C.E.I.P. Fray Luis de Leon, Madrid

Mi hijo estudio allí y cuando estudió su carrera de ingeniero industrial no tuvo dificultad. Salió muy bien preparado en ciencias. Importante la educación en valores. El esfuerzo por una buena educación de los Padres Reparadores se nota.

Tengo 50 años y siempre recordaré este colegio con el mayor cariño. Fuí feliz 13 años en aulas y campamentos y echando la vista atrás, salí muy preparado, aprendí muchísimo. Y ahora incluso es bastante mejor.

Muy buen colegio. Lo mejor es el ambiente, todos son una familia. Los profesores son muy cercanos y se transmiten muy buenos valores. Estamos muy contentos porque vemos disfrutar a nuestros hijos todos los días. Su día favorito es en el poli. Todo un acierto.

Con cosas, como todos. La verdad es que me gusta las actividades que tienen y la sensación de grupo de los compañeros. Solo buenas palabras

Encontrar este colegio fue una bendición en nuestra vida, excelentes profesionales y buen ambiente de alumnos y familias. En especial la labor del jefe de estudios, Vicente, extraordinaria. Gracias por vuestra labor.

Un colegio muy cercano y unido con las familias. Como antigua alumna tengo grandes recuerdos de compañeros y profesores. Educación en valores, calidad académica y buen ambiente.

Tuve la enorme suerte de que mis padres eligieran este maravilloso colegio para mi. Estudié durante 14 años, en los que me recibí una sólida formación académica y en valores. Estuve en el Fray Luis hasta el año 1984, año en el que comencé mis estudios universitarios.

Se nota la implicación del centro en cuanto al progreso educativo, lo cual se manifiesta tanto en el desarrollo académico, como personal del alumnado. Igualmente, tienen diversas actividades extraescolares que fomentan la cohesión y el sentimiento de pertenencia al centro. Cabe destacar la labor del departamento de orientación de infantil y primaria, el trato al alumnado con necesidades educativas especiales y la participación en proyectos de innovación.

Me ha encantado. Los profesores son muy amables. Cada nuevo trimestre se renueva con un nuevo lema. Simplemente excelente.

Un colegio maravilloso y un profesorado inmejorable! Tengo a mis hijos ahí y estoy encantado. El personal docente siempre está dispuesto a dar lo mejor de sí y la comunicación con los padres es muy transparente. Han respondido fenomenal a las circunstancias de la Covid, cosa que no es fácil. De los mejores colegios concertados de la zona!

Entré por sus puertas pequeño, timorato, y con la mirada perdida a la edad de 3 años. Después se sucedieron otros 15 maravillosos años más en los que el colegio Fray Luis de León fue mi casa -aún hoy lo siento como tal-, un lugar de aprendizaje en todos los sentidos; de crecimiento escolar y personal, de amistades y de experiencias. Una gran parte de lo que soy hoy en día se lo debo a los profesores que me formaron en conocimientos y valores, todo ello mostrando una gran calidad humana.

Asimismo creo que el nivel de enseñanza fue excelente, preparándome perfectamente para la universidad y para la vida laboral; pues el bagaje cultural y el espíritu crítico desarrollados durante esta etapa me parecen fundamentales.

Si algún día tengo hijos y vivo en Madrid, no dudo ni un solo instante de donde me gustaría que estudiaran.

Soy una antigua alumna del colegio, he estudiado en él desde 1º de primaria, y sin duda repetiría una y mil veces. Estaré siempre agradecida a la educación académica que me han dado, pero si algo tuviera que destacar son la cantidad de valores y experiencias inolvidables que me llevo. Gracias a la cercanía de los profesores y a todas las actividades organizadas recordaré al colegio como a una segunda familia.

Sigue siendo para mí un lugar de encuentro y hace ya bastantes primaveras que marché. Mmm, quizá no me fui nunca

No tuve la suerte de ser alumno, pero estuve ligado durante años a sus actividades de pastoral, que me han marcado como persona y por las cuales estaré siempre agradecido.
Ahora mis hijas estudian allí y estamos plenamente satisfechos.

Muy contenta con el colegio. Tuve la gran suerte de hacer el bachillerato allí, y también he hecho prácticas. Es la tercera vez que hago prácticas allí y las tres veces me he sentido como en casa, con Borja, Marimar y Fanny: los mejores tutores de prácticas. Y a mis niños les he cogido mucho cariño.

Creci durante 14 años en un gran colegio que siempre considerare mi casa, donde maestros, sacerdotes y profesores me formaron y educaron en valores que uso cada día. Gracias a los padres reparadores y a ese gran equipo docente que siempre estuvo detrás.

5 estrellas se queda corto. He pasado gran parte de mi vida en este colegio. Mi padre me supo transmitir el cariño por él. Me he formado con los mejores y he crecido como persona y como creyente. Fue, es y será mi casa. No puedo estar más orgulloso de haber estudiado en él.

La verdad que un increíble colegio, que buenos recuerdos tengo de ello, la educación increíble y los profesores los mejores, ayudando en todo y contigo siempre.

Si tuviera que resumir con una sola palabra lo que ha significado este colegio para mi sería: FAMILIA.
Soy antigua alumna y tanto mi hermano como yo nos educamos en este colegio.
El Fray Luis de León es único, combina a la perfección lo que cualquier padre quiere para sus hijos. Por un lado, el aprendizaje en las diferentes destrezas del conocimiento y por otro lado, el aprendizaje de uno mismo con y para los demás, siguiendo la filosofía de una congregación nacida con el propósito del servicio a los demás y la entrega.
Además tiene la ventaja de potenciar la unión y el respeto entre los alumnos y ofrecer una educación totalmente acompañada con el crecimiento del niño, desde los 3 años hasta los 18.
Estoy ENCANTADA de haber pasado tantos años de mi vida allí, sentirme con en CASA cuando vuelvo y desde luego cuando tenga hijos en un futuro sé a la perfección que El Colegio Fray Luis de León será el colegio de sus vidas.

Como antigua alumna, desde los 3 años hasta terminar mi Bachillerato de Humanidades, que me abrió las puertas para encontrar mi camino, no puedo estar más agradecida de haber formado parte de la gran familia que es el Fray Luis. A nivel educativo, además de graduarme con muchísimos conocimientos aprendidos a la espalda, que me han ayudado en mis estudios posteriores, aprendí lo valioso que es el esfuerzo, así como la superación día a día. Sin embargo, creo que son aún más importantes los valores que me llevo: el compañerismo, la solidaridad, el respeto, la humildad, el cariño, la Fe. Y es que además de las horas de clase, con un profesorado realmente involucrado con sus alumnos, siempre he podido disfrutar de unas actividades extraescolares, fiestas y campamentos de verano que no olvidaré jamás. Puede que, quien lea esto sin conocer el cole, pueda no llegar a creérselo, pero sin duda, si algo tengo claro, es que sé dónde está mi segunda casa, y es en el Fray Luis. Desde luego, si tengo la oportunidad de vivir en Madrid en un futuro, tengo muy claro cuál va a ser el colegio que eduque a mis hijos. ¡GRACIAS!