Casita de Peregrinos, Madrid

Qué decir del lugar? Pues un lugar perfecto para descansar y con un trato exquisito nada más puedo que agradecer la atención y la amabilidad con la que me han tratado Muchas gracias!

Es un lugar agradable para descansar. Ana y los huéspedes son geniales vale la pena hacer una parada y conocerlos. Volvería sin dudarlo

Muy buena experiencia. Lugar muy limpio y confortable. Cama muy cómoda y baño perfecto. La dueña encantadora. Nos sentimos muy cómodos y Repetiremos seguro.

Todo Perales de Tajuña es un lugar con encanto y la casita de peregrinos es un lugar mágico, si buscas un lugar donde descansar, meditar, recomponer tu espíritu y reencontrarte a ti mismo, no lo dudes esta casa de huéspedes es el sitio que buscas y necesitas y todo gracias a la calidad humana de quien lo regentan Ana y su hermana Virginia, ellas sin conocerme me han dado el amor y cariño que en uno de los momentos más duros de mi vida necesitaba, de igual manera que me han dado apoyo y ánimo el resto de inquilinos, mentiría si dijera que la casa tiene lo justo para pasar una pequeña temporada alojado solo o en pareja ya que el amor y la paz que encontraras es esta casa no se puede pagar con dinero, pues si pudiera me quedaría a vivir aquí, el precio es muy ajustado para todo lo que recibes, la limpieza es de 10, tienes una pequeña estancia para prepárate un desayuno, comida o cena improvisada, varios cuartos de baños compartidos con todo lo que puedas necesitar, una sala de estar común, las habitaciones son amplias con varias mesitas, escritorio, un armario ropero y TV, no vas a encontrar grandes lujos materiales si es lo que buscas, el verdadero lujo impagable es la paz y serenidad que encontraras en esta casa y en perales, la ubicación de la casa es privilegiada diría que la mejor de todo Perales de Tajuña, a un paso de las famosas cuevas prehistóricas, restaurantes, comercios y centro de salud, si vienes sabrás y descubrirás lo que te quiero transmitir, te sentirás en familia como en tu casa.

Lo conocimos haciendo el Camino de Ucles.
Albergue muy básico, habitación grande, baño compartido.
Se oía todo lo que pasaba en las habitaciones colindantes.
Para pasar una noche, si no hay otro lugar disponible con más privacidad.
Ana, es muy amable y te orienta en lo que le es posible.

La hospitalidad de Ana es maravillosa. Te sientes como en casa, todo lo que quieras y necesites te lo facilita.

Muy limpio, huele fantástico y los colchones no te hacen añorar tu casa

Gracias por todo Ana

Lo encontré por casualidad y fue una agradable sorpresa en todos los niveles. Pienso regresar.