House Cano, Alpedrete

Solo había un camarero para la terraza y nos fuimos después de 20' esperando a que el camarero nos atendiera

Si pudiera dar estrellas negativas a este sitio se las daba. Solo he ido dos veces a este lugar y de ahi no va a pasar, hemos ido "supuestamente" a cenar unas raciones y nos hemos vuelto con el estómago vacío. Llegamos a las 22.10 y eran las 22.55 y aún no nos habían tomado nota de las raciones diciendo que no sabían cuanto tardarían en la cocina. Solo hay dos camareros para todas las mesas que hay en la terraza, que serán 15 mínimo, cuando llevabamos nosotros un rato, llegan un grupo de 6 personas a la mesa de al lado y a los 10-15 minutos les toman nota, por qué a nosotros no? Pedimos una caña y un tinto de verano y no nos ponen ni aperitivo, cuando me dirigo al responsable a pedir una hoja de reclamación a parte de tenerme esperando me dice que espere un poco porque debe atender a las mesas de fuera para no recibir más quejas y me dice que me pase mañana a ponerla, perdona? Horrible, no me ha gustado nada ni el trato ni la espera, muy mala organización y mucho descontrol, si no dan abasto que contraten más personal que falta les hace.

Es un bar de pueblo, con un buen servicio y aconsejable para tomar una bebida.
El servicio de restaurante es de plato del dia, bastante normalito.
Hay que entender que por el precio del menú, no se puede pedir otra cosa

Buena relación calidad precio del menú. La carta es de raciones y picoteo y es bastante amplia. Los platos están bien elaborados.

La comida buena, pero la camarera que nos atendió es la persona más borde que me ha atendido jamás en un restaurante. Todo el rato hablando con desprecio y poniendo caras de "qué estúpidos sois" a todo lo que le decíamos. Lo nunca visto en un restaurante.

Sólo decir que hoy hemos comido en casa de Cano y el trato y la calidad, exquisito. EL CABRITO, no lo he comido en ningún sitio, como en Casa de Cano