Ger Dental, Madrid

Este dentista ha sido un desastre. Te cobran cosas que no te hacen, los tratamientos no son lo que prometen.
Un mal servicio de dentista te hace la vida imposible y así ha sido. Ya no hay solución. Horrible.

Grandes profesionales. Muy amables y atentos. Me realizaron un curetaje y salí muy contento. Muchas gracias por todo! Trabajo de 10! Absolutamente recomendable

Mi experiencia muy mala, acepte un presupuesto de limpieza más reparación de dos piezas dentales de las cuales el llamado dentista andaba corriendo de una cabina a otra y terminó curando otras piezas que no estaba en el presupuesto en la llamada limpieza que me dijo que (tanta falta me hacía) fue la limpieza más rápida que e recibido de una higienista, al final de todo me anestesió para reparar las 2 piezas luego de que se me pasara la sedación tenía mucho dolor en una muela llame para pedir si me lo podía solucionar asistí el mismo día para que al final me mal atendiera y termino dándome cita a los 4 días para finalmente el día de la cita decirme que él lo había hecho bien y si me lo hacían mejor en otro sitio que me fuera allí ya que su clientela están muy contentos con ellos y al final un cerrar de puerta yo guarde silencio por educación pero ese trato no lo da una persona con educación de un llamado profesional que debe atender de buena manera a un cliente mi consejo que os doy es que pidáis el presupuesto desde el principio firmado para que al final no tengáis sorpresas

Llevamos años tratándonos toda la familia en esta clínica y el resultado no puede ser más satisfactorio. Todo el personal es muy amable y lo que es más importante, muy profesional. Totalmente recomendables.

Excelente clínica dental: la amabilidad del personal, las instalaciones, la higiene y los precios están dentro del mercado, un trato muy cercano y profesional.
Yo siempre había tenido mucho miedo a ir al dentista y aquí han tenido mucha paciencia conmigo y no he tenido nada de dolor.
La verdad que totalmente recomendable.

La higienista dental era terrible. Sintió que estaba tratando de establecer un nuevo récord mundial Guinness para la sesión de limpieza más rápida. El taladro seguía resbalando y apuñalando mis encías, haciéndome sangrar. Me quejaba constantemente, pero esto no la hacía más precisa y gentil. He tenido docenas de estas sesiones en mi vida, esto fue el doble de malo que cualquiera que puedas imaginar.