Café del Gallo, Madrid

El menú es muy bueno, tanto la presentación cómo la preparación de los platos. La sala es acogedora. El fallo está en que el sol entra por una de las cristaleras y no hay persianas/ toldos, por lo que es molesto para los clientes a los que les da en la cara y les deslumbra.

El local está muy bien, el servicio ha sido bueno, pero la comida del menú es pésima muy poca cantidad y muy mala presentación. Deberían mejorar si realmente no quieren perder clientela.

Fui a comer por segunda vez y me ha defraudado un poco, menos personal y más perdidos y en la cocina los platos no salieron igual, un poco mal para lo que cobran porque incluso pidiendo lo mismo cada uno llevaba una cantidad, (será que algunos comensales tenían menos cara de hambre).

El sitio está muy bien por su ubicación y es de lo más agradable de la zona
El servicio es pésimo lento y poco colaboradores
La comida muy corriente
Mala relación calidad precio

Un sitio estupendo! Hemos celebrado cuatro comuniones a la vez! Hemos comido genial, nos han tratado fenomenal! Un precio más que razonable!
Ha estado todo muuuyyy bien!
Muchas gracias!

Trabajamos en el campo de fútbol de al lado por lo que solemos ir a menudo, está todo muy rico y la atención es muy buena. Recomendado 100%.

Fui el pasado Domingo a comer y el lugar me llamó mucho la atención, de hecho la terraza es una maravilla.
Por no hablar del servicio que estuvo de diez, tanto en calidad de comida como de atención, repetiría sin dudarlo.
Muchos saludos sigan así

Lo que más destacaría es la ubicación del lugar así como la decoración de este, que hace que la estancia allí sea de lo más agradable. Buen servicio, amable. La cocina no la destacaría especialmente, al menos el menú, básico y con poca variedad, a un precio de 15 euros. Volveré para darle otra oportunidad.

No recomendable. He estado en diversas ocasiones.y cada vez peor opinión. La ultima vez, se equivocaron al traer los platos pedidos, ni anotaron la comanda. Cuando se lo dije al camarero, su respuesta fue que: habia sido error de cocina. Y para remate, no habiamos comenzado el postre y nos llevaron la cuenta, diciéndonos que debíamos pagar porque cerraban la caja. Al comezar no nos dijeron nada de la hora, como en otros sitios sí es habitual. Por ello ni lo recomiendo, ni lo puedo valorar.

Es una pena la desgana del encargado o maitre. Habla en voz alta los comentarios poco apropiados y se le escuchan desde la otra punta del bar. La comida está bien la atención de los camareros roza la perfección pero el problema del lugar no es otro que el. Estábamos cenando en el lugar, cuando de sorpresa pedimos pan, una de las camareras se dirige a él para decírselo y su respuesta es "si no hay pan no hay pan, diles que es domingo y nuestro panadero no trabaja el domingo por la tarde porque hemos dado muchas cartas a medio día y se nos ha terminado". Vamos a ver señor encargado si no hay pan y si no has gestionado que haya pan por la noche no es culpa de que el panadero no trabaje, es culpa tuya por gestionar las cosas a medias o no cogerte 20€ e ir a una panadería a por 15 o 20 barras de pan, las chicas ya por vergüenza cada vez que alguien llegaba para cenar lo primero que advertían era de que no había pan para evitar vergüenzas después, pues estaríamos en el lugar un par de horas y fácilmente perdieron una mesa de 15 personas y otras cuantas de 4 y 5. Por su mala gestión este negocio ayer dejó de facturar entre 300 y 500€ por su pereza de no conseguir pan, porque la gente según le decían no hay pan se marchaban, y es una pena porque tienen buena cocina y hay raciones que incitan al pan. El caso es que posiblemente el señor encargado tenía ganas de irse a su casa y de que cuantas menos mesas hubiera mejor antes se terminará la jornada. Si vas a reservar pregunta primero si tienen pan!

Pasamos al lado y vimos que estaba abierto, después de haber estado cerrado tiempo.
Paramos para ver y el ambiente estupendo, gente en todas las mesas, buen servicio y buen producto. Precio bueno.
Unas cervezas, unas cocacolas y unas bravas que estaban de vicio. En su punto de picor y sabor.
Volveremos con más gente, porque nos gustó.
Que siga asi

Descubierto recientemente y muy recomendable. Todo rico y bien preparado a precio correcto.

Nos sentamos a las 14,30 y el segundo a las 17. No tienen suficiente personal para tanta reserva, total un desastre. Además pedimos jarras de agua, como marca la norma, y nos dijeron que nos servían VASOS, que si queríamos más cantidad, agua embotellada, osea el grupo religioso se pasa la norma por el arco del triunfo.

Local bastante bonito, se aparca fácil y está junto al parque. Con zona de terraza exterior y zona acristaladla dentro, muy luminoso. Raciones tradicionales algunas con un toque moderno, buena relación calidad-precio y camareros amables. Tienen algunas bebidas diferentes (sangrías). Tomamos el timbal de verduras, las berenjenas, el cazón, las ranas, la morcilla y la ensaladilla rusa. Repetiré.

Precios nada recomendados para mileuristas. Raciones bien elaboradas pero escasas. Bebidas a precios elevados sin acompañar de tapas salvo frutos secos. Un espacio para personas de clase media alta.

Un lugar muy agradable en tiempo de frío y en tiempo de calor. Luminoso. Si estás de paseo por el parque, estupendo. Y si estás de citas en el H° 12 de Octubre, un claro reposo. Buen precio del menú y medio menú.

Hemos comido varias veces (por cercanía) y tengo que darles la máxima puntuación. Tanto el menú de lunes a viernes (14€) como la carta y los platos sugeridos, son estupendos: ricos, algunos muy originales o con un punto diferente y además no son pesados (ni las raciones ni la comida) y el trato de todos las personas que te atienden es excelente. Mi enhorabuena tanto al chef, como al personal que atiende al público. Habrá que seguir comiendo por allí.

La comida buena, relación calidad precio buena. Muy ruidoso dentro y los cerramientos poco eficaces. El servicio mejorable. En verano con la terraza debe de ganar bastante.

Hemos conocido este sitio de casualidad al venir a los fuegos artificiales por el año nuevo chino y nos ha encantado. Servicio súper amable, comida estupenda y buen precio. Volveremos

El lugar es acogedor, me encanta. Sobre todo por los dos espacios que tiene terraza y dentro es con cristales, es decir que ves la arboleda. Muy bonito.