Casa Puebla Olavide, Madrid

Camarero super desagradable. Tomad nota los dueños sobre la gente que teneis empleada alli

No recomiendo visitar este lugar. Muy mal y lento servicio. El camarero está ocupado con sus asuntos y no te ve ni te oye. Quería pedir comida para el niño, el camarero dijo que la cocina está cerrada, pero después de 15 minutos llevó los platos a la mesa de al lado y luego a otra mesa también. Al final de la noche (antes del cierre eran 25 minutos más), el camarero comenzó a barrer la terraza que todo el polvo estaba volando sobre nosotros y sobre los niños, era imposible respirar. Parece que nos están echando de él bar.

Nos cobraron de mas, me di cuenta en casa porque el ticket era ilegible a la hora de pagar. Llamé para reclamar al día siguiente y no cogen el teléfono. Escribí un email con foto del ticket y no responden. Y las tapas para olvidar.

Pésima atención te botan a las 11: 30 para no servirte más, mienten de que la cocina está cerrada a la 9 pm.

Situado en plena plaza Olavide. Tiene una amplia terraza exterior, soleada. El ambiente es familiar.
La carta menú consta de diferentes raciones y tostas.

La mejor tostada con tomate y café con leche en Madrid.
Buena música para empezar el día.

Lamentable. Más de una hora para pagar, pero cuando nos levantamos tras 7 veces de aviso, vienen a cobrar en mitad de la plaza. Es una vergüenza. Comida pésima y nada recomendable.

¡Perfecto para tomar una copa al sol con amigos, servidores muy benévolos a pesar del mundo incesante!

Excelente trato del personal de servicio, con mucha preocupación por el cliente.
La comida muy acorde a los precios estipulados al igual que la bebida.
En general muy recomendable para estar con los amigos, familia, pareja…

La comida no esta mal. El trato de los camareros deja un poco que desear. A deshoras no te ofrecen ni una tosta fría.

Nos sentamos a las 3.30, pedimos bebidas para todos, nos las sirven, y cuando vamos a pedir comida dicen que cocina cerrada.eso se avisa antes. A las 3.30 se supone que las cocinas están abiertas

Una de las muchas plazas de Madrid con encanto. Una delicia hacer un descanso y tomar un poco el aire.

La tosta de queso de cabra y cebolla caramelizada era una aberración inmunda. El sitio bien situado y el servicio muy bien.

Intento de engaño por no decir estafa en toda regla pides un agua y una cerveza y te intentan colar dos cervezas y un agua cada vez más habitual en muchos sitios

Ayer estuve cenando en la terraza. Éramos dos personas y el total de la cuenta ascendió a 49,90€. Como postre pedimos dos cafés y nos dijeron que la cafetera ya estaba apagada aunque al final lo trajeron. Después pedí un chupito y la respuesta fue que no tenían costumbre porque si fuéramos un grupo que gastaban más dinero, entonces sí. En fin, la calidad muy mediocre. Anchoas del Cantábrico a 13,50€, unas 5 anchoas raquíticas, realmente la caja de Mercadona a 0,90€ no tiene nada que envidiar. Soy del barrio y no volveré nunca porque la oferta de la zona permite escoger algo mucho mejor. Quizás tendrían que replantearse los hosteleros el tratar bien a su clientela en lugar de quejarse tanto y ofrecer calidad en lugar de estar el cliente todo el tiempo soportando salidas de tono….

Nos trataron bien, lo único que como hacía mucho calor tardaban mucho en salir a atendernos a la terraza

En la terraza no pasaban los camareros con mucha frecuencia, el jamón de la tosta estaba duro y las bravas también.

Mala experiencia, vamos a pagar y nos dice la dueña, en tono perdona vidas, que no se puede pagar con tarjeta tan poca cantidad (eran 2 desayunos completos). Antes habían pagado 3 mesas de las que estaban alrededor, más menos misma cantidad y no habían dicho nada. Desde entonces vamos al de al lado La Oliva, mejor atención de las camareras y nunca hemos tenido un problema.

Servicio excelente. Mejores camareros de madrid Comida buena a precios ajustados. Prefecto para comer al sol cualquier día se la semana.

Normalito, terraza al sol
Las cervezas estaban frías. Bravas ricas pero ración un poco reducida… lacón buen sabor pero está cortado en lonchas finas que parece jamón cocido. Te cobran el pan que estaba durillo muy compacto.