Cara Norte, Navacerrada
Direccion | Pl. de los Ángeles, 2, Navacerrada, Madrid | ||||||
Telefono | +34 918 42 88 68 | ||||||
Horas |
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Categories | Bar de tapas, Cafetería, Lounge, Restaurante | ||||||
Clasificacion | 3.4 53 opiniones | ||||||
Empresas similares cercanas La Gata de Madriz — Calle del Dr. J González Villasante, 1, Navacerrada, Madrid Asador de Ángel — C. de la Pontezuela, 23, Cercedilla, Madrid El Abeto Bar — Plaza del Dr. Gereda, 2, Navacerrada, Madrid Restaurante Hiedra — Gta. del Álamo, 7, Los Molinos, Madrid |
Cafetería Cara Norte opiniones
53 Escribo esta reseña porque uno de sus camareros me invitó a hacerlo (bajito, joven y con bigote).
Sábado a las 14 de la tarde en un pueblo turistico de la sierra como es Navacerrada en pleno mes de noviembre. Todo empezó mal, de 5 platos que pedimos 2 no lo tenian. Pelos en la comida. A la mesa de al lado le sirven uno de los platos que no tenían. Postres lo mismo, pedimos 3 y 1 no tienen. Al barquillo que venía con el postre le podías dar forma porque parecía de plastilina.
Esperábamos que no nos cobrarán el plato con pelos o que a cambio tuvieran algún detalle y son tan de descontar la parte proporcional de la ración que tenía pelo por la que nos quejamos (es decir, nos descontaron 2€ de la cuenta).
Ante todas estas quejas nos encontramos con un empleado prepotente y a la defensiva que no admite nada de lo que le decimos, y como repito, nos invita a poner una reseña negativa las 5 personas que estábamos sentados en la mesa. La actitud del otro camarero un poco más mayor tambien dejó mucho que desear, que se reía desde la barra en vez de echar una mano con la situación a su compañero.
En fin, al salir le encontramos explicación a por qué tenían hueco para sentarnos después de preguntar anteriormente en los restaurantes próximos y estar todos llenos.
Penoso y asqueroso.
Por cierto, a excepción de la ensalada de burrata, comida muy mediocre y obviamente congelada.
APRENDAN A TRABAJAR DE CARA AL PUBLICO
Vergonzoso el trato y servicio que dan.
Te dicen que no puedes pedir la mitad de los platos que ofertan en la carta pero a la hora se los sacan a la mesa de al lado.
Pelos en la comida, todo congelado y humedecido (lo pondrán del día anterior).
Personal prepotente con actitud absolutamente deleznable, les tuvimos que recordar que había pelos en la comida porque no tuvieron ni el detalle de pedir perdón ni descontar nada de la cuenta (por supuesto su respuesta fue a la defensiva insinuando que la comida humedecida la habíamos puesto nosotras ¿? Y el pelo de barba también ¿? , éramos 5 mujeres).
Sobreviven de los turistas que se quedan sin sitio para comer en los demás sitios porque están llenos (luego entendimos por qué este estaba vacío).
Hemos estado el fin de semana pasado y tomamos el aperitivo y nos quedamos a comer.
Comimos solomillos de pollo co n salsa camembert y tres hamburguesas, estaba todo muy rico y muy bien atendido.
Tienen una carta con raciones y variedad.
Todo muy apetecible.
Quiero hacer mención a un comentario anterior, “ no tienen pescado y las carnes son a la plancha y lo baños tienen pestillo “ creo q el señor se ha equivocado de restaurante porque en ningún restaurante de Navacerrada tienen aparcamiento.
La media con bebida, postre y café fue de 18€.
El ambiente es muy guay y el pueblo y alrededores muy bonito
Súper recomendable!
Procura caerle bien al camarero pq si no.te quedas sin aperitivo, mientras ves, cómo sirve al resto de mesas pasando delante de la tuya como si nada.
Cuando abrió estaba genial, y poco a poco cada vez la calidad es peor, se ha convertido en un sitio de aperitivo los domingos (gracias a sus deliciosas patatas revolconas) y a evitar el resto de tiempo salvo emergencia, le pondría 1* pero tienen buen servicio y personal amable asiq 2*. Las gambas al ajillo insípidas, las croquetas congeladas, las hamburguesas ultra prensadas y secas (honestamente prefiero una de cualquier cadena de fast food), da igual el punto al q pidas la carne, y los huevos rotos, comestibles, sin más.
La decoración muy chula y agradable, pero en el siglo xxi es importante tener al menos leche sin lactosa
Si lo que quieres es comer algo casero de calidad en tu visita de fin de semana a la sierra y que te atiendan de manera campechana y humilde como era nuestra intención, este desde luego no es el sitio, y puede que te arruine parte del día, es solo mi experiencia, no a todos puede ocurrirles igual (o eso quiero creer) pero habiendo gran variedad de restaurantes y bares de calidad en Navacerrada, no merece la pena arriesgarse a que las cosas salgan mal, espero que sea útil mi información y ayude a otras familias a no arriesgar.
