El Capricho - María Moliner, Madrid

Vaya desayuno más asqueroso. Una panadería que las tostadas de cereales es pan de molde no es una panadería. El jamón de la tostada lo cobran y lo venden como ibérico, pero en realidad es un trozo de carne cruda incomible. El precio por 2 desayunos 10 € (2 cafés, 2 chupitos de zumo de naranja y 2 tostadas con carne cruda). A 50 metros ahí otra panadería, probaremos allí la próxima vez

He en un pan muy rico, no como el la mayoría que todo es congelado.
Y sus tartas, pasteles. De primera

Solíamos ir a desayunar o merendar pero hemos dejado de ir porque nunca hay Nutella para los crepes, no aceptan tarjeta/tickets restaurante, el zumo de naranja incluido en el desayuno es minúsculo y, en general, hay mejores opciones en la zona

Con la reforma y su café premium el sitio me gusta todavía más. Mi enhorabuena por aumentar la calidad. Se nota.

Panadería pastelería cafetería. Los desayunos están muy bien de cantidad calidad y precio. Tanto el pan y la bollería son muy ricos

Me encanta está pastelería/Panadería y cafetería. Todo muy RICO! Dulces muchisimos y variados. Los panes muy caseros! Salado también. Ideal desayunos y meriendas.
Buena atención. Limpio. Deco normal a buena.
Sitio adentro y afuera, terraza.
Ideal o comer allí o llevar.

Muy mala calidad. Los pasteles te los venden estando ya duros. Las tartas las venden congeladas y, cuando les preguntas si están congeladas, te miran como si estuvieses loco y te dicen: "noooooo". Luego llegas a casa y congelada como una piedra. La cafetería, en fin. ¿A qué no adivinan a quién han perdido como cliente para siempre?

He comprado esta mañana pasteles y milhojas, están pasadas de fecha. Incomibles, secas y con sabor rancio. Qué decepción!

Día 1 de Mayo compro milhojas, palmeras y medio kilo de pasteles y después de preguntar si era del día y afirmar que si lo eran, los hemos abierto con toda nuestra ilusión y están las tres cosas secas, las milhojas especialmente. Muy decepcionado después de esperar 30 minutos en la fila para adquirilas.

He comprado unos pasteles que tenían buena pinta en su tienda de Dehesa Vieja y estaban un poco resecos en apariencia tenían muy buena pinta pero al comerlos se notaban que no eran recientes.

Para comprar pan y dulces està bién. Curiosamente ahora todos los empleados de todas las tiendas No son españoles, ha bajado salarios y aumentado precios. Sinceramente es un lugar que tacharé, aún hay mucho en la competencia con mejor trato.

Precios caros y productos decepcionantes.

Pedir un croissant de esos rellenos de nata, con chocolate por encima y que el chocolate parezca puro azúcar extradulce no es bueno. Pero ir a otro local del Capricho, en otra ocasión, y pedir un croissant relleno de atún y que sea con almíbar, haciendo que el dulce te estropee todo el sabor, es el colmo.

Además su medidas anticovid dejan bastante que desear, ya que te dicen que tienes que pedir desde la mesa (lo cuál está bien), pero los clientes que piden para llevar lo hacen desde la barra. Desconcertante.

Encima te encuentras con clientes a los que se les permite estar junto a la barra y con la mascarilla bajada, sin decirles nada, porque se ve que son habituales o conocidos. Cero desinfección de mesas, y algo de caos en general.

Una pena, porque son locales agradables y con bastante variedad y eso no abunda. Pero con éstas condiciones se quitan las ganas de ir.

El lugar es acogedor, el trato muy amable, el precio justo, el croissant con nata y chocolate estaba bueno. Lo único el café, no me ha gustado demasiado, un poco insípido para mi gusto, pero a lo mejor soy yo. En resumen un buen sitio para parar a descansar un ratito.

Buen sitio para desayunar zumo de naranja natural y bollito muy rico a muy buen precio.

Servicio rápido y muy agradable.

Cafetería - pasteleria, con terraza. Variedad de producto, buen servicio. Cerca del metro. Y el hospital

Soy un cliente avitual, que lógicamente yo he dejado de serlo, gracias a una de sus camareras es muy desagradable y mentirosa, cada dia me cobra una cosa diferente, la pides un producto y te dice que no hay, cuando se lo está sirviendo a otro cliente, en definitiva un caos gracias a buestros pesimo servicio habéis perdido un buen cliente.

Aunque tienen productos buenos la atención deja mucho que desear. Se creen que tratan con colegas y somos clientes. Deben mejorar en profesionalidad.

Una atención con desgano, siendo que en la tarde que fui no había clientes.
El bocata no sabe a nada y el café soso

Típica cafetería de barrio pintada de colores chillones, en la que el servicio es simple y básico, en la que los detalles no se cuidan y la calidad de la comida es básica.

Fatal. El servicio mal (no se entraban de quién había pedido qué, te mandaban a pagar a otro sitio después de decirte que sí te cobraban, te corregían al pedir de una forma que no era la que ellos querían.) Y la comida estaba regular tirando a mal. No lo recomiendo, con toda la oferta que hay alrededor