Granier, Madrid

Una maravilla unos precios increíbles y una comida deliciosa la atención espectacular perfecto para compartir con la familia y amigos

El local está un poco desaliñado, tienen poco personal atendiendo y bastante lento en más de una ocasión no había nadie cuando he entrado y he estado 10 minutos esperando a que saliese una dependiente que me atendió con desidia y sin ganas.
Se necesita más y mejor personal.

Pedí conocer los ingredientes de los pasteles y no podían decirmelos porque los desconocían. No tienen carta de alérgenos para ofrecer. Es una pena que en 2020 todavía carezcan de esta información.

Únicamente una chica trabajando en todo el local, haciendo cafés etc, sin poder limpiar las mesas tras el paso varios clientes, las medidas sanitarias aquí son simbólicas.

El sitio estaba muy sucio. Falta de higiene tanto en el local como en los baños. Granier no debería dar esa imagen.

Bollería como la de cualquier granier, barata y decente. Nos sentimos mal tratados por las camareras que te ignoraban, no te miraban y te hacian sentir hasta mal por como te hablaban. Me gusta granier pero no volvere a ir a este establecimiento en concreto

Tratan de servir lo más rápido, a precio ajustado a la calidad que ofrecen. Pero hago la reseña porque son ya varios meses que voy, y da igual la hora, los empleados, se lamentan entre ellos de las condiciones en las que se les estaría perdiendo trabajar.

Es triste ver cómo se nota que están estresados, y cómo los clientes más bondadosos, tienen que animarles para que no se sientan mal por tenerles esperando.

Ignorando las causas, pero comparando mi experiencia con establecimientos similares en dimensión y volumen, no parece que sea problema de los trabajadores.

Una conocida cadena de panadería, bollería y cafetería que se puede encontrar en cada barrio de Madrid.
El local de calle Alcalá es bastante amplio, con la sección de panadería separada de la cafetería. Numerosas mesas donde sentarse a desayunar y una decoración muy sencilla.
En cuanto al personal es bastante agradable, pero cuando hay gente el servicio es más lento de lo esperado.
En cuanto a la calidad de los productos es bastante buena. Buenos panes, empanadas y bollería. El café también es bastante correcto.
Por contra el precio de todos los productos me parece demasiado elevado para lo que ofrecen sin ser algo prohibitivo.
Me parece una buena opción para desayunar o comprar algún pan en concreto para alguna elaboración pero no el sitio más adecuando para comprar el pan a diario.

Cada 15 día hay nuevo personal y parece que hay nueva encargada y todo el rato fuera fumando y para enseñar creo k ella tiene k dar primero el ejemplo

Buen sitio para desayunar a primera hora, yo voy por la mañana y excelente, la atención lo mejor, lamentablemente los baños muy deteriorados y el local necesita adaptarse ya que hay otras cafeterías bastante llamativas.

Fui allí a desayunar y está muy bien por 3€ y poco poder tomar café, tostadas con tomate y zumo de naranja natural. Las chicas son muy amables, lo único que no me gustó fue el estado de los baños.

Cada vez baja más su calidad. Las tartas secas de llevar varios días en el expositor. Y poca variedad. Este Granier está muy descuidado!

Mi preferida en las cadenas de panadería, por el buen pan y la bollería, pero lo que más destaca es la oferta en bocatas y pulguitas con lechuga y tomate fresco. No he visto otras panaderías que hacían eso. Dependiendo del barrio, algunas franquicias llevan muchos años con el mismo personal y se crea ambiente de barrio como en una cafetería tradicional, con tono animadillo y convivial entre empleados y clientes.

Mala atención por parte de las camareras, atienden de mala gana y no tienen conocimiento de los productos de la panadería. Y los baños impresentables se corre el riesgo de infección un asco completo.

Más de lo mismo con este tipo de cafetería- panadería. Productos congelados, que están ricos recién hechos. Más tarde no hay quien los coma.

Cafetería amplia con bastantes mesas para acomodarse. Lo malo es la bollería prefabricada que sino la venden a la mañana la sacan por la tarde dura y han subido el precio de las ofertas en comparación con otras cafeterías.

Inpresentable el personal cogiendo la lechuga con las manos sin guantes tocando el dinero el cubo de la basura abierto. Echó vuna guarrería. Vamos para no volver a entrar.

Muy mala atención, las dependientas parecen un poco vagas y el local perece sucio, los productos están viejos y secos. No volveré a este sitio.

El cambio de personal continuo.crea duda el volver.hoy sin ir mas lejos.fuimos en familia.y el servicio fatal.suelos y mesas sucias.personal con mal humor.encina no dice k porque tomamos la leche caliente.si es verano.con una lentititud dudosa.hoy valoro con 2 porque ay personas.que no deben estar en el mismo saco.saludos.

Me pareció mas caro que otros Granier. Y Que te tengas tu que llevar las cosas a la mesa no me gusta.