Xocolates Pirineus, Girona

El expositor de pasteles nos impacto desde fuera y nos dirigimos a entrar, una vez dentro nos atendió amablemente un camarero novato que sin tener culpa de nada se equivoco al decirnos que el gofre era casero, nos sirvieron unos gofres fríos y de compra, al decírselo al camarero no tuvo ningún problema al disculparse en cambiárnoslo por un crepe que si que era casero y muy bueno, no como el gofre. El café con leche bastante normal y ardiente como el fuego.
Le pongo dos estrellas por el engaño del gofre y lo frio que estaba.

El chocolate que probamos estaba muy bueno, pero cogimos un día que estaba muy lleno y faltaba personal.

Trato espectacular. Variedad de productos. Cafés buenísimos y todo tipo de xocolates y pasteles.

Val molt la pena. El local és prou gran i acollidor. El personal és molt amable. La xocolata desfeta esta brutal i tenen un assortit molt variat de reposteria amb una pinta increïble. Nosaltres vam tastar una Magdalena amb poma que estava d'escàndol i unes cookies de coco amb xips de xocolata també molt bones.

Sitio acogedor y rico, aunque sirvieron los gofres fríos. Aún así, goza de variedad y precios dentro de lo que se espera.

La xocolata, els pastissets i els bombons molt bons. Falta personal, les noies fan el que poden però milloraria molt i l'ambient seria perfecte.

Antes el servicio era mejor, está empeorando cada vez más. Es una lástima porque era ideal para darte un dulce capricho. Tienen pasteles, crepes, chocolates y en verano helados. Por las tardes suele estar muy lleno y hay que esperar para coger sitio. Peor servicio pero todavía buenos productos.

Me encanta. Está todo buenísimo y ek servicio es atento y esmerado. Vale la pena probarlo: desayunos, meriendas.a cualquier hora vale la pena visitar este lugar. Recomendable 100%

Bastante bien. Nos recordó las chocolaterias de San carlos de Bariloche. Si no hubiese sido por el "famoso" urinario (que tambien consideramos que no pega en este local) habria tenido un punto mas.

No massa bona experiència. No crec que torni. 1. Com tardaven tant vam haver de netejar nosaltres la taula. 2. Dissabte a les 18 de la tarda no els hi quedaven melindros (sent una xocolateria). 3. A la meva amiga celíaca i intolerant a la lactosa li van dir que la xocolata era 100% xocolata i que com a molt hi posaven aigua, però li va acabar sentant malament la xocolata. 4. A l'hora de pagar es van equivocar introduïnt els productes al sistema i em volien fer pagar 1€ més. Moferien un vale de un euro o una magdalena (?). No ho vaig trobar massa professional.
5. Finalment, tot i tenir el nom del local en català, no el saben parlar.

És un lloc acollidor i la veritat és que tot el que hi pots menjar o beure és d'allò més bo. L'únic inconvenient són els preus, exagerats al meu parer i no es poden veure ni a la carta ni a l'aparador. Aquest fet em molesta una mica perquè quan passes per caixa se't passa la bona sensació que has tingut a dins

Gelats deliciosos, bon cafè, el personal sempre atent i molt agradable, neteja de 10, tenen productes sense gluten per encàrrec. Del millor de Puigcerdà.

Los helados son muy buenos. La pena, es que año tras año son siempre los mismos. No me refiero a que innoven ni nada parecido, pero, por ejemplo, tener helado de chocolate blanco, o chocolate con naranja, sería de lo más lógico. Si fueran alternando, estaría mejor. Pero, repito, que los helados están muy ricos.

Ha perdut qualitat. És un lloc on vinc cada vegada que estic a Puigcerdà però avui la xocolata desfeta estava agre.

Si estás leyendo esto antes de entrar: sal corriendo y no mires atrás.

Detrás del ambiente bonito se esconde un negocio descontrolado:
- Se olvidan de lo que piden los clientes.
- Traen lo que no es o te cambian ingredientes sin avisar porque no les quedaba X cosa y deciden por ti.
- Se van paseando por el salón en búsqueda de una mirada cómplice o van preguntando uno a uno si es para ellos (siendo posible que se te adelante el que ha pedido una crepe media hora más tarde que tú).
- Tampoco se saben los números de las meses pese a que lo tienen indicado en la esquina.
- Mesas sin recoger y sucias cuando el personal eran 4 o 5 personas y éramos apenas 10 clientes.

Para colmo la comida y los tés industriales de los malos, pero ya te lo esperas después de esperar 45 minutos viendo tal espectáculo. 45 minutos para que te hagan unos tés, una crepe y corten un trozo de tarta.

A destacar que nos tuvieron que tomar nota tres veces porque el camarero perdió la comanda y luego su compañera no se fiaba de la segunda nota. Además, al parecer se les pasó indicarnos las tres veces que lo que pedimos no entraba en la oferta promocionada. ¿Timada? Mejor ya dejarlo pasar.

Establiment del centre de Puigcerdà amb un gran ambient i ritme frenètic a hores puntes. L'ambientació de l'establiment és molt acollidora, tota rústica i treballada amb fusta. Els berenars que serveixen son molt bons i variats, amb diferents ocions de pastissos i altres dolços tots molt ben exposats a l'establiement. El punt més fluix va ser el tracte rebut, que sense ser gens dolent, podria ser més atent i simpàtic; mentre que el punt més fort és la relació qualitat-preu i la qualitat dels dolços, gairebé impecable. Es recomana!

Un lugar con encanto a la patagonia Argentina, un pedacito de Bariloche en la Cerdanya. Justo en la rotonda y el solcito de la tarde entrando por la ventana en invierno, sentarse a tomar un colacao caliente, alfajores de maizena, cañoncitos y tarta mil hojas, dulce de leche por doquier. Fue justo lo que necesitábamos! Riquísimo todo

El que parece un clásico de puigcerda. Fuimos un día a calentarnos con un chocolate caliente tras una jornada en la nieve. No tenían melindros así que lo acompañamos con otro producto de boyería que debía tener ya un par de días pues estaba seco y duro. Tienen gran variedad de bebidas y dulces. Tienen gran variedad de dulces, pasteles etc que tenían muy buena pinta pero no tuvimos ocasión de probar. Volvimls un segundo día y pedimos crepes saladas, en general buenas, tampoco exquisitas. Las dos veces que fuimos
el local se llenó extremadamente rápido. Los horarios podrían ser más amplios y la atención al cliente es bastante mejorable. En general un buen sitio para merendar si no se tienen grandes expectativas.

Lugar perfecto para descansar o calentarse, el lugar es muy acogedor, y el chico que está de camarero es súper agradable y simpático.

Bonito local, acogedor y lleno de gente. Es un punto de referencia en la zona, aparentemente famoso por la gran afluencia de gente e incluso con momentos de espera para tener mesa disponible.
Lamentablemente me decepcionó el producto. El chocolate caliente, la especialidad de la casa, no me gustó, no nos gustó vaya, éramos 5. Puede que sea cuestión de gustos, no lo sé, pero no nos gustó. Muy amargo y poco cremoso. Para acompañar unos melindros secos e insípidos. Bollería de muy buena pinta en el expositor, que decepciona en la mesa.
Quizás no fue el día o nuestro gusto, ya que me esperaba más habiéndolo visto, en varias ocasiones y a diferentes horas, casi siempre lleno el local.