Un saludo
Es imposible ir a Navacerrada y no disfrutar de una comida en Cara Norte, siempre que vamos repetimos y el servicio es excelente.
Estuvimos tomando algo antes de ir a comer y aún que había bastante gente en seguida nos hicieron un hueco
Tan buena la amabilidad como la relación calidad precio de la comida. Un lugar fantástico en Navacerrada
Muy agradables en el trato y sitio acogedor. Veniamos de intentar tomar un café en varios sitios donde fue imposible, como en El Portillòn y El Rumba. Se ve que ahora que ya no hay pandemia, les sobra la clientela y a las 16: 30 de la tarde no te sirven un café. Pero encontramos Cara Norte y por fin lo conseguimos. Tomamos unas tortitas muy buenas. Cada vez que vaya a Navacerrada, entraré aquí de nuevo.
Pésimo. Dentro estaba vacío y nos dijeron que para tomar un café solo se podía en terraza. Café por el cual te cobran 2,10€ y horrible de sabor. Si puedes, evita este sitio.
Sitio agradable. Buena relación calidad precio. La camarera amable y buena profesional. Repetiré.
Fuimos cuando coincidió el trail de penalara y había bastante gente pero el servicio y la comida fueron muy buenos
Qué delicia pasar un rato en la terraza de Cara Norte con el ambientazo de Navacerrada en pleno agosto.
Tomamos unas hamburguesas eapectaculares y de postre la tarta de 3 chocolates.
La chica que nos atendió super profesional, el trato inmejorable.
100% recomendado
Fuimos a tomar algo tras hacer una ruta, éramos un grupo de 6 personas.
Fuera no había sitio y dentro nos comentaron que nos dejaban sentarnos, pero si necesitaban la mesa por cenas que nos la pedirían.
Tiene una curiosa variedad de cervezas, incluso de barril, eso sí con el aperitivo o tapa no se lucen, una miniempanadilla congelada.
Según creo el sitio es mucho más recomendable para los lugareños, pues me lo recomendó uno y hablaba muy bien del lugar.
Nos pedimos dos tercios de cerveza, los probamos y estaban a unos 12 grados, impensable en mi modo de beber una cerveza en España, se lo decimos al camarero y nos contesta que las cámaras no funcionan bien, pero falta de profesionalidad el no advertirlo antes, no las hubiéramos pedido, por no montar una reclamación, intentamos beberla pero era imposible, nos dejamos mas de el 70% de los tercios, pedimos la cuenta dando explicaciones de la situación, y les dio igual, nos lo cobran totalmente y no tienen ni un detalle de intentar compensar el mal servicio por el producto sin tener la temperatura adecuada. No todo es hacer caja
El sitio está bien sin más. He ido varias veces tanto a tomar una cerveza como a picar algo y fue correcto. Sin embargo, últimamente el servicio deja bastante que desear. Como ejemplo, ayer a las 23: 40, estando ya unos amigos dentro tomando una copa, llegue con mi mujer y no nos quisieron servir una a pesar de que nuestros amigos tuviesen una apenas empezada y hubieran sido avisados de que se cerraba a las 00: 15 (35 minutos quedaban.). Eso no fue todo, ya que a los comensales de la mesa de al lado, siguieron poniéndoles copas hasta el momento en que nos fuimos (00: 05). Incomprensible. No volveremos.
Fuimos el sábado a las 23.30 y nos dijeron que no nos dejaban pasar porque cerraban a las 00.30h! Nuestros amigos estaban dentro en una mesa consumiendo, y tras insistir y preguntar al “encargado”, nos dejaron pasar; eso si con restricciones absurdas: no podíamos pedir copas a pesar de que quedaba casi más de una hora para el cierre, pero si podíamos pedir cervezas.
Sábado por la noche, plan de amigos, no nos apetecía discutir, y ni siquiera el “encargado “ se hacía responsable de las insensateces …
Nuestro desagrado y sorpresa aumentó cuando a las 00.15h aprox nuestra mesa pidió la cuenta, y a la mesa de al lado, un grupo de seis personas de unos 40/50años de edad, les estaban sirviendo copas de nuevas y les invitaban a moverse a la barra sin otras restricciones.
CONCLUSIÓN: llevábamos muchos años yendo, de aperitivo, copas, las fiestas de aniversario.el sitio, servicio, y materia prima sin más, pero tenía buen ambiente y podía merecer la pena.
Desde el horrible trato de ayer, no volveremos a ir, y por supuesto ampliaremos nuestro desagrado en resto de redes sociales, y amigos.