101 vinos, Madrid

Un sitio encantador, buenos vinos y tostas exquisitas. Los aperitivos son buenísimos también. Recomendable 100%

La verdad, la fachada es muy bonita y te da expectativas muy altas para lo que realmente es la comida como tal. Bueno, en realidad probé desayunar y me pareció que puede ser mejor.

He vuelto hoy con mis amigos y si pudiera, sumaría una estrella más. El camarero ha atendido genial, no nos ha faltado de nada, majísimo. Da gusto poder estar en un sitio así, charlando, tapeando bien, y sin echar en falta nada.

Un sitio muy agradable para tomar algo, con buenos productos y muy acogedor. Servicio excelente.

Unas tapas muy ricas y asequibles, además de una terraza en una zona inmejorable en el Distrito de Barajas. Recomiendo la tabla de quesos asturianos y las empanadas caseras de pollo.

Hemos caído en la terraza de este sitio un pico de rebote, porque estábamos intentando comer en otro restaurante, pero nos ha sorprendido gratamente. Tienen buena variedad de vinos y la comida no está nada mal. Buenos precios.

Sitio recogido pero muy agradable para tomar un vino y una tostas o probar algunos tipos de queso está muy bien.

UN POQUILLO RANCIOS EN SERVICIO Y TRATO, PERO TB ES VERDAD Q ES EL MÁS BARATO, Y LA CALIDAD NO ES MALA

Muy bien ya que nos atendieron a pesar de ir bastante tarde. Pedimos 4 empanadillas, 4 tostas de jamón serrano con tomate y 4 refrescos, Todo correcto. La cuenta fue de 48 euros, ni caro ni barato. Espacio para tapeo.

Muy buen sitio para unas cañas. Ponen buenas tapas. También tienen tostas muy ricas a buen precio. Lo recomiendo.

Lugar para tomar tapas, pero son prefabricadas. No hay originalidad en la carta. Tampoco hay buenos vinos. No destaca por nada. Correcto solo.

Me pusieron una "tapa" de jamón con pipas de tomate resecas, lo que me hace pensar que ese jamón tuvo una vida previa en otro plato, en otra mesa. Solo se me viene una palabra a la cabeza ASCOOOO! Mejor no me pongas tapa, gracias! Eso sí, la caña la cobraron igualmente a 2'50€.

Todas muy corrientes, y precios altos, dos tapas pulpo y chupetones, tonta de jamón y tomate, 2 cervezas y agua mineral, 38 euros, creo que algo caro

Sitio interesante, local agradable, buena carta de vinos y la oferta para comer aceptable, un poco cara.

Calidad pésima camarero desagradable la chica borde además es la amante. Cuando toméis café llevar dinero suelto porque no tiene cambio. Tenéis un poco más adelante el Nerea o antes de llegar el bar Madrid merecen más la pena que el 101 vino.

No se corresponde la calidad con el precio. Una vinagreta demasiado fuerte en ensalada y una tosta muy mejorable, "de Cabrales y lomo", el lomo había que buscarlo con lupa y el queso que de cabrales tenía poco. No repetiré, eso está claro, tampoco lo recomiendo!

Las raciones no son nada del otro mundo y son pelín caras. La carta de vinos por otra parte no está mal. Se puede pasar a tomarse un vinito

Excelente atención. Cordial y dedicada. Deliciosas las tostas y empanadas. Muy recomendable. Quizás algo caro.

Lugar cerca de la zona de hoteles del aeropuerto Barajas. Buenas tapas de picar o comer. Hay muchos restaurantes en la zona que puede uno escoger.

Buf.para los que hemos trabajado o trabajamos en hostelaria... En fin! Bueno, tambien los clientes medianamente exigentes.no comprendo como alguien puede decir que este sitio es excelente. Sinceramente, un sitio donde sirven congelados, cortan el jamon a maquina, los ingredientes de las tostas son de bajisima calidad.yo no puedo considerarlo excelente. La camarera (Mamen) ya es un caso aparte. Nivel extra de mala leche y falta de educacion. No os equivoqueis, no es la dueña de nada. Es la AMANTE del jefe (lo pregona ella a voz en grito a los clientes que le hacen un poco de caso, porque habla con las piedras la tia). Las tres veces que he ido la he escuchado decirlo. Aĺli entendi que era por eso que se permite hacer las cosas que hace: habla mal de quien le da la gana, se sienta en la mesa con los clientes (yo que trabajo en hosteleria en sitios de alto standing en Madrid, he alucinado cuando lo he visto.encima un dia, contaba a pleno pulmon a una chica que estaba alli aguantando el chaparron como podia la pobre, lo mucho que sabia ella de hostelaria y yo pensando para mi.madre mia que flipada!). En fin! Que la mujer es realmente repelente. Creedme, no es un sitio para cenar/comer (no tienen cosas extraordinarias porque no tienen cocina propia, solo pueden servir cosas frias o metidas al microondas). Es un sitio para ir a tomar el vermut o el vino, un sabado al volver del mercadillo de comprar la verdura de las semana. Quieren dar a entender que son hosteleros de la vieja escuela, pero es una camisa que les queda.no grande, lo siguiente!