui al Vivari i me pedí un bocadillo de jamón serrano. Dentro del pan me encontré 3 trozos de vidrios, adjunto una fotografía para que lo veáis.
Es muy peligroso porque me lo podría haber comido.
No vengáis al vivari por vuestra seguridad.

Tienen las puertas abiertas pedi la leche caliente y la sirven fria no sabe ni los precios de los productos mas, seriedad señores.

Experiència negativa. Un desorden total por falta de personal. Las mesas sis recoger (los clientes tienen que recoger las bandejas de los anteriores para poder usar la mesa), ningún orden en las colas para ser atendido y respuestas incoherentes cuando te quejas por no ser atendido según el orden de llegada.
Vaya, para irse y no volver.

Es un sitio donde hace mucha calor, las mesas siempre están muy sucias, las chicas tienen pocas ganas de trabajar, excepto a unas dos que son majas y intentan hacer lo que pueden. Hay moscas donde están los bocatas. Ya he parado de ir por todo esto. Es una lástima, porque está al lado de casa, voy en el otro que está delante de la rotonda.

A veces el servicio es excelente y a veces no.
Los productos son buenos, los precios podrían ser mas economicos.
Las mesas y sillas con cómodas, la mayoría del tiempo esta limpio todo.

Me parece vergonzoso, que sea un sitio tan caro para lo que te ponen, que un mini bocata que no llega ni a la palma de la mano te cueste 2,10€ y te pongan media loncha de jamón y que un zumo de naranja cueste 3,80€. Vergonzoso que en los bocadillos parece que estes comiendo pan con pan, esta cafetería es VERGONZOSA!

Calidad precio igual que en todas sus franquicias, local acogedor y limpio, había una sola camarera atendiendo h el servicio era muy lento.

Pésimo servicio, a las 9 y 15 de la noche pedí donuts entre otros dulces, pregunte si tenían café y cuando me dice que ya no tienen, entendi porque yo también trabajo en hostelería y sé que es difícil cerrar, así que lo pedí para llevar y la chica de caja con lentes y muy poco amable hizo un gesto con su mano diciendo ahs! Y encima de todo cuando estábamos pagando, me dice y esto no se lo va a llevar! Con una cara que me dio ganas de irme y no volver jamás. Así que le respondí vamos a pagar separados te puedes esperar.
Mi conclusión es que yo soy ex trabajadora de vivari y conozco el movimiento, pero que a las 9 y 15 me vengan con una cara como si hubiera llegado a las 10 en punto para cerrar y encima no habiendo nadie en el local y claro para conversar si tenían tiempo y ademas sigo trabajando en hosteleria, jamás he atendido sin una sonrisa al cliente hasta por respeto porque podría ser su propio familiar o ellos mismos en su dia libre. Jamás volveré a entrar si veo a esa chica en en local y una pena la verdad.

Tuve una mala experiencia. Entré para tomarme un café
Después de llevar más de 5minutos en la cola esperando el turno para ser atendida, éramos 3personas en la cola
La Srta.era una chica joven. Atiende a la cuarta persona que acaba de entrar que pase delante de las tres que llevábamos esperando. Vi racismo puro y duro por parte de la que atendía. Creo que esa clase de trabajadores No pueden estar atendiendo ante un público.

Sencillo pero acogedor. Por las tardes de 4 a 8 difícil encontrar mesa.
Panadería, dulces y bocadillos.

El precio y la comida está bastante bien. El personal no es del todo amable y las mesas estaban sucias. Con esto del covid, que menos que limpiarlas cuando vienen clientes que te están pidiendo. Hay que mejorar la atención al cliente.

Mala educadas, cambian de personal cada a semana deberían ir un a inspección de trabajo, no tienen ni idea de camareras, 10 minutos para hacer 1 café, cobran lo que quieren.
A una señora mayor 7,50 por una caña y un café y le dicen q es lo que cuesta.
Las mesas sucias baños sucios, un verdadero desastre.
Se te cae el café y no tienen ni la delicadeza de hacerte otro e invitarte y x encima te lo cobran.
Malas caras no verás reír a ninguna. Bastantes vagas e inútiles es el personal de este establecimiento. Ya hay gente que dejó de Ir. Espero cierren pronto, ni idea de llevar un negocio.