Café de La Iberia, Chinchón

Es un Rte.caro; pero hay otros tan caros o más que éste, y sales, te vas, con una sensación tan agradable que no te importaría repetir porque has comido muy bien. Pues del Café de La Iberia nos fuimos sin intención de volver: mal atendidos, y no nos gustaron ni los chipirones encebollados, ni el asado de Cordero, ni la Tarta de chocolate.

Es la cuarta vez que vamos. La primera vez fue en su terraza de la plaza de Chinchon, la segunda en la terraza que tienen detras, subiendo hacia la iglesia de la Asuncion y ya la tercera y la cuarta en el patio interior que tienen en la primera planta. La atencion es siempre espectacular y que decir de la comida. Lo mejor de Chinchon está en el cafe de la Iberia. Pedir las anchoas y el cordero. De postre el sorbete de limon siempre es un acierto

No habíamos vuelto desde antes de la pandemia. Y nos hemos encontrado la misma calidad de producto de siempre, la misma atención sublime de sus camareros. Lucena nos ha hecho sentir esa vuelta a casa a darte un homenaje. El cordero de 10.
Y esa tarta de queso que no encuentras en otro sitio. La torrija espectacular. Pedimos si podían cerrarnos el balcón porque mi marido es enfermo oncólogico y corría aire y no pusieron problema ninguno. Gracias.
Volveremos muy pronto.

Excelente lugar para comer en la Plaza Mayor de Chinchón. Fuimos en Semana Santa, y tenían dos horarios de comida a la hora de reservar, 13: 30h y 15: 30h. Al ser dos, nos dieron la posibilidad de que la reserva fuera en el balcón viendo a la plaza. De las mejores vistas que se pueden tener comiendo.
Especializado en cordero y carnes, todo lo que pedimos estaba óptimo. Buena atención del personal.

Sin haber llegado a comer, solo a tomar unas cervezas, pero pude echar un vistazo al restaurante. Muy cuidado y acogedor, con patio interior. Mesas en terraza en la Plaza Mayor y también por la parte de atrás en la plaza de Galaz
Muy bien atendido, destacar la calidad de sus pinchos

Hemos comido cordero, cochinillo y chuletillas de cordero, todo excelente y la atención inmejorable. El lugar es muy bonito y tiene una terraza y un patio espectacular. En cuanto a los postres el arroz con leche y la tarta de queso se pueden mejorar.

Menú de 18€ sin bebida que NO sirven en terraza, aunque haya mucho hueco. Una pena no haberlo podido probar. En respuesta al propietario: si el personal nos hubiera informado sobre su maravilloso patio no lo habíamos dudado. Decir que una reseña respetuosa es caprichosa dice mucho de su gestión. Es una falta de respeto.

Personal muy amable, sitio tranquilo y bonito. Nos sentamos en el balcón con vistas a la Plaza Mayor.

La comida de 10. Todo muy bueno.
Para comer en este restaurante hay que reservar con algo de antelación ya que la zona suele estar concurrida.

La tarta de queso es imprescindible pedirla. Me arriesgaría a decir que es la mejor que he probado.

Un sitio espectcular, estuvimos en la, zona del Patio, nos atendió Mario el Jovencito y de verdad, un trato de DIEZ, profesionalidad, amabilidad y rapidez excepcional.
Volveremos sin duda y recomendable 100%

Riquísimo! Recomiendo reservar con tiempo. Merece mucho la pena. Para familias, parejas o amigos. Nos han atendido excelente a pesar de ser un fin de semana con mucho ajetreo por el mercadillo. Muchas gracias!

Es la segunda vez que acudimos a este restaurante, aunque nos pilla bastante alejado recordaba un cordero exquisito y volvimos para la celebración de un cumpleaños.

Nos pusieron chistorra y morcilla para picar con las bebidas, la chistorra estaba buenísima, la morcilla también buena pero soy más de cebolla que de arroz.

De entrantes pedimos media de jamón, súper bueno, media de croquetas, buenas y cremosas, quizá le faltaban un puntito de sal. Una de almejas y otra de mollejas.

De principales habíamos encargado un cuarto de cordero y también pedimos un solomillo. El solomillo estaba muy bueno, con salsa a la pimienta muy muy suave. Aunque estaba como quemado por una zona y por la otra no. Nos gustó bastante a pesar de esto.

Finalmente el cordero nos lo trajeron para enseñárnoslo y se lo llevaron para trinchar (lo suyo es que lo hagan en la mesa pero tardaron bastante en traerlo de vielta) estaba algo frío y no tenía ese sabor que yo recordaba de hacía unos años. La piel del cordero no estaba crujiente y el plato donde venía no estaba caliente para mantener la temperatura (cosa que en el solomillo sí).

De postre pedimos tarta de queso, que nos gustó mucho y tarta de chocolate que no volvería a pedir, bastante seca. El helado que le acompaña de mandarina si que estaba bueno. A esa tarta le daría una vuelta.

El servicio bueno aunque nos atendió una chica que tuvo numerosos fallos, supongo que estaría aprendiendo. Ya solo nos quedaba reír.y pasar un buen rato.

El precio no me pareció caro por la ubicación del sitio.

Después de esperar más de media hora para comer pedimos entrante y cordero. Las migas son abundantes pero normales y un poco secas. El cordero nunca llegó. Nos sirven la ensalada que le acompaña pero al rato nos dicen que han contabilizado mal las raciones y no les queda. Fallo garrafal. Tuvimos que pedir rabo de toro, normalito, y perdiz, que estaba seca. Por el precio que pagamos no volvería.

El lugar es muy bonito, pero dejo la imagen del cuarto de cordero (48€) para que juzguéis vosotros mismos. Ni una chuleta, ni cuarto ni nada. Para ser un lugar donde sirven cordero parece que se han olvidado de la cantidad que se debe de dar.
Las almejas riquísimas eso sí.

Me recomendaron este sitio por sus asados y no se equivocaban. He probado el mejor cordero y cochinillo hasta la fecha. Los entrantes buenísimos y del postre destaco la tarta de queso. Se nota que los productos son de muy buena calidad, hemos salido de allí con ganas de volver otro día, comer o cenar en su balcón tiene que ser estupendo. Recomendable 100%.