Barbara 22, Madrid

Hemos organizo una cena de ochenta personas y tanto la calidad de la comida como el servicio y la organización súper detallista. Opciones para vegetarianos de todo. Un 10/10

Teníamos una reserva para más de 40 personas para una cena de empresa con un menú cerrado. Nos encontramos con la sorpresa de que “No hay sillas para todos porque no habéis dicho en la reserva que es sentados”, queriéndonos vender que estaba planeado tipo cóctel (con platos de carne, pescado…)
No nos ofrecen ninguna solución, tuvimos que montar nosotros mismos las mesas e ir cogiendo asientos viendo la nula eficacia del personal para resolver el problema. No teníamos opción al ser tantas personas, sino nos hubiéramos marchado porque era lamentable.
Además muy escasa comida para el grupo que éramos, no llegaba para todos… Muchísimo descontrol y desorganización.

Doy tres estrellas por la empleada que supo resolver como pudo los errores del resto del personal, porque la cena fue para olvidar, no volver y menos recomendar. A pesar de ser una cena con reserva, muchos de los platos de la carta no los tenían, algo tan sencillo como una pizza o una hamburguesa no pudimos pedir. Nos tuvimos que conformar con unas bravas y poco màs.
Para finalizar, en la factura nos incluyeron raciones que ni pedimos ni.nos sirvieron. Cuando me cuenten que ha mejorado puede que vuelva.

HORRIBLE la experiencia en este sitio. Teníamos una reserva para una cena de empresa de unas 40 personas. Cuando llegamos nos dicen que tenemos que cenar de pie, porque según ellos, deberíamos haber especificado que queríamos cenar cenar sentados. Jamás me ha pasado nada igual, de hecho, debería ser el restaurante el que avise al cliente, que la cena va a ser de pie. Una cena no de tipo cocktail, sino con platos de cuchillo y tenedor, ya me dirás cómo lo hacíamos. Supongo que comer un chuletón a mordiscos era su idea.
El encargado no nos ofrecía ninguna solución, salvo cenar de pie, o supongo que sentados en el suelo.
Finalmente nos tuvimos que buscar la vida, coger sillas de la terraza, de dentro del local, y alguna mesa que sobraba y montarnos como pudimos la cena sentados.
La comida muy escasa, y llegaba fría porque no había camareros suficientes, los cuales trabajaron sin parar.
Los postres ni los vimos.
Lo ideal hubiera sido irnos a otro sitio, pero encontrar a las 22h un restaurante con capacidad para 40 personas era imposible.
El único detalle por su parte fue un descuento en el importe.
Una experiencia para olvidar y un sitio nada recomendable.

Pocos sitios como este la verdad, personal profesional y ambiente muy agradable, un sitio magnífico.
Muy recomendable para comer, tomar un café o tomarse una copa con familia o amigos.

Fui por una fiesta de cumpleaños. Eramos unas 30 personas, y el servicio y la comida fueron muy buenos. Sitio agradable, música no muy alta y muy bien comunicado cerca de Pl.de Castilla. Repetiremos para reuniones de grupo.

Celebré mi cumpleaños allí y fue todo un acierto! La comida estaba buenísima, sobre todo la ensaladilla y el cachopo. La tarta casera de chocolate espectacular! Éramos 32 y estuvimos perfectamente atendidos, no nos faltó de nada. Lo recomiendo y si es para celebraciones aún más.

Nuevos dueños de una cervecería de toda la vida.
Hemos vuelto a tomar una cerveza y, quizás tenían mucho trabajo, pero no nos han tratado con ninguna simpatía.

19 cervezas y de tapa una ensaladilla y unos quicos secos. Y encima nos quiere cobrar 2,90 de propina. Un sitio feo

Tienen unas patatas bravas espectaculares, nada que ver con las típicas de otros sitios. Estas sorprenden por su aspecto y están buenísimas!

El personal es siempre súper amable y son todos muy majos! El restaurante tiene sus detallitos, la terraza es muy bonita. Somos muy fans de las patatas pero el resto de la comida también genial. La carne muy buena ^^

Últimamente no paramos pero tenemos muchas ganas de volver!

Restaurante con terraza muy acogedor famoso en desayunos por los churros caseros y la tortilla de patata con o sin cebolla. Nosotros probamos el desayuno salado (tortilla con cebolla) y la verdad es que no nos defraudó en absoluto, espectacular! La terraza es bastante amplia y acogedora, con estufas para estos meses de invierno y el interior muy cuco. Productos caseros de gran calidad que se aprecian en el resultado final. El local y los aseos muy limpios y la atención y servicio muy buena. Para aparcar es zona verde o azul y hay un aparcamiento en la puerta. Gran variedad de desayunos y dispone también de menú de mediodía con amplías opciones y buenos precios en relación a la calidad. Muy recomendable y desde luego para volver!

Muy buen menú del día. El precio (unos 18 euros) es muy razonable teniendo en cuenta la calidad de la comida y el ambiente, muy agradable. Totalmente recomendable.

Me ha encantado el ambiente y la atención, Diego y Carmen son un amor, en realidad todo el personal, para tomarse algo de tranquis está muy bien, la ensaladilla está de muerte! Y el bizcocho de naranja, muy esponjoso, está muy rico. Seguro que repetiré!

Cuidado! No confundir con Casa Sotelo. Aquí tienen unas de las peores bravas que me he tomado.
Paramos para una cerveza+bravas y por error pensamos que estábamos en Casa Sotelo (bar de al lado) pero una vez allí ya, obviamente nos las tomamos:
1. Servicio horroroso. La camarera nos puso un tercio en vez de un doble porque según ella, no sabía cambiar el barril. Tono rudo.
2. Bravas horrorosas (planas, sin freír del todo, como hechas a la freidora de aire y con salsa de bote). Ni nos las acabamos.

Para no volver

Sitio genial, sobre todo por la atención de Ezequiel. Recomendable para tomar y picar algo.

He ido por qué la vez que estuve, poco más de un mes, el trato exquisito.
Hoy nos estaban haciendo un favor por servirnos. Éramos 15 personas. Una lastima, no volveremos

Excelente servicio en barra. Gran oferta de licores, bien servidos. Estupenda camarera. Nos atendió la tarde del 31/3/23.