Herbalist Silvia, Madrid

Soy clienta de este herbolario hace mucho tiempo y la verdad me tratan siempre genial. Estoy contenta con el trato y cuando no tienen alguna cosa me la consiguen inmediatamente. He leído algún comentario negativo quejándose de que no dejaron entrar porque estaba fuera de horario y que era una emergencia por ser intolerante a la lactosa. Le diría s estas personas que primero, ser intolerante a la lactosa no es una emergencia, yo lo soy y no considero que conseguir una botella de leche sea algo de vida o muerte. Mas bien hay que planificar las compras e ir a un horario bastante extenso por cierto, en el que esté abierto. Las personas tienen derecho a descansar e irse a su casa, con personas como estas una dormiría en el trabajo por lo que veo. Ni caso. Son encantadoras todas. No tengo nada más que añadir. Gracias a Silvia y a sus compañeras.

Sitio muy completo, te saben asesorar sobre cada producto, para saber si es compatible con alguna patologia que tengas, son muy majas y ademas tienen de todo, capilar, corporal y herbolario tradicional, seccion de alimentos ecologicos, veganos etc.
Totalmente recomendable. Siempre compro alli.

Siento el mal entendido, me equivoque de herbolairo, esperate, no encuentro mis gafas, bueno siento esto, gracias.
Me pican los huevo

La que dice ser la dueña deja mucho que desear para la atención con el público.

PD. Agrego a la reseña original, mi respuesta a la respuesta del Herbolario.

Queda claro que me está confundiendo, la reseña la hago por una visita de hace unos días, desconozco la situación que narra, y me parece poco acertado ponerse en evidencia con su respuesta, al parecer tiene unos cuantos episodios llenos de prejuicios y xenofobia. Lamentable.
Le recomiendo que revise su trato y las formas de llevar su negocio también online.

La atención al público es una tarea de mucha responsabilidad, siendo cliente de este establecimiento espere un trato considerado ante una necesidad, no fue así y entendiendo del respeto a los horarios hice gestos de ruego y señale hacia la nevera para tratar de comprar un producto puntual, era un lujo? No, es una necesidad ya que soy intolerante a la leche y además vegana. Dejó constancia de las tantas veces que acudí a ese lugar al leer las notas que ha escrito la dueña de ese lugar, desconociendome y luego confundiéndome con otra persona responde a otra opinión y donde deja por sentado que por la apariencia de la persona que quiso comprar pensó que le robaría! Es una pena. Las dependientas son absolutamente delicadas, profesionales y amables. Espero se fije bien la próxima vez que lea un comentario y no reaccione sino que sea empatica