Café de Ruiz, Madrid

Nos ha encantado! Te hace volver al pasado con su estilo Vintage! Muy agradable al igual que el personal! Repetiremos!

Muy coqueta y agradable cafetería. La experiencia de café e infusiones después de comer en la zona buena.

No me gustan los sitios que sirven bebida sin un algo para picotear, aunque no tenga hambre, es el detalle

Un Lugar de los de antes con su encantadora estética decadente, buen ambiente, buena bebida y pinchos (probé una tabla de quesos deliciosa y a bien precio) y buen servicio.
Muy recomendable.

Un lugar típico del centro. Donde poder tomar un café, una tarta o unas copas. Decorado muy chulo. Merece la pena pasar

Todo el encanto que puede tener un café antiguo, tristemente estropeado por los productos que sirven: combinados que no se sirven en la mesa, sino que vienen preparados desde la barra, sabor a garrafón y cócteles nefastos.

Es precioso como lugar pero ninguna opción saludable, ni siquiera rooibos, es decir si quieres alcohol, azucázar, bien de hidratos de los malos y grasas saturadas en un lugar idílico y céntrico es tu sitio, pero como vayas buscando aunque sea bebida vegetal para el café estás perdido.una pena

De mis bares favoritos en Madrid. Música buena, los cocteles son deliciosos, los meseros amables. 100% recomendado

Precioso local, muy tranquilo y con un ambiente muy agradable. El servicio muy atento e inmejorable. Un diez

Pequeño bar super elegante y precioso. Me encantó. Probé por primera vez la cerveza Malasaña, riquísima

Es un lugar que me gusta visitar de vez en cuando porque es muy agradable y me encanta la cerveza Malasaña que sirven

Un rincón acogedor en plena Malasaña donde tomar un buen café mientras lees tranquilamente o te encuentras con buenos amigos. Ambiente cálido y agradable con gente diversa.

Un lugar con muchísimo encanto y súper buena atención. Uno de esos descubrimientos de Madrid de toda la vida.

Pues un imprescindible de la zona. De los antiguos cafe de Madrid con espíritu renovado. Agradable espacio a media luz para la tarta y el copazo del tardeo dominguero. Volveré.

Café Ruiz!
Es un local que está al lado d mi casa. Estube en 3 o 4 ocasiones.

El local está bien decorado, tiene un reservado cn sillones rojos y música d ambiente.

Entre para tomarme un café. Me dirigió la camarera al reservado cn estos sillones y yo preferi, ya que pretendía tomarme un simple café en 5 o 10 minutos, sentarme en una mesita cn 3 sillitas que había en la zona sencilla.

Me dijo que si venía alguien me levantaría d la mesa ya que en esa mesa cabian 3. Al parecer en los sillones del reservado, cabia menos gente.

En fin, que por la zona hay tantos sitios que.te tomas el café donde más gusto estés o te traten!

Agradable sitio para tomar una copa, camareros muy amables.
Con buenas medidas de seguridad.

Uno de mis sitios favoritos de Madrid. El personal muy amable y atento. Ideal para pasar la tarde en buena compañía.

No puedo parar de visitarlo mi lugar favorito
Los cócteles son alucinantes, el ambiente irrepetible, la atención super esmerada!
Mil gracias, en especial a Damian, por siempre SIEMPRE hacer las mejores piñas coladas y los mejores daikiris!
Ya con ganas de repetir

Antiguo cafetín, mesas de velador, cócteles de siempre, granizados de frutas muy sabrosos. Buen precio

Conocí este local cuando era más café literario que local de moda y fui de nuevo pocos días después de la reapertura.
Quiero pensar que mi experiencia entonces se debió precisamente a que era la reapertura y probablemente volveré para comprobar si fue algo puntual.
Fuimos a por unos vinos y a probar su tabla de quesos, que nos habían recomendado y ambos vinos estaban calientes, tabla de quesos no les quedaban (sábado, 19h). Por lo que decidimos pedir alguna pieza de bollería con la que acompañar los vinos.pues tampoco quedaba.
Ello sumado a que el local estaba a rebosar, que no se podía hablar del volumen que había y que, de las dos personas que había atendiendo, uno no salía de la barra más que a saludar a conocidos y el otro parecía totalmente descentrado.nos hicieron reservar mesa en otro sitio para las 20.30h y largarnos de allí cuanto antes.
Tuvimos que retrasar la reserva media hora, que es lo que tardó el proceso entre pedir la cuenta y pagar.