100 Montaditos, Madrid

Paramos mi marido y yo a las 15: 00 a picar algo, estaban dos parejas esperando y nadie en barra, miro en cocina dos chicas con una presencia que deja mucho que desear por higiene y un chico fuera sentado con cazadora y movil que resulta ser el camarero (perdonaaaaa 6 personas esperando y el con el movil). Pedimos 2 de jamon reserva (aceptable) y 2 de tortilla de patata que estaba congelada la cual pedí que me calentaran. Mesas sin recoger. No lo recomiendo con ese mal servicio.

Patatas "fritas" y bocadillos salidos de la nevera, ni siquiera se han molestado en calentarlos. El bacon estaba frío y mojado, la cebolla caramelizada igual, el queso del bocadillo inexistente. Un desastre, sin duda no volveremos a ir. No malgastes tu dinero y ve a otro sitio.

Este local va a peor. Una lástima con la afluencia de gente que tiene. Esperas eternas tras hacer el pedido y pagar. Comida recalentado 20 veces. Comida también sin acabar de descongelar.una pena

Pedimos unos desayunos los panes los 2 de arriba o los 2 de abajo, además es el único sitio donde te cobran 8 céntimos por el plástico según Ley, ya no voy más.

Una experiencia decepcionante sin Paulaner y con servicio lento.

En mi reciente visita a este establecimiento, lamentablemente, la experiencia estuvo marcada por la ausencia de la cerveza Paulaner y la lentitud en el servicio. Como aficionado de las cervezas de calidad, estaba deseando disfrutar de una buena Paulaner, pero para mi sorpresa y decepción, no estaba disponible en el local. La ausencia de esta marca conocida dejó un vacío en la selección de cervezas, especialmente para aquellos que apreciamos los sabores auténticos y la tradición cervecera.

Además, el servicio en el lugar fue notablemente lento. A pesar de que el lugar no estaba abarrotado, los camareros parecían desbordados y no lograban atender a los clientes de manera eficiente. Tuve que esperar considerablemente para hacer mi pedido y, posteriormente, para recibirlo. Esta lentitud en el servicio afectó negativamente la experiencia general, ya que la espera prolongada disminuyó el disfrute de la comida y la compañía.

Espero que en el futuro, el establecimiento tome medidas para mejorar tanto la variedad de su selección de cervezas como la eficiencia en el servicio. Estos aspectos son fundamentales para garantizar que los clientes tengan una experiencia agradable y satisfactoria. En resumen, mi visita se vio empañada por la ausencia de Paulaner y la lentitud en el servicio, lo que me hace dudar en regresar en el futuro.

El camarero muy amable. Me puso un tinto de verano por error de tamaño grande y no quiso cobrarme el precio que era aún yo insistiendo. Las tapas sin más.

Fatal experiencia hoy Domingo dia de la oferta Euromania, con el local la mitad d las mesas ocupadas, no lleno, a las 14: 45 una hora normal d comer los empleados te dicen cuando vas a pedir que hay mas d media hora de espera para la comida, nos emos tenido que ir sin pedir, si le sumamos que la oferta del Euro ya no entran la mitad de las cosas ni la bebida pues no merece la pena ir esos días ya, y menos a este local, deberían tener mas personal esos días.

El sitio está bien pero el franquiciado no lo tiene bien gestionado, falta personal para la afluencia de gente que tienen.

Mala atencion no me daban tenedor para comer mis patatas frias por no dar no me querian dar ni serbilletas no volvere

Para los que no conozcan la franquicia.lugar de tapeo, cerveceo y reunión de amigos. Buenas ofertas en días y momentos, pero lo ponen en su web.

Las tapas son baratas pero no valen mucho y además salen a destiempo. Pides y tienes que levantarte a buscar cada tapa en ved de salir todas juntas.

La camarera de la barra (Kashindra) está continuamente con el móvil, habiendo cola y pidiendo que nos atendiera y con la calma. No prestaba atención a los platos que tenía en la barra, y se quedaban fríos esperando que llamase a la gente. Todo el rato con el móvil. Mala atención, mala trabajadora y la comida fría por no prestar atención a lo que hace.

Espacio amplio y separación entre mesas, buena atención son muy amables con musiquita de fondo, mi lugar preferido para desayunar, constantemente salen a limpiar las mesas y bancos, recomendable

Para que una cerveza sepa bien hay que saber tirarla y no fue así, simplemente dejaron puesto el vaso sin sujetarlo y esperaron que se llenara dejándola sin espuma y dandonos el vaso acto seguido. No repetiremos.

Bastante lento. Es respetable que tengan una política de mínimo personal, pero qué menos que dos personas en barra "despachando" para no estar 20 minutos en la cola. Además la cerveza parece que se ha ido adulterando con el tiempo y sabe entre aguada y sin fuerza.

Cuando levantas el pan y ves la falta de relleno me siento como si me engañarán, prácticamente solo pagas pan.

Montaditos semi congelados igual que las patatas, servicio triste y poco amable de la muchacha que reparte la comida, de los cocineros sin comentarios.

No no se ha gustado el trato recibido, después de estar más de 10" en la cola, al llegar y pedir un desayuno con tostada y Janos, nos dicen k se ha pasado de la hora. Perdona, pero yo estaba esperando mi turno. Al final nos lo ha servido

Bueno recién aterrizado en el. Puedo decir que me gusta bastante. La habitación es muy acogedora. Una cama muy grande y confortable. Cómoda etc. Un armario grande y completo. Y un cuarto de baño perfecto, con un buen lavabo un aseo y una ducha espectacular. Por lo que a la habitación se refiere de 10. La atención en la recepción muy buena por lo que no puedo más que decir que es un muy buen hotel.

Desmejoro sustancialmente, antes, hace 5 años era un lugar súper agradable, los montaditos no eran tan costosos, había una carta de con una cantidad de montaditos que aparecían mucho
Hoy el panecito es la mitad y el contenido apenas para saber que tiene alguito de eso
Lamentablemente desmejoró al 80 % de lo que antes ofrecia