Cervecería Gambrinus, Madrid

HORRIBLE! El camarero viendo el fútbol y tardó un montón en servirnos a pesar de que casi no había gente, nos atendió con mala educación y malas formas; pedimos unas cañas que venían medio vacías y al quejarnos nos dijo que allí las ponían así y de aperitivo panchitos rancios.
Al pedir la cuenta tardó otro buen rato, nos cobró y cuando estábamos recogiendo para irnos soltó como comentario. "y encima sin propina"
No volveremos ni aunq sea el último bar de Carabanchel!

He ido con mi hijo de 3 meses y dos amigas más que también iban con el carrito y nos han dicho que molestabamos con nuestros 3 carritos. No vuelvo a ir.muy mala atención.

Lugar dónde no permiten entrar a mamás con niños. Hemos ido a tomar algo con nuestros bebés y nos han echado, han dicho que dónde íbamos con los carritos, q molestaba a la gente, y el lugar estaba vacío, y nos han dicho q nos fuésemos. Desde luego q no vuelvo a entrar en un Gambrinus, mi hijo dejará de ir en carro pero yo no volveré a este lugar

Experiencia mala no quiso q tres cochecitos de niños estuvieran en el bar. Estando vacio, es la ultima vez q vamos, ni yo ni nuestra familias

Éste gambrinus en concreto deja mucho que desear, no tienen la carta que tenían hace unos años y se ha convertido más en un bar normal que en un sitio de referencia.

Uno de los mejores sitios de la zona. Berenjenas gratinadas deliciosas, comida casera buenísima. Soy Clienta habitual desde hace 10 años y el personal y su dueño Antonio son muy amables, atentos y simpáticos. Respecto al comentario de una madre que dice que no las dejaron entrar decirla que llevo años acudiendo con mi hijo y amigos desde que era un bebé y nunca hemos tenido ningún problema, es más, todo lo contrario, nos han facilitado zona para poner los carros.
Recomendable 100 por 100.

Buen lugar para tomar tapas tradicionales. La atención es estupenda.
Hay q probar los callos y el rabo de toro. Muy buenos

Tenían solo un ventilador para toda el comedor y el aire acondicionado no era suficiente. Bastante sucio. Las cervezas están oxidadas y en lugar de darte una te ofrecen limpiarte la boquilla.

Servicio regular, patatas refritas, comida cruda, al hacer la observación del pescado crudo y las patatas las han vuelto a referir, éramos varios y hemos decidido no volver, porque era una referencia de años atrás que era muy bueno. Pero ya no!

Buenas tapas y el trato. Si vas sin niños bien, porque parece ser que los niños les "molesta" al dueño. Ha no ser que los claves a la silla.

Cervecería con terraza. Trato muy agradable. Tiene varias mesas dentro del local y televisión para ver partidos.
Buenas raciones.
Precios de los combinados muy asequibles.

Hemos tenido que dejar de ir; los camareros se chupan el dedo para tomar nota en su bloc. Uno de ellos 8 veces en un minuto.

El trato de los camareros excelente, el local acogedor y buen ambiente, las tapas y menu caseros muy bien, muy recomendable para tomar unas cañas con los amigos o comer de buena cocina.