El Pescador de Las Tablas, Madrid

Estuvimos el sábado por la tarde, y no nos gusto el trato del personal. Estaban discutiendo entre ellos y parece que lo pagaron con la clientela. Nos retiraron las consumiciones sin preguntar y sin que hubiéramos acabado. Desde luego que no pensamos volver. Una pena, porque las cróquetas estaban cojonudas.

Les recomiendo este lugar es un restaurante con amplia terraza, muy apto para compartir en familia o amigos, sus platos variados y de calidad, precios accesibles con una buena atención y servicios.

Un timo y además hasta arriba de sal espolvoreada

La técnica es la siguiente: llega este señor y te dice los platos del día, ni te enseña la carta. Nos sirvieron 3 raciones, ojo, raciones, no platos, alcachofas, tomate con ventresca -las dos hasta arriba de sal espolvoreada por encima, que es veneno para mi y para mucha gente- y unas almejas (15 de ellas). Luego pides la cuenta y la suma parece hecha a propósito: 65.00. Ya había estado en este sitio que es conocido por sus menús, pero claramente los domingos y festivos se dedican con estos trucos a estafar al incauto (yo, hoy, pero jamás y espero que esto sirva para que no haya otro como yo).

Comimos de raciones. Y la verdad q bien. Los huevos rotos malísimos. No entiendo como t pueden servir unos huevos con la yema frita. Luego unas copas.buen ambiente.

Me encanta el restaurante el Pescador, se come de maravilla, el trato hacia nosotros buenísimo, la comida excelentes os lo recomienda

Buen lugar, gran terraza donde probar gran variedad de pescados, ensaladas y raciones de todo tipo, buena calidad precio, volveré.

Atención muy buena, muy atento y amable el camarero. Buena terraza al aire libre y la buena calidad precio en la comida. Volveré

Reservamos mesa, llegamos puntuales y nos ponen a esperar. Viendo que no nos sentaban, preguntamos y el camarero nos da la siguiente explicación: “Es que ha llegado el jefe y le hemos sentado en la mesa que teníamos para vosotros” Tal cual. Ha sido increíble.

As always, first class treatment, first class food. A must for everyone once, then you'll decide whether you return or not.
Great place. Miss some of the usual waiters and the owner of course, but, the ones that are there, as professional as the rest.

Bueno, buen ambiente, me gusto mucho más la Sepia que el pulpo, y la atención de una chica encantadora, súper amable.

Producto bueno, ambiente normal y servicio MALO: Desagradables, antipáticos. Sobre todo la chica que está por la mañana. No entiendo como puede haber gente con esa actitud trabajando cara al público

Actualizo mi comentario de hace dos años. Sitio cada vez más batallero que empieza a dejar que desear. En pleno sol de verano, un mesa de 6 con un niño pequeño no son capaces de organizas las sombrillas, algunas sin apenas dar sombra en ciertos puntos, con el fin de darnos una solución. Se lo pedimos dos veces y el camarero muy molesto, con caras largas. Pues sinceramente, no es entendible como una mesa tiene hasta dos sombrillas y el toldo y una plenamente al descubierto. No soy muy pijotero pero no entendí la poca actitud y la arrogancia del camarero

Tuvieron otros fallos destacables como pedir un Rioja y traen un toro pero bueno, pasable (entre otros). Respecto a la comida, tienen platos aceptables y otros pura fritanga (el revuelto de gulas es un auténtico baño de aceite.parecía casi una sopa el caldillo que sobraba). Tampoco entiendo porque ofrecen en la carta tostas si luego te dice que solo en barra, hasta el punto de tener que ir a la barra para pedirla y sacarla (no se entiende. Si no queréis tostas en terraza, cambiar la carta).

En fin, de más a menos. Si bajaba poco, ahora menos lo haré.

Ubicado en Las Tablas. Su carta centrada en pescados y moluscos de calidad y generosas raciones.
Fuimos un grupo de 10 amigas y es preciso reservar, pero hubo un detalle que no nos gustó nada: Como habíamos reservado no podíamos escoger la opción de menú del día. Me parece incomprensible siendo viernes y cuando ea una opción de carta que ofrecen. El espacio entre mesas muy justo y mucho ruido. No nos fuimos muy satisfecha la verdad.

¡¡Me encanta el Pescador! Es un sitio donde te puedes tomar unas cañas, que siempre te acompañan con unas ricas tapas! Y te puedes comer un excelente pescado como hemos hecho recientemente un estupendo rodaballo. Que estaba de muerte! Con una atención excelente, porque todo el personal es muy atento y profesional! Sobre todo quiero hacer una mención especial al trato profesional y encantador que recibimos la última vez por parte de Alberto!

No entiendo cómo en una terraza tan grande no hay sombrillas disponibles para cubrir todas las mesas. Hemos ido 7 personas a tomar unas cervezas por la tarde y hemos pedido amablemente en un par de ocasiones si podían ponernos una sombrilla ya que íbamos con mi hijo de año y medio y nuestros padres. No han sido capaces de darnos una solución. Cuando nos hemos dado cuenta de que la mesa de al lado tenía dos sombrillas y, además, también les cubría el toldo del local, hemos vuelto a pedirles si podíamos compartir una de las sombrillas y, el camarero muy molesto, ha cogido la sombrilla y la ha movido hasta nuestra mesa con desdén para luego decirnos que si movía cualquier sombrillas alguien se quejaría. Entonces, ¿no sería mejor tener sombrillas de sobra si ya saben de antemano las que hacen falta para tener la terraza lo más cubierta posible durante las horas de sol?

Llevo yendo al Pescador unos 4 años. En este tiempo he visto como las raciones cada vez es de menor calidad y los detalles se van perdiendo. Lo único que no ha perdido calidad es la tarta de queso, que sigue siendo grande y exquisita.
El detalle de pedirte unas cervezas y que te lleven una tapa/pincho, hay veces que lo hacen y otras que no. Y muchas veces incomoda hasta tener q pedirla.
¿De qué depende que la lleven? Pues no tengo ni idea, pero desde luego los clientes que llevamos viniendo años lo notamos, al igual que la pérdida del buen trato que se tenia antes. No digo que ahora sea mala, hay gente que trabaja muy bien teniendo en cuenta la carga de trabajo que tienen, pero es cierto que muchas veces te quedas mas con las malas contestaciones que con lo bueno.
A lo mejor deberían de plantearse contratar a algún camarero más y no sobrecargar tanto al personal. No es un sitio caro pero tampoco barato, por lo que teniendo en cuenta que los fines de semana se llena siempre, no creo que un camarero más le suponga mucho gasto.

Reservamos mesa con un día de antelación y no nos informaron de que no podíamos pedir menú del día por haber reservado hasta que ya habíamos pedido las bebidas. Dijimos que nos marchabamos porque no queríamos comer fuera de menú y los camareros, de mala gana por lo sucedido, accedieron a darnos el menú del día. Aquí viene la segunda parte, comida nada del otro mundo y con raciones raquíticas. La carne, además de insuficiente, la sirvieron fría. Hay opciones muchísimo mejores por este precio en la zona, sin duda no volveré.

Los platos no estan mal. Menu del dia por 12 euros. Aunque una botella de agua mineral con gas 3 euros.

Muy concurrido en días laborables, lo que demuestra que su relación calidad/precio en los menús es buena

Es mi sitio habitual para desayunar cuando estoy por la zona. Estupenda atención y magnífica tortilla de patatas, de las mejores de Madrid