Cervecería Tapas Andalucía CTA!, Madrid

Para un malagueño es como estar en casa. Las gambitas.de escándalo! Y los dueños maravillosos

Ni fu ni fa, la cerveza no estaba fría, el solomillo al whisky con alioli (por alguna razón) y sin salsa al whisky, además de pasado. Y el camarero pues sin mucha gana de trabajar, esperaba encontrar un poquito de Andalucía pero qué va, quizás fui con demasiadas expectativas.

No es el mejor sitio para pedir raciones, pero te pone sus tapitas que para salir del paso no están mal

No he comido aquí, pero nací en este local cuando era una bodega por los años 60.siempre me sentiré ligada al lugar.al local y con cierta añoranza sin tener recuerdos. Lon vínculos son así

Lo único que merece la pena son los botellines.la comida.pedimos un plato de navajas (7) y calamares, sorpresa cuando nos traen 5 navajas al mismo precio le pregunto a la camarera y me indica que no quedaban más pero que por eso nos han puesto más calamares (cómo si tuvieran el mismo precio.) A lo que le indique que eso tienen que advertirlo antes de nada. El caso, que una chica de mi misa mesa pidió más tarde que yo también navajas, una ración completa (15) y le vinieron 13 también, osea para traerme a mí mis 2 navajas que me faltaban, no les quedaban más pero para una ración (también incompleta) si tenían 13 navajas más.el datáfono no funciona, NUNCA FUNCIONA, y los boquerones fritos.para tirarlos contra el suelo y que reboten.
Resumidamente, la comida no vale para nada.
Una pena.

Agradable ambiente y atención. Las gambas con el cubo de cerveza es un atractivo del sitio!

Comida de calidad a muy buen precio y con raciones grandes.
La terraza es bastante agradable y el servicio es rápido.
Lo que más me gusto es el salmorejo.
Muy recomendable.

Pufff, no sé que ha pasado con el sitio, pero menudo desastre. Han hecho cambios estéticos y parece que de personal y hasta los precios han variado. La camarera hace lo que puede y más, ole por ella.

Solo había un camarero servicio lento, pero lo defendía con una sonrisa.

Por lo menos.

Hacia muchos años que no iba y tenía un recuerdo brutal, en su día cenamos genial y por eso, el repetir y con unas ganas….
Que decepción! Pedimos una fritada para 5,
Es cierto que parecía gigante, pero casi todo eran chopitos (no sabían A nada), boquerones 4 (secos), bienmesabe (uuummm) y debajo del todo, una montaña de lechuga, con lo cual, hacía que el pescado se mojase la fritura. UN 1
Para los niños pedimos unas croquetas de jamón que bua… y unas lágrimas de pollo de freidora.
La atención muy básica por falta de personal.
Cenamos en la terraza, una zona con la mesa inclinada y sin luz.
Sinceramente, no volveremos, una pena lo que era, y lo q es

La carta es muy variada. El menú del día muy rico y con muchos platos a elegir, lo mejor el precio, ¡¡¡ya no encuentras por ahí menús del día a 10€ y con esa variedad. Mejorable la ensaladilla rusa, le faltaría algún ingrediente más, por ejemplo atún y más sabor, se queda bastante insípida y era prácticamente patata y guisantes (un detalle positivo la gamba con la que la decoran). Las chuletillas de lechal muy ricas y abundantes. Me encantó que las patatas fueran fritas "naturales", no congeladas. Las gambas muy frescas. Las raciones, que vi en otros comensales, eran muy abundantes y con muy buena pinta. No me gustó que uno de mis acompañantes pidiera una "clara" con limón y le dijeran que "en el menú sólo entraban los botellines de cerveza". La atención buena, aunque el camarero rubio un poco lento y algo despistado, el moreno muy amable y servicial. A pesar de los "peros" le doy cinco estrellas. Repetiré si estoy por la zona, merece la pena comer aquí.

Este sitio lo hemos descubierto hace poco y la verdad es q estamos encantados, tiene una terraza muy agradable y quien sabe si los botellines más baratos de Madrid. Cubo de cinco botellines por 4.50€, perdona? Una maravilla. Luego además tienen una carta amplia de raciones y tapas, marisco, fritura, la verdad es q todo un descubrimiento.

No voy a valorar la comida por vergüenza ni al personal ellos mismos que lo hagan, pero 50 minutos esperando unos chipirones (6 unid.pequeñas 11€) y la barra Llena de consumiciones sin retirar desde que entramos hora para comer entre basura de otras personas. Es una pena pero no vuelvo en la vida y digo pena porque seguro q cogera otra persona la dirección del local y me perderé sus habilidades gastronómicas.

Si quieres cenar. NO Vayas.pésimo servicio de camarero. Más de 10 minutos para decir buenas noches y pedir bebidas. Y más de 45 después se quedaron con la comanda, porque se le olvidó pedirla. Ya me han visto.

Terraza muy buena y fresca, con cubos de botellines a buen precio y buenas raciones. Las tapas con las cervezas o los cubos, son mejorables. Pero en general un sitio recomendable

El sitio lo conocimos no hace mucho, pero hoy nos hemos ido sin pedir, no tiene la culpa el camarero pero mínimo debería coger nota según entre la gente y no entender las mesas según le pille, ya no es lentitud es saber trabajar y para eso entiendo que hay que pagar profesionales.una pena porque no se come mal.

Las gambas muy bien el servicio desastroso, 1h para que nos pusiesen 5 botellines y una cocacola.
Acabamos en un bar de al lado cenando porque no veiamos como se iban ñas mesas de al lado sin que las sirviesen

Cerveza barata y gambas todos los fines de semana a 4€. Además los menús de entre semana rentan bastante. Por 10 euros te dan 2 platos, bebida y postre/café.

No puedo hablar de la comida porque la poca atención del camarero de la terraza ha hecho que no pidamos nada de la carta. Carta sucia, mesa sucia, no nos ponen aperitivo hasta que se lo pedimos con la segunda consumición, malas caras por su parte y cuando le pedimos la cuenta no da ni las gracias. Pues nada majete, te quedas sin propina y que sepas que te he visto sonarte los mocos con la mano y beber botellines de tapadillo. Malos tiempos para lo hostelería y sobre todo para los clientes.

Llevamos en el bar una hora intentando pedir para comer 4 veces a camareros distintos y no han sido capaces de atendernos. En todo momento nos dicen que esperemos a la vez que han ido sacándoles a mesas de al rededor. Vaya fundamento.