Asador El Molino, Madrid

Muy rico todo, lo que más me llamó la atención sus boquerones en vinagre. Nunca los había comido así.

El cochinillo estaba ufffff increíble

Y el pan, si sois tragapanes, las hogazas de pan no podréis parar de pedir más y mas

Fuimos al Asador el Molino por recomendación de unos amigos y sin duda, no nos decepcionó.
La calidad de los productos es altísima, con unos precios razonables, pudimos comer en la terraza en un ambiente muy tranquilo y el personal nos trató de forma excepcional.
Repetiremos SEGURO

Que te cobren por medio pan que te traen sin pedir y que después te cobren 7 euros por él, porque te dicen que es por el servicio que te prestan, como que no se hace así.
Mejor me digan que te van a cobrar ese dinero por atenderte y así me pienso si quedarme o ir a otro lugar.

Volví al restaurante tres años después de conocerlo y quedé decepcionado por el bajón que ha dado. El personal le pone empeño, pero el asado salió tarde. No se puede estar esperando media hora entre los entrantes y el plato principal. Por mucho que digan que es para que la carne esté crujiente y recién hecha, la espera revela mala planificación en la cocina. Además, la carne no era nada especial. Así no merece la pena pagar esos precios

Una esperiencia inolvidable, buen sercio, buenos camarero@s, buen precio y calidad, lo recomiendo, venimos de Cádiz y seguro que volveremos, con más personas

Hemos celebrado una comunion con unos 40 invitados y ha estado genial, bien atendidos, en un sitio acogedor, personal simpático y educado, y con la comida acorde a la fama del restaurante. Muy contentos, buen trabajo de Diana y su gente.

He leido su respuesta, y les voy a responder a su detalle. Honestamente que el agua sea filtrada, ponedlo en la carta y no cobréis por ella, que no hay trina, contradice lo que nos comentasteis en directo del problema de los pedidos, y lo de los cochinillos, me llama la atención de un restaurante de vuestra categoría, que nunca antes no había pasado. Y por último lo de la falta de personal: ese comentario me lo pude decir una restaurante que me cobre un 80% menos pero no me lo esperaba de El Molino. Veo que el Cliente son ustedes y no nosotros. Un saludo

Maravilloso, celebramos la comunión de mi hija, anteriormente habíamos celebrado el cumpleaños de mi abuela e ido alguna vez a comer y de verdad… de 10! Comida genial, el salón perfecto, la zona de jardín para que los niños disfruten y los mayores tb, muchas gracias!

Estuvimos hace 15 días y la experiencia mal nooo lo siguiente. Calidad precio fatal. Servicio mal. Tiempo de plato a plato más de media hora. Pedí chuletas de cordero qué se lo que hablo. 5 palos con cuatro patatas malísimas no sabía que eran.fatal y muy y todo muy caro para lo que fue. En fin.no voy a seguir porq una pena. Salgo mucho con mi pareja a restaurantes y no he visto una cosa igual.

Muy mala calidad/precio, aparenta mucho más de lo que es, en concreto pedimos 2 chorizos, jamás hemos probado unos con tanto tropezón de grasa dura hasta el punto de que nos dejamos uno. La comida no es mala pero te vas a la sensación de que te han robado, una comida de 70 euros allí te la cobran a 120, no volveremos.

Desde hace muchos años os visitamos mínimo una vea al años y ayer día 25 fue todo de mal en peor desde el servicio hasta los asados

Nos ha encantado. Un lugar muy acogedor con diferentes estancias para elegir.

Me ha gustado mucho la sala de los toros, hemos pedido lomo alto, cochinillo, pimientos, pan de la casa y una ensalada de ventresca.

Todo muy rico en especial el cochinillo. No hace falta llegar a Segovia ahí lo encontrarán espectacular

Asador venido a menos. Han reducido bastante la carta en comparación con años anteriores. A pesar de estar prácticamente solos el servicio no fue muy bueno, tampoco un desastre, pero un poco caótico y en algunos camareros se mostró la desgana o falta de profesionalidad. Eso sí los precios en vez de reducirse se ha aumentado bastante. El lomo alto, aunque bueno de sabor, estaba muy duro, parecía cuero. Pero el despropósito ha sido con los postres y los cafés. Hacía mucho que no venía, ahora sé que pasará mucho más.

Suelo ir un par de veces al año, creo que el sitio está en franca decadencia y la calidad ha bajado -intuyo que efectos del covid en la hosteleria-, los camareros excesivamente pendientes de facturar, el lechal más tirando a recental, el tamaño de las costillas lo delataba. De sabor no me convencio el cordero demasiado seco y aceitoso.la sopa de cocido insípida.tardaron una eternidad, un detalle pido un vaso de agua y me traen (abierta) una botella de agua que evidentemente me cobraron. El comedor con el fuego muy agradable.

Es un restaurante que llevo visitando más de 20 años, y os puedo asegurar que no vuelvo, la comida muy mal, el servicio regular y la selección de vinos.una pena con la bodega que tenían. Han decaído hasta el punto de no volver, hoy éramos 7 comensales que hemos celebrado hasta comuniones en la carpa. Pero hoy la decepción ha sido unánime. ADIOS I

Después de 15 años que no iba por circunstancias, hemos vuelto y tan estupendo cómo siempre. Trato correcto, sobre todo de la persona que está en el parking que es encantador.

Todo muy rico menos el pulpo que estaba duro. Mi hijo se comió un chuleton de lomo alto que dice que fue el mejor de su vida. Tienen un montón de espacio fuera para niños, buen sitio para estar en veranito en la terraza.

Nada recomendable. Nos ubicaron en un salón en el que éramos un total de 30 comensales entre varias mesas, con únicamente 1 camarero atendiendo a todos. Servicio lento, tras 2 horas desde que nos sentamos llegó el plato principal: lechazo y cochinillo asado: secos, poco y mal hechos, la carne era imposible despegarla del hueso. Precios desorbitados teniendo en cuenta el deficiente servicio y la mala calidad de la comida.

Bastante caro, para lo que comes. En vinos un desastre, la mayoría no los tienen y te dicen que están pendientes de entrega